Bradley T: Smith es el director de la Oficina de Control de Activos Extranjeros. Representa a la oficina norteamericana que regula las sanciones iniciadas en contra de Venezuela desde el año 2015. Ahora, han anunciado bajo la Licencia General N° 5N la autorización de ciertas transacciones entre PDVSA y los Bonos 2020.
Pero, ¿qué son los Bonos 2020?
Venezolanos ubicados en territorio norteamericano han abogado para que se haga efectiva la subasta en la demanda incoada contra CITGO. Como antecedente tenemos que el gobierno venezolano colocó como garantía el 50.1 % del capital social de este Holding para que sirviera como respaldo y así conseguir dineros dirigidos a proyectos nacionales.
Pero la cancelación de los intereses se imposibilito tras la aplicación de las conocidas sanciones. Esto trancó el juego, y desde Norteamérica aprovechándose tras la vía judicial fue aprobada por la Corte de Delaware un remate del Holding CITGO por un irrisorio monto de catorce mil millones de dólares, cuando la verdad es que su valor sobrepasa los ciento veinte mil millones de dólares.
Pero, ¿Dónde nos encontramos? Dimos como garantía a CITGO ubicada en territorio norteamericano. Su sede administrativa está sobre este territorio, y Venezuela en su interés nacional puede celebrar contratos aceptados por la Constitución de 1999.
Aun cuando todo ha quedado atrapado tras las sanciones, generando un altísimo conflicto a los Demócratas, pues los intereses de este complicado caso están fundamentados en el espíritu de maldad y conflicto Republicano. Pero los provechos para ambos siempre estarán ubicados en el origen de las decisiones más difíciles.
Pero, mientras —Republicanos y Demócratas— se da la destrucción de CITGO los Republicanos tratarán de quedarse con todo, mientras los Demócratas deben garantizar su estabilidad para su segundo periodo.
Cuando el Departamento del Tesoro estaba en manos de Donald Trump se impidió por medio de decreto el congelamiento de cualquier transacción de estos títulos y para esto se entregó en el 2019 a Juan Guaidó la administración compartida de CITGO. Compartida entre norteamericanos y una Junta Ad hoc. Desde entonces su sucesor —Joe Biden— ha lidiado tras los problemas armados y dejados por Donald Trump y el autoproclamado venezolano.
Pero la percepción de daños para los Demócratas ha sido de tal magnitud que al asumir la presidencia con su equipo mandaron al desprecio del olvido a Juan Guaidó. Incluso, cuando comienzan a abrirse las licencias el mismo Biden señaló dos importantes aspectos.
Primero, lamentó la decisión del embargo y la idea de una subasta iniciada por la Corte de Delaware, pero la segunda fue mucho más importante al señalar que tras la primera licencia el gobierno venezolano podía ir cancelando sus deudas con los acreedores de los Bonos 2020.
Ahora hay una nueva decisión jurídica por parte de otra Corte que reemplazó a la anterior y la cual busca claramente alejar los reclamos de los deudores de los Bonos 2020. Estos deudores se sumaron por intermedio de la vía judicial la cual busca el remate de CITGO bajo una demanda injustificable. Venezuela nunca ha negado los intereses adeudados, solo que se ha visto imposibilitada al momento de cancelarlos producto de las sanciones impuestas por los dos últimos gobiernos de EE. UU.
Ya lo advertía antes de finalizar la primera quincena de julio del 2014: CITGO: Nuestro mejor monento - Por: Miguel Jaimes Niño @migueljaimes2 (aporrea.org) y posteriormente volví a señalarlo: Volvemos a CITGO - Por: Miguel Jaimes Niño @migueljaimes2 (aporrea.org) Entre otras cosas hemos quedado atrapados en las peleas de los bandos de Donald Trump y Joe Biden, artífices de la gran trama en contra de Venezuela.
También lo señalé primeramente el 28/4/2019 al inicio del mandato de Joe Biden: Este es el mejor monento de Venezuela con Estados Unidos - Por: Miguel Jaimes @migueljaimes2 (aporrea.org)
Ahora, cómo debe aprovechar Venezuela esta lamentable situación jurídica la cual ha trancado el juego entre el pago de los bonos y lo cual llevó a la renuncia de Carlos Vecchio al frente de un parapeto de la embajada venezolana en Washington.
Hay un nuevo escenario. Es la flexibilización de sanciones acordadas desde el 2022 en cuanto a las licencias y sus extensiones.
Ahora con la decisión de una corte superior pasándole por encima a la Corte de Delaware se ha paralizado la venta de CITGO hasta bien entrado el año 2025. Estas extensiones han impedido la subasta acordada y toda la fuerza de un juicio amañado ha quedado destruido.
El asedio al fortín de los acreedores ha imposibilitado la ejecución del laudo arbitral iniciado por el juez de Delaware lo cual ha quedado en el pasado. Ahora la pelea se traslada a una instancia superior y hasta más allá del 2025 nada va a beneficiar a la minera canadiense Crystallex, quien pretendía tras la compra de una decisión judicial gozar de estos activos por compensación de un contrato de minería del año 2011 el cual no sobrepasaba al momento de esa negociación ni mil millones de dólares.
Crystallex ha tratado bajo la figura del capricho un caso que ha hecho como suyo, pero sin propiedad.
Pero las salidas se cierran para EE. UU. y una de estas es comenzar a despolitizar al menos el caso CITGO y dejar de judicializar una demanda que no cabe en ninguna de sus cortes.
Para Venezuela la ventaja del caso CITGO ha sido la irracionalidad jurídica de una corte que ha tenido que imponerse ante otra y suspender el juicio. La razón la tiene el gobierno venezolano pues ha advertido que, tras los oscuros intereses de las sanciones, se han dado mínimos entendimientos para llegar a acuerdos entre las partes.
En EE. UU. han pasado por encima de sus mismas leyes, algo sagrado para ellos, y en su sistema jurídico y judicial es irracional querer utilizar decisiones las cuales han dirigidas a la satisfacción económica de un bien que no les pertenece y de darse afectará seriamente sus servicios de abastecimientos de combustible, esto también es inconstitucional, aparte de ser la causa para que ambas partes mantengan diferencias irreconciliables.
De no ser así, hay otras maneras y formas distintas hasta ahora desconocidas de negociar el juego perverso de los intereses en el valor de los Bonos, pero esto le corresponde solucionarlo a Venezuela, pero, primero debe destrancar el juego de las sanciones.
Pero si no se apartan las sanciones mantenidas contra CITGO los Demócratas corren el riesgo de anarquizar aún más este asunto. Estados Unidos requiere brindar una solución a su seguridad energética y parte de ella está en Venezuela.
Finalmente, cuando creemos que la ultraderecha actúa solo en contra de Venezuela, esto no es así. Están actuando más fuerte y directamente para que los Demócratas no sean reelegidos.