¡Curiosidades! Monetaristas llevan leña de “maduristas”, pero mandan con Maduro. Nicolás Maduro empujó carro de Betancourt

Miércoles, 26/02/2020 04:56 PM

Los monetaristas entran a Miraflores como perro por su casa. Desde el BCV, donde se decide la política monetaria van y vienen a Palacio que no les queda muy lejos. Esta entidad está ubicada, si no se me olvida, dado el tiempo que dejé Caracas para siempre, cerca de la esquina de Carmelitas, de la cual tengo un recuerdo vamos a llamarlo curioso.

Betancourt venía en su vehículo que le conducía desde el palacio legislativo, donde había tomado posesión de la presidencia y se dirigía a Miraflores. Los jóvenes adecos, pertenecientes a la izquierda, pese habernos opuesto a su candidatura por preferir la de Rafael Pizani en función de la unidad, habíamos como declarado una tregua, dado que al fin el "brujo de Guatire" se había impuesto en la disputa interior y hasta ganado las elecciones para lo que bastante contribuimos. Cuando el vehículo llegó a la esquina de Carmelitas, justo estando al frente de la vieja oficina de correos, y giraba a la izquierda para entrar al otro lado del canal de la avenida, cuyo nombre creo es Urdaneta, y dirigirse a Miraflores que está a una o dos cuadras, se detuvo y se le apagaron los motores. No recuerdo bien si este se accidentó o si fue una medida tomada en virtud de la multitud que le rodeaba. Y, en aquellas circunstancias, hubo que empujarlo.

Lo curioso del asunto es que entre quienes aquel vehículo empujábamos estaba un grupo de jóvenes adecos que vivíamos dos cuadras más arriba, esquina de Balconcito, en la pensión del italiano Don Atilio, como subiendo de Altagracia a San José. Y de ellos, entre otros, recuerdo a Leopoldo Amundarain, un cumanés como yo, que recién había regresado a Venezuela desde Colombia donde había vivido exiliado por el gobierno de Pérez Jiménez y un joven falconiano, alto, flaco, casi calvo, de bella y humilde sonrisa, llamado Nicolás Maduro, padre del ahora presidente.

Decía pues que, los monetaristas son quienes manejan la política monetaria del gobierno con la anuencia del actual presidente. Que sepamos este está conforme, tanto que la avala y hace suya. Y ellos, justo están en donde están porque no hay disparidad. Nadie puede decir que Maduro está en conflicto con los monetaristas y estos alzados hacen lo que le da la gana desde el BCV en contra de los deseos de aquél. Uno puede querer ser muy mentiroso porque quiere que los deseos personales se hagan reales, pero en este caso, esa vaina es como demasiada difícil.

Pero también, ¡curiosidades de la vida!, hay una larga lista de "maduristas" que comienza con Pascualina Curcio, sigue con Julio Escalona, Boza y Valdez o "Boza Con Valdez", José Gregorio Piña, que son todos ellos economistas y hasta gente como Mario Silva, la señora María Alejandra Díaz, que no son de esa profesión, pero envían el mensaje que aquellos dictan desatados contra los monetaristas a quienes acusan de parte de la responsabilidad de la inflación y el deterioro del salario. Y de paso, como sugiriendo a estos desatados en destruir a Maduro. Mientras tanto, Maduro calla y otorga.

Sobre el fondo del asunto, por respeto al lector, no asumo posición radical, pero como simple asalariado o mejor jubilado que sufre las inclemencias del tiempo y simple observador, sé bien que el monetarismo ha demostrado ya hasta el cansancio que no va a contener la inflación y que esta sube sin medida, pese se congelen los salarios y los créditos. Eso me hace dudar, por no decir estar en contra, del monetarismo. Me remito a una pregunta ¿cuánto subieron los precios desde el último aumento salarial y estando los bancos cual cementerios porque la gente anda limpia?

Pero, quienes nombré antes, no sólo están en contra sino que hasta muestran cifras que, según ellos, revelan como no es el aumento de la circulación monetaria lo que determina el fenómeno inflacionario. Y yo lo creo, salvo que no daré argumentos, porque no hacen falta para lo que me propongo y no soy quién para hacerlo; nadie y con razón, me daría validez.

Lo que vale la pena llamar la atención y es lo que quiero, como para los contrarios al monetarismo, quienes por cierto, otra de las curiosidades de todo este asunto, hacen uso de medios de comunicación del Estado sin discreción ni limitaciones para descargarse contra la política monetaria del gobierno que, según ellos, es sólo del Banco Central. Pese la realidad revela contundentemente lo contrario, pues en eso autoridades del BCV y gobierno marchan "pegaos" y juegan en el mismo equipo.

Es decir, hay una tendencia cada vez más amplia del oficialismo que se pronuncia contra el monetarismo que es la política del gobierno y por ende de Maduro y para eso usa con libertad los medios del Estado. Pero presentan a Maduro como ajeno al asunto.

¿Cómo entender esto?

Es cierto, ya es habitual, cosa que parece como improcedente y hasta impertinente, sectores del oficialismo y madurismo abusan en la práctica de excusar a Maduro de toda responsabilidad y se descargan en otros. Eso ha venido sucediendo con las políticas sobre precios, salarios y fundamentalmente en el área petrolera. La culpa es de otro y Maduro es ajeno a eso. Ofrecerían entonces un Maduro como ajeno a todo, víctima del engaño de quienes manejan los asuntos. Y para eso, tienen a su disponibilidad los recursos del Estado. Es decir, a los monetaristas se les aprueba y ejecuta sus políticas y a quienes se le oponen, dado los desastrosos resultados, también se les apoya para que contra aquellos despotriquen siempre que la imagen del presidente aparezca como ajena al asunto. Entones el presidente de verdad estaría con los monetaristas, siendo él monetarista y los "maduristas" quedarían para excusar al presidente imaginándole en cautiverio por aquéllos.

Pues otra curiosidad en todos estos asuntos, es como en los medios del Estado, VTV, por ejemplo, Boza y Valdez, La Hojilla, etc., son usados abiertamente para discrepar de la política monetaria del gobierno. Es como si hubiese un acuerdo secreto en todo eso o como se decía en Cumana, "en esa vaina hay un juego e´ tango".

Lo que parece evidente de todo esto, es que todo el peso de esta agobiante crisis lo soportan los asalariados. La medida estrella de la política gubernamental es contener el salario. Tanto es esto así, que aquí sucede otra curiosidad, como que un gobierno cuyos integrantes se dicen socialistas y revolucionarios, como nunca antes en la historia nacional, han desatado una guerra contra la contratación laboral y las conquistas derivadas de ellas. Ya no se trata sólo de contener el salario sino de negar otras cosas como los días o meses de aguinaldos, vacaciones y otros beneficios, entre los que destaca el relativo a la salud. El gobierno usa una trampa, habla de su disposición de aumentar salarios cada cierto tiempo o, como papá bueno, lo hace sin que se lo pidan, pero justo en eso está la caída, contiene las luchas salariales y otorga aumentos, cada cierto tiempo, al margen de los contratos y muy por debajo de los índices inflacionarios. Casi iguala el salario, para sustentar su presunto Adhesión a la "igualdad", pero se cuida de igualar por debajo. Todo esto acontece mientras se habla de una especie de acuerdo sordo entre el gobierno y la empresa Polar, lo que es, por sus resultados, con todos los empresarios, de donde estos adquieren el derecho y libertad de hacer. Y es también curioso, como cada aumento chucuto de salario y en base a una moneda súper devaluada, siempre estará precedido de un aumento de la inflación, la que se volverá desatar con posterioridad para darle la razón a los anti monetaristas.

El juego parece como sencillo. Los anti monetaristas no son tan distraídos como para creer a Maduro de su parte. Uno no les cree idiotas. Pero eso fingen, porque sus ventajas les trae y en cada caso son distintas. Como que se les permite estar cerca, tener derecho a muchas cosas y hasta reconocimientos, puede les llamen y tener acceso a las multitudes del chavismo, no como Eduardo Samán y Elías Jaua que de cuajo les defenestraron. Hasta usar la imagen de Maduro ante quienes a este siguen, que son bastantes, dado el trabajo y hasta estilo de gobierno y partido, un poco de eso que fortalece la falsa idea de dictadura, que más bien llamaría excesivo personalismo, las ventajas que da el poder, como de la que ya hablamos, el uso fácil de muchos medios y particularmente los informativos del Estado que sirven para mantener la imagen fresca. Y no hay duda, entre ellos, los anti monetaristas, hay gente que se resiste a reconocer que Maduro anda en lo que anda, habiendo sido el camarada que "conocí" siendo él un carajito y vino a militar en el partido que fundamos. Es más, fue él quien nos empató con Chávez.

Nota leída aproximadamente 4508 veces.

Las noticias más leídas: