El destino de Venezuela en el mediano y largo plazo es convertirse nuevamente en un suplidor seguro y confiable de energía para el mundo. Máxime ante la inminente desaparición de las reservas provenientes de al menos el 50% de los países hoy productores, en los próximos 20 años [Einstein Millán Arcia: Entre 8% y 9% del suministro fósil recaerá sobre Venezuela - Emisora Costa del Sol 93.1 FM (costadelsolfm.org)]. Las expectativas de precios del barril pudieran superar cifras impensables. Venezuela y Canadá serán 2 de los pocos países que quedarán de pie como productores de crudo en el continente americano. Ese es el verdadero escenario que no puede perder de vista.
No hay duda alguna que privatizar PDVSA es la idea que surge de los mismos centros de conspiración de donde surgió el sabotaje terrorista de 2002 y las sanciones que hoy tienen en vilo a Citgo. Mas allá de ser un imposible por las ataduras constitucionales, privatizar en masa PDVSA equivale a entregar ese futuro que es de todos, a las manos de unos pocos. Un destino nada distinto a lo que hoy sucede en el país por la ausente institucionalidad, corrupción e ineptitud, que tanto critican desde esa oposición que propone privatizar nuestra industria.
No se debe confundir un problema de índole político e institucional que es coyuntural, generado por una combinación de ineptitud, corrupción e instituciones a los efectos inexistentes, además de sanciones apoyadas por una parte de esa oposición que hoy pretende surgir como salvadora del país, con el potencial real de nuestra PDVSA.
Nadie tenga duda alguna. Una industria petrolera privatizada en presencia de instituciones débiles e inexistentes causaría el mismo resultado que la PDVSA de hoy en manos del madurismo.
PDVSA y sus hidrocarburos
Petróleos de Venezuela es totalmente recuperable. Rescatar la industria requiere; eso sí, de esfuerzo, conocimiento y apoyo político e institucional. Para hablar de su recuperación sostenida es necesario fijar magnitudes. En primer lugar, se requiere de un precio del barril por encima de cierto nivel tal que garantice bajo ciertas premisas operacionales y financieras, el rápido retorno de capital. Se requiere producir por encima de cierto volumen, tal que se traduzca en una ventana de tiempo realizable para producir nuestras reservas. Ese umbral de precio y volumen nacen de la visión estratégica, de la eficiencia y del desempeño operacional, además de ciertos criterios y ajustes organizacionales que habrá que implementar.
Dada la magnitud de las reservas haría falta acelerarlas diferencialmente hacia el 1%, de manera de poder recuperarlas en el entorno de 70 a 80 años al 75 percentil. Este nivel tiene su razón de ser y se basa en la tasa energética y economía del activo. Es acá en este último punto, donde algunos se anclan para justificar la privatización, perdiendo de vista que ninguno de los socios de la apertura durante 5 años entre 1993 y 1998 pudo acercarse a su objetivo volumétrico. Shell por ejemplo, termino vendiendo su participación a Maurel & Prom.
Quizá quienes recomiendan privatizar hablan desde su fracaso, ya que no pudieron levantar por si solos sostenidamente la producción de PDVSA en 21 años desde 1975 hasta 1996. A esos eruditos les costó más de 9 años desde 1975 hasta 1984 para poder revertir la caída de producción, aun contando con yacimientos e infraestructura mucho más jóvenes y una industria con mucho menor nivel de entropía.
A esa vieja PDVSA le costó 22 años desde 1975 hasta 1997 para superar 3,000,000 BPD, aunque con la ayuda de las transnacionales de la nefasta apertura petrolera, que dicho sea de paso nada bueno dejaron a Venezuela.
Son los mismos elementos de la oposición vende patria y sus secuaces de la vieja PDVSA, los culpables de que Citgo este hoy a punto de perderse, ya que fueron precisamente las sanciones propiciadas por ellos mismos, las que hicieron que Venezuela cayera en default, ya que cumplía con sus obligaciones hasta incluso 2017.
En cuanto al precio del barril, una PDVSA bien gerenciada se perdería de vista. Venezuela es el único país en el continente y quizá uno de los pocos en el mundo, que puede producir con costo menor a $10 por barril. Indistintamente de cuál sea la cifra, es un país con inmensas reservas de petróleo por desarrollar. Solo los 26,000 MMBls de reservas de condensado, liviano y mediano, es 4 veces más de que hoy tiene México, 3 veces superior a los recursos (no reservas) que dice tener Guyana y 2 veces más de lo que le queda a Brasil.
Nosotros hemos hablado sobre una visión escalonada de la producción partiendo de un nivel base de 1,000,000 BPD. Dicho plan de crecimiento amerita al menos de un horizonte de 8 a 9 años partiendo del nivel base. Para sorpresa de los falsos expertos que solo visualizan escenarios apocalípticos, el apalancamiento del nivel base e incluso el despegue de producción seria sencillo, ya que existe un inventario de cerca de 14,000 pozos inactivos, de los cuales un 45% a 55% es recuperable con tasa promedio de 150 BPD/Pozo a 200 BPD/Pozo. Por supuesto que no se trata de apuntar con el dedo y abrir el pozo. Se trata de cumplir con ciertos protocolos técnicos y gerenciales para que dicha acción pueda prosperar correctamente.
Esta sería la porción de nuestro plan donde se establecen las bases para el arranque de su recuperación, la cual podría tomar de 3 a 9 meses. Durante dicho periodo, la producción pudiese no repuntar establemente, pero una vez cumplida dicha fase inicial, se estaría en capacidad de dar continuidad hacia las distintas etapas de crecimiento subsiguientes.
La estrategia anterior va acompañada de un plan de apalancamiento financiero propio, de un plan de avanzada técnico-operacional y de la necesaria reorganización vertical y horizontal de la industria.
En cuanto a la capitalización de las operaciones y el presupuesto de inversión necesario para atender una posible situación de cuellos de botella masivos [Einstein Millán Arcia: ¿Cuánto necesita Pdvsa para alcanzar 3 MMBPD? - Emisora Costa del Sol 93.1 FM (costadelsolfm.org)] en la infraestructura y procesos, hemos asegurado que PDVSA; en la situación en la que se encuentra, posee mecanismos que le permiten capitalizar sus operaciones y su presupuesto de inversión y de gastos, al menos para el primer ejercicio fiscal. Financiar los ejercicios posteriores seria cuesta abajo, siempre y cuando los resultados de ese primer año de gestión sean exitosos y para ello, la industria debe forzosamente ser puesta en manos calificadas y lejos de toda injerencia político-militar.
De manera que no se trata de que sea privatizada o no, se trata de la comunión de factores que en realidad nunca han existido en Venezuela. Privatizar PDVSA en un estado cuyas instituciones no funcionen es la predica del fracaso, ese mismo fracaso que la ha llevado al lugar en que se encuentra. En consecuencia, el control y manejo de la industria petrolera debe permanecer en manos del estado tal y como hasta ahora ha sido, pero de un estado cuyas instituciones y leyes funcionen y sean respetables.
Habiendo dicho lo anterior, nuestra propuesta si incluye la participación selectiva de capitales privados en ciertos negocios; bajo la batuta de PDVSA, que deben ser jerarquizados teniendo el interés del país y de la industria por delante. Esas inversiones irían dirigidas hacia apalancar la producción desde ciertos activos, bajo una nueva estrategia de negocios que por ahora nos reservaremos. Pero reiteramos nuestra posición totalmente antagónica con cualquier intento de privatización en masa de PDVSA.
La privatización en masa es precisamente la propuesta derivada desde esos grupos e individuos que no por casualidad, han participado en el sabotaje terrorista y en la imposición de sanciones en contra de PDVSA y Venezuela en alianza con intereses extranjeros. Esos mismos grupos que en el pasado terminaron estafando a miles de incautos inversionistas en la apertura petrolera colombiana [PDVSA: La Huella Putrefacta de la Mitocracia Ad-Hoc. Conspiración y Retos - Por: Einstein Millán Arcia @EinsteinMillan (aporrea.org)]. Los mismos grupos que intentaron poner mano a la refinería de curazao [Einstein Millán Arcia: La patética actuación de Luis Giusti en curazao. La penosa huella del jefe de la mitocracia - Emisora Costa del Sol 93.1 FM (costadelsolfm.org)] utilizando información fraudulenta. Y los mismos elementos que se autodefinen como honestos y expertos petroleros [Einstein Millan Arcia on X: "El "experto" directivo toro Hardy, hoy asesor de @VenteVenezuela; prácticamente sin experiencia en la industria petrolera al momento de la foto para entonces, fue acusado de corrupto y juzgado por aceptar soborno de #Occidental. LEA????????" / X (twitter.com)].
La mayoría, sino todas las propuestas que nacen de esos grupos están enraizadas en el aire, ya que no poseen la información actualizada necesaria para poder hacer un diagnóstico objetivo de la situación y el potencial real instantáneo y futuro de nuestra industria. Sin lugar a dudas tal y como hoy está, PDVSA es totalmente recuperable siempre y cuando estén dadas las condiciones políticas e institucionales necesarias para tal efecto. Hay que reedificar las instituciones para poder llevar la confianza de vuelta al país y hay que redefinir un mejor futuro político para el país antes de pensar en una economía y una industria renovada.
Pero repito, nadie que haya pedido sanciones en contra de Venezuela, ni nadie que haya participado en el sabotaje terrorista de 2002, puede volver a poner mano a institución, ni recurso alguno de nuestro país. Nadie.