El término de inepto o inepta, es el más pueril significado, donde se señala a la persona que carece de actitud para cierto trabajo o función pública. Asimismo, al rastrear el significado de negligente, hallamos que es quien no pone cuidado en lo que hace. Si hacemos lo mismo con la corrupción, seguramente encontraremos que se refiere a lo que altera la pureza, la integridad, o en una clara referencia, a lo que se rompe o, se hace pedazos, ya que el término deriva del latín "rumpere". El deleznable caso de la corrupción política, es cuando se le da un perverso uso al poder público, para conseguir prebendas, y riquezas ilegítimas. Y se abusa del poder para beneficio personal. El término contrario a la corrupción, es la transparencia.
¿Cuántos casos de funcionarios en estos últimos años hemos visto presos o que andan huyendo, involucrados en tramas de corrupción, que no han estado a la altura del cargo que ocupan o han ocupado?¿cantidad de veces he visto las estructuras del gobierno, ocupadas por personas con escasa, o ninguna formación, o conocimiento para el puesto que desempeñan?¿ no es común, y corriente, escuchar de lo ciudadanos acerca de los malos tratos autoritarios por parte de militares, ser poco amables entre quienes desangran el erario público, y por lo tanto debieran tener otra actitud ante quienes sostienen con sus pagos de impuestos al mismo que los maltrata?
Esto indudablemente corrompe al estado, y la función pública. Lo desgasta, corroe y pulveriza. Esto: ¿no se llama corrupción? Fin de la cita.
Graves consecuencias tiene la falta absoluta de gasolina en medio de la crisis por el covid-19. Las enormes colas cerca de las gasolineras se han vuelto otra pandemia.
La escasez de gasolina en el país con las reservas de petróleo más grande del planeta, es un problema crónico desde hace un mes en Venezuela, pero con la llegada del virus chino, se ha agravado en el peor momento, incluso en la Gran Caracas, que siempre lucia bien abastecida, porque es el epicentro de un posible estallido social.
Desde que el pasado 17 de marzo el presidente, Nicolás Maduro, anunció una cuarentena nacional para hacer frente a la emergencia provocada por el covid-19, las quejas de todos los ciudadanos, trabajadores, profesionales de los servicios de salud, productores de alimentos, por la falta de combustible son generalizadas.
Las estaciones de servicio, se encuentran tomadas por militares, policías, y colectivos belicosos, quienes en forma agresiva, informan que solo se suministrará combustible a los vehículos de la seguridad del estado, y de los servicios más esenciales. Quedando demostrado que entró en vigor un rígido plan de racionamiento nacional.
En el contexto actual de pandemia, los efectos de la escasez de combustible, para el cual, los expertos petroleros no atisban una solución a corto plazo, ya que se ataca las consecuencias, no la causa del problema, que son las recuperaciones de las operaciones de la refinerías paralizadas, y la producción de petróleo, que implica la puesta en marcha de pdvsa, con profesionales competentes en la materia, no con militares ineptos, de no empezar a solucionarse el sistema refinador, esto puede traer graves consecuencias en el corto plazo.
Las fuerzas de seguridad controlan el suministro en las gasolineras que abren para despachar gasolina racionada, militares en la bombas no es la solución del problema, es la consecuencia de haber dejado dañar el sistema refinador venezolano, que era uno de los mejores del mundo.
En su comunicado, el gobierno culpa al: "perverso plan del bloqueo de los Estados Unidos", que está impidiendo el suministro de insumos necesarios para la producción del combustible. Pero los problemas vienen de tiempos atrás, al dejar a pdvsa en manos de ineptos militares, y politiqueros de oficio.
A pesar que Venezuela es el país con las mayores reservas de crudo del mundo, la escasez de gasolina se ha hecho crónica por el deterioro de Petróleos de Venezuela (PDVSA) aquí el problema, no Donald Trump.
PDVSA, sufre los efectos de años de mala gestión, falta de inversión, y corrupción, este es el tumor maligno de la escasez de gasolina. Las refinerías del país colapsaron, y la producción nacional de gasolina es hoy inexistente.
El sistema de refinación venezolano, llegó a producir más de un millón de barriles de gasolina diarios, hoy el sistema refinador, está trabajando a 0,1% de su capacidad, me explicó un experto en la materia consultado.
Y lo más grave de esta crisis, es que los activos de PDVSA, siguen deteriorándose, y en caída libre por la falta de mantenimiento e inversión, lo que prevalece es la cotorra, y la muela politiquera, irresponsable, inepta y corrupta.
Para reponer la caída de la capacidad refinadora nacional, el gobierno ha optado en los últimos días por importar gasolina a cambio de crudo. Una tormenta diabólica para Venezuela, la falta de gasolina+covid-19.
La demanda mundial de petróleo se desplomó a la misma velocidad que el precio cayó por debajo de los 30$, menos de lo que pdvsa, y las empresas mixtas les cuesta producirlo. La industria petrolera venezolana se encuentra en un colapso histórico.
¿Quién se va a arriesgar a hacer negocios con Venezuela en el área petrolera y petroquímica, en un mercado ahora inundado de petróleo barato, y con está conflictividad política, y con la industria petrolera en manos de gente inexperta, y de militares?
En marzo Rosneft anunció el cese de sus actividades en Venezuela, y la transferencia de sus activos a una empresa propiedad del gobierno ruso.
¿Hay solución? ¿Pregunto? Cuando la población mayoritaria de Venezuela sufría de inseguridad alimentaria, mucho antes del coronavirus.
Si no se reduce esta conflictividad política, Venezuela seguirá sin tener quién le compre su petróleo, y muy difícil encontrar quién le venda gasolina. La escasez de gasolina es alarmante, y se nota con la parálisis de la economía productiva, con las carreteras, y ciudades del país desiertas, sino también en la estadística de la escalada del hambre, y de otras enfermedades.
En los últimos días, el gobierno informó de la reactivación, de la producción de gasolina en la refinería de El Palito, en el Estado venezolano de Carabobo, esperemos que sea una realidad su puesta en marcha, el hecho hablaría por si solo si desaparecen las colas en la región central del país. PDVSA afronta, un proceso de renovación interna de muchos de sus cargos directivos.
Antes de la cuarentena Venezuela, el mercado interno se chupaba aproximadamente unos 110.000 barriles de gasolina diarios, y que ahora solo se chupa unos 5.000 barriles diarios para abastecer a todo el país. De no poner técnicos expertos en la materia al frente de pdvsa, se pronostica una: "escasez de gasolina permanente a la cubana".
La escasez de gasolina en pleno virus chino, se teme que pueda provocar un grave desabastecimiento, en los mercados de alimentos, y farmacias.
Venezuela es uno de los países de América Latina que menos casos, y muertes, ha reportado por el covid-19. Pero el país es considerado por la Organismos de Salud Internacionales, como uno de los más vulnerables de la región, cuando los trabajadores de centros médicos, y hospitales no se pueden movilizar por la falta de gasolina, y la escasez del transporte público les resulta imposible ir a trabajar. Es una situación muy difícil, tomando en cuenta que no solo se atienden pacientes infestados por este virus, sino por otras enfermedades, ya que el número de personal de la salud resulta insuficiente.
La falta de combustible, la escasez de dinero en el gobierno, el impacto del virus, y la falta de acuerdos para paliar esta crisis, entre el gobierno, y la oposición, hacen aumentar las "probabilidades" de una fuerte escasez en la producción de alimentos.
Los agricultores, y ganaderos, ya andan chillando, por los múltiples problemas para transportar sus cosechas a los mercados, ante el martillo permanente en los puntos de control militar en el país, que son peores que el virus chino, y que el gobierno se niega a eliminar, y se teme que la cosecha de varios productos se pierda por el problema de la gasolina, y la matraca militar, y policial.
Los productores agropecuarios denuncian que el combustible para poner full las unidades lo tienen que pagar a 1 y 2 $ el litro a la mafia militar, ya que los que está suministrando en las perversas colas, no alcanza para cubrir las enormes distancias que separan los centros de producción de los centros de acopio. Se habla, y creo que será la solución en un corto plazo, de no reactivarse el sistema de refinación de pdvsa, que el gobierno permita la importación de gasolina a los privados, como hizo con los dueños de los *bodegones de exquisiteces y market’s, made in Cuba* utilizando la política neoliberal que tanto critican, calculando el precio, en unos 0,50 y 0.80 céntimos de $ de venta al público, aunque esto supone un aumento del precio, que los productores agropecuarios trasladaran a sus productos. ¡Por ahora el juego luce trancado, por la intransigencia!