Una de las estrategias demócrata representativas en el cambio de Presidentes, pero no de sistema o modelo, es peligrosamente exitosa siendo puntal de convencimiento por parte de la democracia representativa pitiyanqui y obsoleta. Prueba es, que los gobiernos decididos a no permitir que los controlen desde los centros internacionales del poder capitalista mundial, sufren amenazas de intervención y los destrozan en la opinión global, usando medios alienados y alineados, contra el ejercicio del Poder Ejecutivo del país que no obedezca sus dictados. En Venezuela lo han hecho ferozmente primero contra Hugo Chávez, y luego adversando con mayor encono a la administración de Nicolás Alejandro Maduro Moros.
Durante años he advertido esta situación, solicitando se entienda, se discuta, se divulgue y se explique sin miedo, atreviéndome a afirmar que quienes no lo quieran aceptar se abstengan de opinar, y tomen nota de su existencia, pues por lo general son críticas que les conducen a caer enfermos de odio incontrolable. No han logrado superar la época en que hicieron aquellas bombas "PUPUTOV" cargadas con detritus humano y animal, para lanzárselas a los guardianes del orden público durante manifestaciones que llamaban "pacíficas", y eran ejecutadas con violencia inflamable e irracional.
A escasas dos semanas y dos días para la noche buena y navidad, exaltan y exponen sus retorcidas intenciones incontrolables, bandidos estrafalarios funcionarios del despedido Donald Trump, lanzando amenazas que llenan al mundo de estupefacción, por un grupúsculo de politiqueros internacionales que no sacian su sevicia contra el pueblo bolivariano. En efecto Elliott Abrams, amenazó nuevamente a Venezuela, ahora indica que nos dejarán sin diesel, esencial para el transporte de alimentos en el país.
Este asesino convicto y confeso, motor de guerras centroamericanas, conocido como "cara e´diablo" y rescatado para la inmundicia politiquera por el orate magnate Trump, afirmó "creo que ahora hay la posibilidad de añadir más sanciones", y destacó Abrams que no permitirán intercambio de diesel, expresando en el colmo del supremacismo homicida "solo vamos a negociar con él una cosa, su salida", rechazo a la posibilidad de diálogo con el Presidente legítimo de Venezuela Nicolás Maduro, es uno de los últimos gestos imperiales del gobierno gringo saliente, considerando que estos neo nazis de la ultra derecha, van fuera de la fingida democracia yanqui.
Lo cierto, es que en las celebraciones de los nuevos diputados de oposición en la A N, elegidos en el desbarajuste mental que se les percibe, está viva la cobardía de no tocar a la diplomacia del garrote y los misiles de los USA, confiando en las elecciones próximas de Alcaldes y Concejales, Gobernadores y Diputados de poderes legislativos regionales, presidido el país por el primero de los hijos de Chávez, bajo el socialismo demonizado, pero mayoritariamente vencedor legal, con el mismo líder mayor.