Proyectos faraónicos que nunca cristalizaron

PDVSA: Las mentiras de Ramírez

Miércoles, 02/09/2020 04:06 PM

Nos hacen llegar un par de documentos donde aparece R. Ramírez ofreciendo declaraciones. Uno sobre el caso Harvest [https://www.sumarium.es/2020/08/28/ramirez-explica-el-retiro-de-la-demanda-de-harvest-y-expone-por-que-no-hay-gasolina/], donde se extiende a opinar sobre la escasez de gasolina y la situación del gas en Venezuela y el otro sobre una entrevista donde descarga contra N. Maduro [https://www.youtube.com/watch?v=msoY0NXGAHs&feature=youtu.be] y justifica a su manera, algunos de los señalamientos públicos en su contra. En ambas declaraciones muestra cifras inconsistentes con la realidad y deforma verdades.

Debe quedar claro que Ramírez deja su cargo a finales de Agosto’2014 y que por lo tanto su responsabilidad cubre el ciclo completo del 2014. A menos que ocurra un evento de conmoción mundial o accidente catastrófico, en la industria petrolera los indicadores usualmente toman tiempo para reflejar cambios. Basados en dicha premisa en realidad Ramírez entrega a su salida una producción de crudo que cayó desde 3.274.000 en 2005 a 2.899.000 BPD y una producción de gas de 7.422 MMPCD de gas. Entrega una empresa que pasó de 38.518 empleados en 2004 a 152.072 en 2014, entrega una deuda que ascendió desde $2.600 millones en 2006 a $46.200 millones en 2014 y galopa sobre un barril promedio criollo de $77.4 (2005-2014). Como veremos, Ramírez fue el artífice de una ilusión creada para confundir a H. Chávez y para posicionarse en el acceso a sumas mil millonarias de dinero para atender supuestos proyectos faraónicos que nunca llegaron a cristalizar.

MENTIRAS DEL GAS:

Extrañamente en medio de un ambiente de caída de producción y más aun; de sustitución de producción de hidrocarburos condensado, liviano, mediano (C/L/M), típicamente de mayor producción unitaria de gas por barril de crudo producido (RGP), por crudo pesado extrapesado (X/Xp), la producción de gas nación pasó de 7.008 MMPCD en 2005 @ 7.422 al cierre de 2014.

Para 2014, ni Cardón IV, ni CIGMA estaban incorporados, dado que la primera producción de gas costa afuera arranca en Julio’2015. Si la producción de gas de PDVSA Gas Anaco se había desplomado desde 1.665 MMPCD en 2005 a 760 MMCD en 2014 y si los proyectos de gas no asociado en Yucal Placer eran deficitarios; dicho aumento era iluso, era maquillaje, o provenía de la destrucción de activos; vía:

  • Del desinfle irracional de yacimientos de petróleo
  • De la interrupción de proyectos de inyección de gas

De cualquiera de las dos maneras, en realidad era un crimen cometido por la administración de Ramírez para no quedar expuesto ante H Chávez y luego ante N. Maduro, dadas las múltiples acusaciones que ya tenía en su contra para entonces:

Lo cierto es que ya para 2008 el déficit de gas en Venezuela superaba los 1.500 MMPCD, mientras que hoy los 3.900 MMPCD, de haberse sostenido el nivel de consumo de entonces. Tanto con el gas como con el crudo, Ramírez prometió mucho, pero cumplió poco. Prometió invertir en el Plan Estratégico 2006-12 uno $16.780 millones en proyectos gas para cubrir demanda interna; [https://www.aporrea.org/energia/n64803.html]. Prometió exportar gas para 2014; [https://www.noticiasdiarias.informe25.com/2013/07/ministro-ramirez-estima-que-venezuela.html]. Prometió una planta de GNL de 1.050 MMPCD y 4.7 MMMT/Año de capacidad; [https://hidrocarburoselmotordelmundoactual.blogspot.com/2007_01_07_archive.html]. Ofreció aumentar producción de gas de 6.300 MMPCD a 11.500 MMPCD para 2012; [https://lacomunidadpetrolera.com/2008/11/proyecto-gasfero-rafael-urdaneta.html]. Anunció $5.833 millones en inversión prevista para producción de gas en tierra, Costa Afuera, procesamiento, transporte, distribución y gas natural licuado. Prevé incrementar producción de gas a 14.438 MMPCD y 438 mil barriles de líquidos de gas natural (LGN) para el año 2017; [https://www.aporrea.org/energia/n189605.html].

Muy poco logró, sin embargo una porción respetable de ese majestuoso y exorbitante presupuesto, si se ejecutó hasta llegada la debacle del barril de mediados de 2014.

El desplome de la producción de gas tiene diversas causales, todas ligadas a la incompetencia y la corrupción. En primer lugar el usual maquillaje de cifras de producción durante la gestión Ramírez-Del Pino. En segundo lugar, la destrucción de PDVSA Gas Anaco iniciada en 2008 y de Costa Afuera desde su origen. El caso de Costa afuera fue y es un elefante blanco, cuyos costos para la industria como resultado de pésimas estrategias de negociación eran y son insostenibles. Era y es un proyecto estratégico y necesario al igual que la FPO, pero equivocaron la estrategia de negociación.

La otra causal surge como resultado de la producción desaparecida durante Ramírez-Del Pino, de más de 1.250.000 BPD de crudos C/L/M, de mayor volumen unitario de producción de gas desde las áreas tradicionales y finalmente, la caída del barril, las pésimas directivas una tras otra y la llegada de las criminales sanciones.

MENTIRAS DEL PETROLEO:

La composición de la producción de nuestros crudos llegado Ramírez a PDVSA era de alrededor del 19% proveniente de la FPO; es decir de pesado extrapesado. A su salida durante 2014 dicha proporción se había elevado al 45%. Es así como se produce la ilusión de grupo de Ramírez en materia de crudo, al maquillar el derrumbe de producción de condensado, liviano, mediano (C/L/M) con una producción de pesado extrapesado (X/Xp) proveniente de la FPO, dejando de producir un barril de $3.5 a $4 de costo de producción, por otro barril intensivo en operaciones y de $15 @ $20 de costo de producción.

En 2007 inicia la actividad propia en la FPO. Mientras la producción de la Faja pasaba de 724.000 BPD en 2007 a 1.246.000 BPD en 2014, con inversiones que superaban $15.000 @ 20.000 millones, las áreas tradicionales de Oriente y Occidente cedían en 1.251.000 BPD, mientras que la de GNL se abatía desde 172 MBD en 2007 @ 114 MBD en 2014. A medida que aumentaba la fracción de X/Xp, incrementaba proporcionalmente en un 82% la importación de crudos y refinados que antes se producían, pero que se dejaron luego de producir en el país.

El desinfle masivo de yacimientos y la interrupción de proyectos claves de recobro mejorado por inyección de gas, toma cuerpo entre 2008-2009 en Occidente y 2011 y 2012 en Oriente, para sostener la fabula de la producción gasífera, repercutiendo adversamente y de manera casi inmediata, en la producción de crudo de ciertos activos tradicionales tanto de Norte de Monagas como de Lago.

MENTIRAS DE AMUAY:

Según se desprende de la entrevista, la catástrofe de Amuay de Agosto 2012 donde fallecieron 47 personas, con 156 heridos, 50 desaparecidos y donde se ocasionaron perdidas por sobre $1.300 millones a nuestra nación, no tuvo mayor importancia. Según Ramírez solo se incendiaron unos tanques y no se originó mayor trauma sobre el CRP.

Según el mismo ex ministro la investigación; contrario a la normativa internacional realizada por ellos mismos, por Intevep, el Ministerio Público y organismos de seguridad y de inteligencia del Estado, nadie la confrontó. Ramírez, divaga sobre el hecho del seguro. No hubo indemnización para PDVSA.

La tragedia de Amuay sucede en agosto’2012 y en Agosto de 2013; un año después de ocurrido dicho siniestro, ningún organismo había emitido un informe oficial. Para entonces las evidencias ya habían desaparecido. Ninguna investigación por ente independiente fue permitida; más bien bloqueada y por lo tanto, un informe interno carecía y carece de fuerza para cualquier aseguradora. Pero más allá de ello, el hecho del seguro parte de que PDVSA presuntamente no estaba al día con los pagos del reaseguro a Cooper Gay (Londres) para el momento del suceso, lo cual nunca fue investigado.

Luego del accidente en realidad Amuay queda fuera de operación. Las plantas destiladoras detenidas y las unidades aguas abajo recirculando. Pero como excusa y distracción a años de abandono en el riguroso y necesario mantenimiento preventivo, la tesis del sabotaje afloró de boca de Ramírez. Según articulo publicado, con la tesis del sabotaje de Ramírez [https://www.2001online.com/en-la-agenda/146706/los-problemas-de-pdvsa-pican-y-se-extienden.html], PDVSA misma se puso la soga al cuello y nunca solicitó respaldo financiero de ninguna de sus aseguradoras, precisamente para evitar una investigación independiente.

Más allá del intento de Ramírez por ocultar las consecuencias reales de la catástrofe de Amuay, la explosión originada por escape de gas a través de sellos defectuosos por falta de mantenimiento, se originó ciertamente en el área de almacenamiento, pero su severidad y brusca onda expansiva, causaron daños severos en múltiples procesos que hoy aun sufren consecuencias. Equipos como esferas, tanques, bombas, tuberías y estructuras sufrieron averías y afectación entre un 20% y 100%. Se perdieron inventarios, se redujo la capacidad operativa en diversos procesas aguas abajo sensiblemente y se impactó la calidad de los efluentes producidos de forma permanente; incluso hasta el día de hoy.

Consecuencia directa de la catástrofe de Amuay es el notorio aumento en el nivel de importación de productos/refinados de un promedio de 20.000 BPD en 2010 a 80.000 BPD en 2012. Fue además la desaparición en un solo día de la capacidad disponible de exportación de gasolinas del país. Luego de 2012 Venezuela se convirtió de exportador a importador neto de gasolinas y otros refinados. Para Ramírez ello no tiene importancia.

MENTIRAS EN FINANZAS y EXPORTACION:

Por el lado de las finanzas, el valor de PDVSA representado en activos montaba en 2006 unos $80.529 millones, mientras los pasivos unos $27.426 millones, con una deuda financiera cercana $2.600 millones. Para 2014, el valor representado en activos se había elevado hacia $217.418, mientras que los pasivos y la deuda financiera habían superado $127.661 y $46.200 millones respectivamente.

Los saltos en el nivel de activos muestran máximo crecimiento particularmente en el entorno del inicio del plan Siembra Petrolera, de las expropiaciones de empresas de servicio y de la llegada de las empresas mixtas. Entre 2006 y 2014 mientras el valor representado en activos se expandía en 2.7 veces, los pasivos crecían en 4.7, mientras que el patrimonio prácticamente no evolucionaba, manteniéndose con un crecimiento marginal de 1.6 veces.

La razón era simple; el grueso de esos activos incorporados por Ramírez y su equipo no eran productivos. Eran tuberías, gasoductos y poli-ductos que nunca serian llenados en su totalidad con producción, pero que representaban negocios.

Entre dichos activos también abundaba la compra de edificios y propiedades a menudo infladas; eran procesadoras de yuca, cochineras. Eran posiciones en dinero producto de la especulación cambiaria, la cual toma cuerpo precisamente a partir de 2013 cuando los activos muestran una fuerte expansión.

Por el lado de las exportaciones con Ramírez prácticamente se perdió el mercado suramericano, norteamericano y se redujo en un 50% el mercado caribeño, con excepción de Cuba y Nicaragua. Los volúmenes exportados hacia los dos primeros destinos fueron sustituidos por Asia. Aunque hasta 2014 se mantuvo un nivel similar al de 2004, la nación prácticamente no percibió beneficio alguno producto del alza inusitada del barril, desde unos $33 en 2004 @ $104 en 2012 (cesta criolla), ni tampoco percibía ingresos por la totalidad del volumen exportado.

Por un lado el componente nacional en dichas exportaciones perdía peso, al ser gradualmente sustituido por una cada vez mayor fracción de componente de crudos y productos importados para el mejoramiento, dilución/mezcla de los crudos X/Xp y la dieta de nuestras refinerías. Crudos y productos que se dejaban de producir localmente.

Por el otro lado, la deuda inexplicablemente promovida por Ramírez en medio del alza sin precedentes del barril, comprometió un volumen cercano de dichas exportaciones de entre 43% @ 48% del total que no abonaban flujo de caja, mientras entre el ejecutivo y PDVSA dilapidaban esos mismos recursos en proselitismo político, clientelismo y masiva corrupción.

Honestamente el mal manejo de nuestra industria a partir de 2005 no ha parado. Al inicio fue un festín de derroches frente a un barril inéditamente elevado y donde resaltaba una gestión irresponsable, dispendiosa, los malos negocios y peores decisiones.

Llegado N. Maduro, tengo que concordar con Ramírez en que fue desastroso. Ha sido la predica del engaño y la destrucción.

Una empresa por naturaleza altamente tecnificada, con elevada propensión y exposición a elementos críticos y de riesgo considerable donde intervienen procesos medulares, no puede confiarse a obreros ni allá, ni en Pekín. La directiva debe forzosamente ser altamente competente y bien preparada, nada que ver con lo que realmente ha ocurrido donde aprendices o personajes fallidos pululan pretendiendo conocer lo que jamás han visto.

Acciones inéditas de parte de un gobierno que por obligación tiene que proteger los bienes de todos y que por el contrario, ha contribuido a la destrucción de la que hoy somos testigos. Pero también, acciones atizadas con el fuego de la traición de una oposición corrupta y vende patria, que ha favorecido sanciones criminales con el apoyo de intereses transnacionales.

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