¿Hay razones para robar?

Política, mentalidades y delitos

Sábado, 15/06/2019 01:58 PM

Hace muchos años había un personaje popular en Cumaná que deambulaba por sus calles, se detenía un momento a disfrutar del frescor del parque Ayacucho, luego seguía a la plaza Bolívar, pasaba por la casa del poeta Andrés Eloy Blanco, y tomaba rumbo hacia los predios de Ramos Sucre, y en su andar comentaba…el tiempo cubre y descubre….el tiempo cubre y descubre…

¡"Ay Cumaná quién te viera y por tus calles paseara"! Cumaná y el Estado Sucre, "Tierra de Gracia", territorios iníciales de Venezuela, tierra buena de María Rodríguez, la Sirena de Cumaná; Luis Mariano, el poeta de Canchunchú  Florido, Cruz Quinal, de Cumanacoa, y su bandolín morocho, y una ¡Guará! El Mariscal Sucre…. ¡Ojalá que alguna vez podamos disfrutar de nuevo tu hospitalidad!

Aquél caballero andante de Cumaná, por eso de la formación euro-céntrica, que uno ha recibido; en estos tiempos de insolentes agravios a la República , nos hace recordar a Diógenes de Sinope, quién con una lámpara recorría las calles de Atenas "buscando un hombre honesto".

Es inevitable, en tiempos de penurias y dolores sociales, con una República agredida desde flancos diversos, intentar buscar explicaciones en el pasado, para no quedarnos en "simplezas políticas", muy frecuentes en el presente.

Se le atribuye a un prominente político venezolano del siglo anterior la expresión:

"En este país los funcionarios roban porque no tienen razones objetivas para no robar"

Este no era cualquier político, le sustentaba una larga experiencia partidista y gubernamental, además de sólida formación académica. Durante buena parte del siglo XX, Gonzalo Barrios fue vocero importante de AD, hubo un momento que funcionaba como una especie de "Oráculo de Delfos" y convocaba a los medios a su vivienda, de donde salían las "interpretaciones" de la vida y línea política gubernamental venezolana. También por aquellos tiempos otro importante líder de la misma tolda política, acuño la frase: "No somos Suizos". Todo ello, no era otra cosa que el pragmatismo hecho Filosofía gubernamental, lo corroboraba claramente Gonzalo Barrios en otra expresión que se le atribuye:

"En materia de compras de armas era preferible pagar la comisión a los militares y que no compren nada".

Corrían los tiempos de la "Chatarra militar" cuando los vehículos anfibios en las prácticas, se sumergían en el lago de Valencia para no salir jamás.

Ahora bien, con la llegada de Chávez al poder y la implantación del Bolivarianismo, se llegó a pensar, dada la visión y legado ético del Libertador, sustento doctrinario del proceso político; que por fin, se iba a liberar la Hacienda Pública venezolana, de la larga e histórica mácula de la corrupción. Lamentablemente no ha sido posible "exorcizar" a ese "Demonio". Y, por el contrario, los rieles de esa locomotora, se adecuaron sin mayores tropiezos a los nuevos tiempos. Hace poco, le oí a un alto, altísimo funcionario del poder, en un programa de TV, expresarse de un ex-alto. ex-altísimo, y ex -compañero cupular algo así:

"si, ese se fue y anda hablando por allí, limpio no se fue" (¿?).

Recientemente, un protagonista de estos veinte años del proceso Bolivariano, en su carta de renuncia pública a un alto cargo apuntaba:

"Me voy (del cargo) sin rencores y sin dinero".

¿Qué entender de todo esto? ¿Del gobierno se sale forrado o pelando? ¿Hay en la "revolución bolivariana" razones para robar? ¿Entonces, qué es una Revolución? ¡Caramba! ¡Caramba! ¿Cómo entender lo que decía uno de los mayores pensadores de la social-democracia adeca, sobre este tema?!Claro! ¡Claro! , no hay que confundirse, este líder no estaba haciendo una revolución, y, ni por carambola en su comentario hablaba de ello.

La verdad, es que he llegado a pensar que este asunto, probablemente sólo pueda interesar a los de a pié y fundamentalmente a los "pendejos" que somos unos cuantos (Uslar Pietri-Dixit), pues un "Forrao" anda en otra cosa, bien acompañao y protegido por el ya citado Demonio, corrupto y corruptor; hasta nos han hecho albergar la idea sobre su accionar inmortal.

Sin embargo hay quienes se salen de esos rastrojos ardientes sobrenaturales, fatalistas y conformistas, y lo ubican en Mentalidades, Culturas, vivencias más terrenales, menos retóricas y menos lenguajes agazapados y encubridores. Sí nos acercamos a esta última manera de pensar, entonces debemos acudir al pasado histórico, y dejarnos de pendejadas.

El año 2007, el general Alberto Mûller, alto jefe del PSUV, comentó:

"Chávez estaba sentado en un nido de alacranes".

Doce años después un importante hombre del proceso político Bolivariano, Julián Isaías Rodríguez, en su carta de renuncia al cargo de embajador en Italia, dice:

"Renuncio Presidente, a mis dosis de insomnio, estrés, aflicción y a las víboras con cabeza triangular que desde hace mucho tiempo lo acompañan "

Pero lo más grave de todo esto, es que mientras estos animalejos ponzoñosos, alacranes y víboras, integren y dominen el Arca de Noé, la futura humanidad venezolana tendrá un futuro incierto; pues imaginar sus andanzas en los pasillos, despachos, oficinas y dependencias del poder, combatiendo entre ellas "rodilla en tierra".

Estas opiniones tan calificadas, preocupan y nos deben ocupar, pues no se trata de narrativas oportunistas opositoras identificadas con intereses contrarios a la República...

Mientras eso ocurre, aguas abajo en la nación, la anarquía miserable, con su carga de envilecimiento, está copando el discurrir cotidiano de las multitudes pobres, hasta en las más nimias transacciones de la vida común, con las inaguantables: "mordidas", "negocitos del gas", "los puntos" donde cobra el comerciante y cobra otro en otro lugar por ser propietario del punto—Vaya allá—y te dan un papelito.

El ciudadano que con su camioncito 350 cargado de plátanos decidió no venir más al pueblo a traerlos, por cuanto eran demasiada las veces que tenía que dejar plátanos en las numerosas alcabalas que tenía que pasar ¡Colabore! ¡Colabore!, llegándole en consecuencia al usuario un producto cada vez más costoso; reavivándose en pleno siglo XXI, el Impuesto Colonial de "Alcabala". El "colabore", se ha extendido en todo, también con funcionarios de Corpoelec, para colocar un Tabaco u otro arreglo eléctrico en la comunidad, y por supuesto, no escapa la irregularidad del CLAP, del cual sabemos sus constantes aumentos del costo, pero muy poco de su presencia física en diversos sectores, quedando todo en promesas y buenas intenciones; y para remate hasta una Carta de Residencia expedida en algún Consejo Comunal ya tiene precios variables, antojadizos. Cualquier lector sabe lo que significó, y como ha derivado la "mordida" en México…. Mientras tanto, los alacranes y víboras se vigilan y acechan mutuamente y esa actitud les obliga a atrincherarse en sus Bunker. Y sabemos que esas cosas paralizan.

En una oportunidad, en una extraordinaria iniciativa, Chávez, hizo distribuir masivamente la obra de Víctor Hugo "Los Miserables" ¿Sabría el comandante lo que iba a ocurrir en Venezuela e intentó alertarnos de cómo se expresa la miseria humana en momentos de crisis?

Mientras los Alacranes y la Víboras, están en lo suyo, ignoramos nosotros, quién ganará, pero si sabemos quién está perdiendo fuera de los predios del poder.

LA REVOLUCION ES CULTURAL

Nota leída aproximadamente 1866 veces.

Las noticias más leídas: