La mesa está servida, legislarán para el país

Miércoles, 13/01/2021 01:06 PM

El Covid-19, que continuó sus estragos en 2020 y continúa en 2021, acaparando la atención, paralizando la economía, la política, la sociedad y la cultura, tanto en la civilización occidental como en la oriental, golpeando global y desastrosamente a países ricos y pobres, adelantados y atrasados, capitalistas y socialistas, religiosos o ateos. todo esto no hace sino corroborar que estamos presenciando el final de los tiempos que han transcurrido hasta ahora, del deterioro a escaladas jamás antes vistas, y pone en la mira al sistema capitalista salvaje, que ha llevado al planeta al borde de la extinción, de la cual la especie humana, como el resto de los seres vivos, sufren una serie de conmociones que hace que la población del mundo se haya desbordado y de cierta manera embrutecido, manifestando por todo y por nada, a lo cual los gobiernos y los propios estados, no atinan a proporcionarle el tan mentado estado de bienestar social. El deterioro ascendente en Venezuela y el resto de América Latina y El Caribe,, el de toda la región y de cada país con sus peculiaridades, que no han logrado rendir sus recursos para el beneficio real de su población, y disminuir las altas tasas de problemas estructurales, que golpean a las respectivas naciones, donde solo las élites se mantienen usufructuando los recursos, a través del rentismo, el extractivismo y la entrega de os mismos a las grandes corporaciones que se llevan el lomito y dejan pingues ganancias, y que además son repartidas entre la burguesía y los funcionarios burocratizados y corrompidos, creando grupos y estableciendo sectores, desde los cuales manejan los hilos del poder, eliminando paulatinamente los beneficios que con tanto sacrificio le ha costado ganar a los trabajadores en todos los niveles, desde los campesinos, los pescadores, los obreros y la mayoría de los asalariados, que tienen que subsistir con las pingues ganancias, que no permiten el ahorro, por lo que condena a vivir estrictamente al día, y pensando cómo sobrellevar la situación de una realidad tétrica como la actual.

Dije en otro artículo que titulé el Covid-19 es coba, y lo reitero, ya que como la mayoría de las informaciones que hacen correr por los medios masivos de comunicación, no tienen otra intención que preparar el terreno, para que quienes controlan la economía mundial, puedan seguir inclinando la balanza hacia sus intereses personales y corporativos, que ha logrado insertarse a nivel del mercado global, y como todo ha sido catalogado como mercancía, el ganar es la premisa, y siempre gana el que lleva la mayor ventaja. Es como ha sido concebido el sistema, y los eufemismos les han servido como propaganda política, para que las masas ignorantes de las estrategias corporativas, se crean los discursos que emiten frente a las cámaras, donde dicen lo que la gente quiere escuchar, pero hacen lo que la política real manda, es decir, el entendimiento entre los pares, para mantener las apariencias, como en el caso de la democracia burguesa, y ya estamos viendo con estupor, cómo se ha vendido el cuento de los gobiernos democráticos, que como en el caso de los EEUU, y sobre todo en política exterior, dicen tener el deseo, la esperanza de que las demás naciones corrijan el rumbo y se conviertan en democracias, y manejen sus asuntos como lo hacen ellos.

Es en extremo preocupante lo que pueda ocurrir en el seno del imperialismo decadente de los EEUU. De cómo un magnate metido a político, ha llevado la más desastrosa administración en el país de las libertades y las oportunidades, donde más de 45 millones de pobres, de las víctimas de la pandemia, los fallecidos por lo que dicen es producto del coronavirus, que nadie sabe qué es, cómo es, y si realmente existe. En verdad, es una respuesta criminal por parte de quienes buscan desesperadamente buscar la forma más expedita de eliminar a la mayor cantidad de individuos posible, dado que el problema principal es el control sobre la demografía, la alimentación, el cambio climático y los espacios vitales que quedan en pie, y serán los que proveerán para éste siglo, no sabemos si para los próximos, cuando todo está cambiando drásticamente en el planeta. De los 8 mil millones de habitantes, para redondear, habría que disminuir dos terceras partes, según los planificadores de varios organismos internacionales.

Las probabilidades que esto ocurra no están lejos de que así sea, hace dos décadas que se vienen ejecutando con mayor celeridad, destruyendo a mayor velocidad, usando los sistemas más extremos para la extracción de los minerales, del petróleo y lo que se halla en el subsuelo. Los ataques indiscriminados contra países con políticas estables, y cierto bienestar para sus pueblos, fueron invadidos, destruidos y dejando una devastación a su paso, que luego de dos décadas no logran recuperarse; peor aún, tampoco han beneficiado a los países que colaboraron en hacerles la guerra, por motivos fútiles, terminando apropiándose de sus recursos y saqueando sus economías y reservas, depositados en bancos en el exterior. Muchos intereses de por medio, manejados por grandes consorcios de la guerra, de la industria armamentista, comunicacional, y los grandes negocios, donde los principales socios, son los mismos que forman parte de los trenes ejecutivos, y altos cargos en el gobierno y la oposición.

Qué posibilidades reales tienen los países en vías de desarrollo, donde la situación interna es lábil, y los actores del cambio, ni siquiera tienen absoluta claridad de cuáles son las prioridades reales para sacar al país adelante, cuando todo a su alrededor se desmorona, y se presiente que va en caída libre. En Venezuela, con la crisis de liderazgo en el gobierno y la oposición, que solo logran a estas alturas de las diatribas, las pugnas y confrontaciones, apenas si manejan entre sus adeptos radicales, apenas abarcan un cincuenta por ciento de la población total. El chavismo, que ha sido el puntal del proceso de cambios, y el factor ideológico principal de la revolución bolivariana, ha sido desplazado desde el poder de las altas esferas, que sólo echan mano de sus símbolos e imágenes, para desde los escapularios ajenos, poder seguir usufructuando el poder. Solo una parcialidad establecida en el Estado, domina y controlan las instituciones, manipulando desde un discurso huero, y a través del reparto inequitativo, de dádivas, bonos y depósitos en una tarjeta, y en bolívares devaluados, mientras la economía, las finanzas, y el comercio se mueven a través del dólar.

Guerra económica, injerencia de los EEUU, presión internacional, pero a la vez participación en la explotación de los recursos y yacimientos en todo el país, por las mismas corporaciones con bandera de los supuestos enemigos de la República Bolivariana de Venezuela. Después del abandono del Plan de la Patria, de una revisión profunda de las tres R, del cambio de rumbo en revolución, y con el pueblo; con la participación de la derecha en el gobierno obrero, el desplazamiento del pueblo organizado en consejos, comunales, en colectivos positivos, no los de la propaganda de guerra, los radicales, los contrarios a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, y que con la abdicación del chavismo, son días de derrumbe de las instituciones al servicio del pueblo, de lo emblemático y paradigma de victorias sucesivas por parte de una conducción sin ambages, como lo fuera la del Comandante Chávez; recuerden cuando en sus programas de los domingos decía: "Ahora el dueño es el pueblo, es el socialismo, es la Revolución." Cuando se recuperaban los predios detectados como latifundio, y avanzando entre miles y que estaban en plena producción, en las manos del pueblo, construyendo el socialismo en revolución.

Este año, que se anuncia desde el gobierno y una disminuida oposición interna, representada por la mínima composición en la Asamblea Nacional, que de caras al país hablan de ir a una reconciliación nacional, pero sin olvido, a ver como se concilia esto, además de todas las nuevas y reiteradas promesas, de que ahora sí, lo que no ha sido desde hace siete años lo será. Con los anuncios y promesas, con la repetición de los hitos y eventos disminuidos de pueblo, que algunos quieren achacárselo a la pandemia, lo que no deja de ser significativo, e ilustra la realidad del país, y el cuadro sumamente adverso para la recuperación económica. Se espera que el nuevo inquilino de la Casa Blanca, haga las señales de costumbre, que a lo sumo será pintar una paloma, ya que sabemos qué rabo tiene el personaje, un político con un prontuario que por lo menos debería hacerlo como mínimo, reo de unas cuantas cadenas perpetuas. Esperaríamos que la sindéresis se instalara entre los sesudos asesores del mandatario Nicolás, el presidente obrero, pero con buenos y elegantes trajes y prendas lujosas, que compiten con los de sus homólogos, mientras habla de socialismo, y también sus ministros, sobre el socialismo burgués, el que a todas luces va a contracorriente del chavismo, de las fuerzas políticas que se habían anotado grandes y gloriosos triunfos, haciendo fracasar a las acciones golpistas y agendas de la oposición fascista, allanándole el terreno a los invasores gringos, y a la derecha lacaya en Latinoamérica, traidores desde la independencia, cuando también apoyaron al imperio español.

Recordando en cifras lo que se presumía debería ocurrir entre los preparativos hacia el año 2050, ahora reducido a lo que habrá al 2030, y no falta sino dos décadas, que pasarán volando, ya lo estamos viendo con relación al tiempo, ayer celebrábamos como podíamos que se iba el nefasto 2020 y ya estamos a 12 de enero de 2021y habrá en este planeta Tierra, casi 9 mil millones de habitantes, a pesar de las crisis la demografía se acelera en nacimientos y a mayor velocidad, sobre todo en los países más pobres y con mayorías necesidades, donde habría que mantener más bocas con menos alimentos. Ahora resulta que tenemos nueva Asamblea Nacional que la quieren llamar chavista madurista, cuando es un poder más del Estado en la República Bolivariana de Venezuela, y que no le pertenece a un partido político ni a un gobierno, aunque la mayoría sea militante del Psuv. entonces se acabaron las excusas de los parlamentarios y diputadas anteriores. El 5 de enero se instaló y votó la nueva directiva.

Guaidó, ya no es presidente de nada ni de nadie, sino un corrupto más, que apoyó a las transnacionales para robarse los activos del Estado venezolano, y por vía expedita, caerle como hienas a los recursos y haberes de la nación. Si nos fijamos al detalle con respecto a los medios masivos de comunicación, con la posible salida de Trump por la puerta trasera, o esposado, han ido cambiando sus enfoque y discursos, cuando hasta ayer apoyaban al magnate. Acto seguido la puesta en escena de un nuevo relato en 2021 se hablará de votos chavistas y maduristas, y de opositores disidentes y representantes de AD y Copei renovado con la mayoría de carcamanes de la política de la IVR. Aunque los auspicios del gobierno estadounidense y de sus países aliados siguieron dando aliento a la supuesta presidencia de Guaidó en la AN en desacato, durante el año 2020 la directiva de Luis Parra agravó el ostracismo político del gobierno fake a lo interno y debilitaron los consensos opositores cocinan desde la comunidad internacional, debilitados sus lacayos internos, cuando la mayoría de la oposición radical, fascista y entreguista está en e exterior. Alguien más se autoproclamará presidente interino externo online. De dónde obtendrán recursos, a cuáles contribuyentes les malversarán sus impuestos para hacer guerras contra países y gobiernos extranjeros, inmiscuyéndose en sus políticas internas.

Habrá mesa de diálogo con todos los sectores y factores de la vida Nacional. Superaremos el tremendo escoyo por delante entre todos los y las connacionales, encallados en una situación económica y social delicada, donde hay una cierta paz contundente, donde el brazo armado del Estado, la maquinaria policial, como los rinocerontes en las sabanas africanas, a cualquier candelita que se prenda, súbitamente le echan tierra, es decir, las sepultan. Otra masacre en la Vega, enfrentamiento con las autoridades, según versiones oficiales, Las causas que generan tales hechos, son inciertas, pero de una cosa podemos estar seguros, donde hay paz y justicia, donde la gente tiene asegurada la papa y puede disponer con lo que gana a una vida digna, no deberían darse estas manifestaciones de violencia desatada, sobre todo en los barrios de la gran capital. Interpelaciones a los respectivos ministros y autoridades sobre los casos y sus consecuencias; esperemos que sí, en benefician de la democracia y la libertad tan pregonada. Amanecerá y veremos.

Patria socialista y chavista. Viviremos y venceremos.

Nota leída aproximadamente 1205 veces.

Las noticias más leídas: