No hay lugar para la calma. Más que por la economía, la emigración tiene una motivación religiosa y emocional, donde la concepción de Dios prevalece, pero, la tristeza, melancolía, carencia de fe y esperanza viene provocando enfermedades periféricas y de neurálgicas entre la población venezolana. Esto, me ha llevado a consultar varios textos de Lutero, Schopenhauer y Calvino. De todas maneras, tengo otras fuentes originales para analizar nuestro devenir político. Ahora, Guaido es un hereje y su posición marca un distanciamiento con sus viejos amigos de partido. Regresando al año de 1553, solo le espera un juicio y la inquisición. Los desafíos llaman a un deslastre y los oficios de Henrique Capriles Randosky y María Corina Machado no le corresponden para hacer un ávido lector de libros heréticos. Lo mejor es abandonar sus aventuras y encontrar una nueva lectura de libros prohibidos.
Ahora, tengo la convicción de la huida, ya hay frases cargadas que marcan la percepción de una condena, no a la hoguera como le hicieron a Juana de Arco, sino que, ante el debilitamiento de los partidos políticos solo resta orar, leer La Biblia y entregarse a la justicia nacional, porque ya hay un silencio y nadie levantara la mano por una estatua de paja. Así terminan a quienes se dedican a la aventura y se dice predicadores de libertad. Es un peso muy significativo y sorprende, ya Javier Bertucci no es un pastor, perdió la imagen de Dios, pacto con los monjes del monasterio del mal, un cristiano evangélico nada tiene que ver en las hogueras y casas de los libros prohibidos.
En España, la Corona y la inquisición desarrollaron un plan conjunto de actuación. Entre 1520 y 1540 se creó el modelo de represión que se acabaría imponiendo. Fue ideado contra fantasmas políticos y ensoñaciones, ya que los procesados no parecían luteranos precisamente y en sentido estricto. Lo más importante es que el mecanismo fue efectivo, Lutero se había convertido en una pesadilla, como Joe Biden para los protestantes norteamericanos, descendientes de cuáqueros ingleses y conservadores, que no desean que los musulmanes y comunistas tomen el poder en tierra norteamericana utilizando a los demócratas, conociendo la experiencia de Hilary Clinton en el triángulo sahariano entre Libia, Irak e Irán, ya que inversiones norteamericanas corren grave peligro en debilitarse.
Entre 1540- 1560 este modelo represivo se concretó en una serie de medidas apoyadas en la reorganización del aparato burocrático y funcional del Santo Oficio. Quien no quería que los textos reformadores se extendieran por Roma y Europa.
En nuestro caso, los diputados opositores guardaron silencio, ninguno dio una declaración afirmativa y sus partidos lucen más débiles.
Sin duda, la estructura católica- romana y protestante se encuentran muy movidas porque la izquierda utiliza la simbología musulmana para penetrar territorios cristianos para debilitar a sus organizaciones partidistas, sabemos lo que sucedió en EE.UU. No hablo del fraude electoral. Hablo de la irresponsabilidad de los funcionarios institucionales del correo y zonas de votación en el acto del sufragio por los electores.
En cada acto o hecho público, hay una argumentación prioritaria frente a consideraciones políticas o de otro orden, en tal caso, por las cadenas televisivas se ve a un Joe Biden inseguro y manejando un discurso difuso.
Miraflores se ha convertido en una casa de monjes herejes que manejan un solo discurso y olvida que hay un solo camino para la salvación del alma. Los predicadores cuando salen a exponer el Evangelio es abrir nuevos caminos y buscar una vida distante dada por el pueblo y, todo debe ser dado por la voz del pueblo a dedo o mano, pero, con el voto popular.
Esto, nos lleva a un signo de alarma, los partidos políticos de izquierda no pueden ser tomados por caudillos y delincuentes. Hay que manejar un mejor discurso y desarrollar con las fuerzas patriotas de Centro y América Latina programas de índole espiritual. Es respetar al hombre y sus decisiones ante la vida pública. El Palacio de Miraflores merece respeto y es el centro de la democracia y su presidente es Nicolás Maduro Moros, no hay otro. Tenemos que salir del tercermundismo y de la religiosidad. Un pastor evangélico no puede ser político, es anatema delante de Dios. Salomón y David fueron políticos en su esencia, pero, representaban a Jehová directamente, no eran artificios de una simbología e idolatría. Es una lucha tenaz por el bien y bienestar del pueblo. Menos partidos políticos.
La izquierda se esta desprogramando por cubrir a Venezuela, fíjense lo que sucede con el oro, sube a un nivel del 25 al 30 %, pero, estamos maniatados con China y no podemos resolverle problemas al pueblo bolivariano y el presidente prosigue con su equipo desfasado, ya que desea estarse en el poder por muchos años. Eso se visualizo en la entrevista con Ignacio Ramonet.