El conocimiento es fundamental y tiene sus paradojas. El laboratorio de Karl Friedrich Gauss en Gotinga, el cual fue construido en 1807, nos describe la precisión del campo astronómico y que el hombre en su dimensión humana se hace más individualista y nos ubica en el campo de la razón para evitar la dispersión del mundo de las ideas. Es como mirar el retrato de alguien y cuál sería su campo de incertidumbre, la cual se puede calcular a partir de la dispersión detectada de las observaciones individuales. Y el hombre, debe dejar ser un bufón y, el filósofo llamado Friedrich Hegel en 1800 presentó una tesis en el que reflejaba la definición de los planetas a escala filosófica y, porqué el conocimiento humano esta ligado a una ironía del destino en su perfección con la astronomía, expresada en Colinga, lo que explica que el símbolo del conocimiento viene dado por el sentimiento de la cultura y la fe perfecta dada por la razón, entonces hay que rendir culto al conocimiento y de allí, en consecuencia, se suscitan un conjunto de juicios. Gauss y Hegel se conocieron en la misma urbe y estaban ligados al campo de las ciencias y filosofía.
Es un rompecabezas el margen de una tolerancia, porque cada evento es un punto de la ingeniería cuántica y el principio de la tolerancia., descifrando estos acertijos, podemos dar por entendido el manejo de la economía actual, todo es dado por eventos y se necesita de perspicacia para cabalgar sobre cifras estadísticas y la imaginación matemática que es exacta nos dará el manejo del tiempo y los cambios fiscales en una sola realidad o realidad.
Cuando llegó Hitler en 1933, muchos aspectos de la actividad cotidiana en el sistema alemán tradicional fueron abolidas casi de la noche a la mañana. El tren de Berlín se convirtió en un símbolo de evasión y, Europa ya no era un buen huésped de la imaginación, todo era una concepción de la cultura que estaba en retirada, hasta llevarlos a un filo de la incertidumbre, si no fuese por los rusos.
Es una ironía de la historia. Una Alemania hitleriana y bajo la mano de otros tiranos, siempre son cinco. Es un contra concepto, el futuro siempre nos devuelve a la mirada del pasado, es una confrontación crucial de la cultura, tal como se ha expuesto, el ascenso del hombre, como enemigo de la creencia atávica de los déspotas de que poseen una certidumbre absoluta.
No cavilemos. Trazamos en este momento un hilo hacia la ignorancia Las teorías del conocimiento y de la información nos llevan a la naturaleza del hombre. En aquel tiempo pasado, Szilard, en 1929 publicó un documento pionero, sobre lo que hoy se conoce como teoría de la telemática donde este personaje estaba convencido de que Hitler alcanzaría el poder y de que la guerra sería inevitable. Preparó en su habitación dos valijas con sus pertenencias y, hacia 1933, las cerró y llevo consigo a Inglaterra.
Es como hablar de América Latina, cuando ganó la presidencia Chávez Frías, los filósofos sabia el destino del Cono Sur, al igual que Maduro, bajo sus dos símbolos, los hermanos Rodríguez y su protector Vladimir Padrino López.
Nadie respeto el semáforo y lo que vemos en el Sur, es un juego de tiranos.
Así que la política sureña ha sido audible y redaccional, donde el factor corrupción es un poder dentro del mismo Estado.
Necesitamos unidad de criterio, se debe tener comprensión del mundo físico y como dibujar a historia política de un país.
Da la impresión que ignoramos las ejercitaciones administrativas y que China se alimenta de los dólares norteamericanos para deteriorar la moneda mundial. En este caso, la sureña y crear inflación, solo que en Venezuela nos encontramos con el embrujo de las juntas comunales y administradores del Estado- Nación. De allí que Joe Biden se encuentra en una línea de fuego a toda prueba, es una cuestión de semiconductores y de chips para los vehículos y electrodomésticos. La gente no quiere reparar, desea todo nuevo y ahorra dólares para regalárselo a China, que dominaban un segmento del mercado electrónico, ahora lo envuelve todo y, a pesar de que Venezuela es su aliada en materia prima, nos achica cada día más y nos empobrece y, olvidémonos de bitcoins, es un juego económico de un club de empresas que oprime al mundo globalizado, han tenido grandes pérdidas, pero se vigorizan porque crean tentáculos para distorsionar la economía, por esto, Donald Trump envió un mensaje claro a las empresas multinacionales norteamericanas ancladas en China que se regresasen a su matriz en USA y le enviarán un mensaje claro a Siria, Taiwán, Corea de Norte y Sur y Wuhan, sin olvidar a Irán que buscan aniquilar e mercado del Continente Sureño para apropiarse de materias primas y Venezuela se viene prestando a ese juego financiero a costa de una hiperinflación y el esclavismo colonial que se le viene dando al pueblo venezolano.
Estamos a expensas de las juntas comunales hasta Delcy Rodríguez, que como vicepresidenta y consejera del presidente Maduro canaliza a través de Fedecámaras y clubs financieros la economía venezolana y de allí, el neoliberalismo nos achica el estado de bienestar de cada familia venezolana.
. Es menester reparar lo dañado, porque a mayor industrialización, los chinos se aprovechan de la debilidad de países subdesarrollados y lo someten a su ideología económica hasta llevarlos a un dominio de su parte y arruinarlos porque el dólar refleja un valor ante la verdad global. Se necesita catalejos para entender la progresión lineal de la economía global. No hay nada desconocido, nos han tendido una trampa y debemos descubrir la tercera, cuarta y quinta columna que con su arte numérico quiere predecirnos un mundo mejor, cuando, los analistas reconocen que todo es verdaderamente falso y solo China, si no se le ataja, cambiará todo un programa atómico para llevarnos a una imaginación inmediata, pero, poco creativa donde todo partirá de la misma idea y las propiedades chinas en el Sur, crecerán porque no tenemos dinero para invertir y producir materias primas a gran escala, hasta nuestra alimentación verde y pescado serán llevados a las fábricas chinas, al otro lado del continente, para venir procesadas y nuestra sangre y conciencia envenenadas porque unos políticos a nombre de una falsa revolución nos entregaron como esclavos a los dueños de empresas al Oriente, por no asumir decisiones y riesgos para ser un país potencia.
Ya dejemos de rastrillar ideas de otros, trabajemos por una mejor Venezuela, con conciencia y responsabilidad en cada acto laboral.