Voy a atreverme en esta oportunidad, en concatenar dos episodios uno del pasado con el Dictador comunista Stalin y el otro con el actual Presidente Putin, el primero con la purga judía y el último con la purga de los oligarcas rusos que lo traicionaron.
No voy a pre-juzgar ni mucho menos a juzgar. Me llamó la atención y como tal, lo transmito literalmente copiado, para que los lectores del otro lado de la receptoría descifradora, sean quienes juzguen los acontecimientos antes que marquen hito en la formación histórica.
Primer episodio:
"Guerra Rusia-Ucrania: la extraña desaparición de militares y oligarcas rusos que revelan el alcance de la purga de Vladimir Putin
Omnipresentes en los medios de Estado rusos antes de la invasión a Ucrania, todos parecen haberse evaporado desde hace semanas; cuáles son los casos más emblemáticos
27 de abril de 202219:10
Luisa Corradini
El presidente Vladimir Putin en un encuentro con atletas rusos en el Kremlin. (Mikhail Klimentyev, Sputnik, Kremlin Pool Photo via AP)Mikhail Klimentyev - Pool Sputnik Kremlin
PARÍS.- La extraña desaparición de numerosos militares, oligarcas rusos, incluso de Vladislav Surkov, considerado la "eminencia gris" deVladimir Putin, demuestra las dimensiones que está alcanzando lapurga stalinista lanzada por el zar del Kremlin para sancionar a disidentes, "traidores" y sospechosos.
Omnipresentes en los medios de Estado rusos antes de la invasión a Ucrania, todos parecen haberse evaporado desde hace semanas. Sin contar con decenas de muertes misteriosas entre los oligarcas más poderosos del país y sus familias.
"No hay duda de que Putin está realizando purgas internas entre los generales y el personal de los servicios de inteligencia (…) ya sea por haber hecho estimaciones imprecisas, por venganza por informaciones equivocadas o críticas contra su decisión de lanzarse a una guerra", observaba a mediados de marzo el Instituto de la Guerra (ISW), un think-tank estadounidense.
El caso más emblemático de la actual situación es sin duda el de Vladislav Surkov. Apodado "el Rasputín de Putin", consejero del presidente ruso para Ucrania, el hombre que durante 20 años contribuyó a la edificación de la propaganda "putinista" desarrollando en concepto de "democracia soberana", acaba de ser puesto bajo arresto domiciliario en Moscú, sin que se conozcan los motivos.
Esa purga fue evocada a media voz por el mismo autócrata ruso en una alocución televisada junto a sus ministros, el 16 de marzo. Un discurso de una violencia sideral, donde Putin llamó a la "auto purificación": "El pueblo sabrá distinguir los verdaderos patriotas de la escoria y los traidores, y escupir a estos últimos como a una mosca que entró en la boca", dijo.
El método parece eficaz. Solo un puñado de oligarcas afectados por las sanciones occidentales osaron emitir algunas dudas sobre la invasión. Muchos de ellos salieron del país. La mayoría fue blanco en las últimas semanas de misteriosos "suicidios", todos curiosamente similares.
Alexander Tyulyakov, 61 años, director adjunto de la tesorería de Gazprom, la todopoderosa empresa de energía estatal, fue hallado ahorcado en el garaje de su departamento el 25 de febrero, cerca de San Petersburgo. El diario independiente No vaya Gazetainformó que los médicos-legistas ya trabajan en el caso cuando los servicios de seguridad de Gazprom llegaron y echaron a todo el mundo.
Tres días después, Mikhail Watford, 66 años, magnate ruso del petróleo y del gas de origen ucraniano fue hallado colgado en el garaje de su domicilio del sudoeste de Londres. El 24 de marzo, el millonario Vasily Melnikov apareció apuñalado junto a su mujer y sus dos hijos en su departamento de Moscú. Para los investigadores, la situación financiera del dirigente de la firma farmacéutica MedStom, víctima de las sanciones económicas de los occidentales, habría desencadenado el asesinato de los miembros de su familia y su propio suicidio.
Acribillados
Vladislav Avaev también murió en Moscú, junto su mujer y a su hija de 13 años. Todos acribillados de balas. Avaev era el exvicepresidente de Gazprombank, la rama financiera de Gazprom. Avaev no habría soportado las infidelidades de su mujer, Yelena (47 años) acusada de esperar un hijo de uno de sus choferes.
Sergei Protosenya, exdirector general del gigante gasífero ruso Novatek, también murió ahorcado en una lujosa casa de Lloret del Mar, en España. Los cuerpos de su mujer y de su hija yacían en la residencia, brutalmente apuñalados. La muerte de Leonid Shulman, 60 años, es algo particular, pues el director general de Gazprom de 60 años fue hallado muerto en el baño de su casa el 30 de enero, un mes antes de la invasión a Ucrania.
En las filas de los servicios de inteligencia y de las fuerzas armadas, la situación no parece mejor. Aun "bunkerizado", Vladimir Putin no se engaña: nada en la "desnazificación" de la "pequeña Rusia" -como llaman a Ucrania la mayoría de los rusos- sucede como estaba previsto. ¿Eso explica la extraña desaparición de muchos de los responsables militares? El ministro de Defensa y amigo personal del jefe del Kremlin, Sergei Shoigu, reapareció recientemente, vestido de civil, después que los medios occidentales especularon extensamente sobre su ausencia. Para Moscú, tanto Shoigu como su jefe de estado mayor, el general Valery Guerassimov -volatilizado desde el 11 de marzo- estarían "extremadamente ocupados".
Esta fotografía tomada y difundida por la Oficina de Prensa Presidencial de Rusia, el 21 de abril de 2022, muestra al presidente ruso, Vladimir Putin, hablando con el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, durante su reunión en el Kremlin en Moscú.YURI KADOBNOV - Russian Presidential Press Offic
A pesar de su puesto central, Guerassimov, de 66 años, no ha hecho declaraciones públicas desde el 12 de marzo. Responsables norteamericanos dicen haberle hablado por teléfono el 18 de ese mes. Pero el general se habría "negado a responder" a una nueva llamada, seis días más tarde.
Al frente del poderoso FSB (exKGB) desde hace 14 años, Alexander Bortnikov imprimió su huella en el espionaje interior a golpes. El exgeneral de 70 años odia a los opositores. Estados Unidos lo sospecha de estar directamente implicado en la tentativa de envenenamiento del disidente Alexei Navalny. En dos videos diferentes, difundidos el viernes 11 y el 24 de marzo, Bortnikov no dice una palabra, está vestido exactamente igual y está parado delante del mismo fondo. Hasta hace poco, los especialistas lo consideraban un eventual sucesor de Putin. Después de la guerra, hubo quien afirmó que podría ser el líder de una revolución de palacio.
Audacia
Ex guardaespaldas de Putin, nombrado al frente de la Guardia Nacional en recompensa por su fidelidad, Viktor Zolotov, 68 años, habría tenido la audacia de reconocer públicamente que la invasión se producía "más lentamente de lo previsto". Desde entonces nunca se lo volvió a ver.
Según los servicios de inteligencia británicos, unos 150 agentes de los servicios de inteligencia rusos han sido relevados o encarcelados, como su director, el teniente coronel Serguey Beseda. Todos ellos trabajaban para una división conocida como Quinto Servicio, creada por Putin para mantener a las exrepúblicas soviéticas en la órbita rusa.
"Desde hace un mes, Beseda duerme en la siniestra prisión de Lefortovo por ‘otorgar falsa información al Kremlin sobre la verdadera situación en Ucrania antes de la invasión’", según el grupo de investigación Bellingcat.
La limpieza desatada por el Kremlin recuerda otras. Lefortovo, prisión administrada por el FSB, posee un campo de tiro subterráneo con impactos de balas dejados durante las purgas de Stalin, cuando la sala era utilizada para las ejecuciones de masa."
Segundo Episodio:
"Por qué Stalin arrestó y torturó a cientos de los más prestigiosos doctores de Moscú en 1953
RedacciónBBC News Mundo
19 enero 2019
doctor Yakov Rapoport -uno de los detenidos- y su hija Natasha le contaron a la BBC sus recuerdos de lo que ocurrió.
Natasha Rapoport era pequeña, pero recuerda bien el día en que un grupo de agentes de seguridad soviéticos ingresaron a su casa, buscando a su padre.
Los efectivos arrestaron al hombre -el profesor Yakov Rapoport, un prestigioso médico- y se lo llevaron a una cárcel para interrogarlo.
Ocurrió en Moscú, en 1953, y fue parte de lo que se conoció como "el complot de los médicos".
"Pasó durante el último año de la vida de Stalin, cuando él se tornó extremadamente paranoico", le contó la mujer al programa Witness, de la BBC.
"Siempre seré una prisionera política del nombre de mi padre": quién fue Svetlana Alliluyeva, la hija de José Stalin que huyó a EE.UU.Ponte a prueba: ¿cuánto sabes de la Revolución Rusa que cambió el mundo hace 100 años?
"Mandó a arrestar a todos los principales médicos del hospital del Kremlin"
Al principio los detenidos eran unos 40, pero luego se arrestó a cientos de doctores más en todo Moscú.
¿Por qué? Según Stalin, los expertos estaban detrás de un complot para asesinar a los principales líderes soviéticos.
También se los acusó de ser espías de Reino Unido, Estados Unidos e Israel.
Pero la Historia revelaría la verdadera causa de los arrestos: la mayoría de los detenidos eran judíos y Stalin estaba encubriendo una purga antisemita.
Propaganda
El plan del líder soviético no solo incluía arrestar a los médicos. También se lanzó una fuerte propaganda contra los llamados "doctores judíos asesinos".
"No podías prender la radio sin escuchar sobre estos 'médicos judíos asesinos, escoria de la tierra, que vendieron sus almas al diablo'", recuerda Natasha.
Todo había comenzado el 13 de enero de 1953 cuando los principales periódicos soviéticos publicaron un informe de la agencia oficial de prensa Tass, sobre la detención de nueve doctores.
"Hace algún tiempo, los órganos de seguridad del estado descubrieron a un grupo terrorista de médicos cuyo objetivo era acortar las vidas de estadistas activos de la Unión Soviética mediante sabotaje en el curso de tratamiento médico", decía el informe.
Los doctores en cuestión fueron llamados "agentes mercenarios de una potencia extranjera''.
Se los acusó de haber envenenado a Andrey Zhdanov, secretario del Comité Central comunista, quien había fallecido en 1948, y a uno de los jefes del ejército soviético, Alexander Shcherbakov, quien murió en 1945.
Según la prensa, todos habían confesado ser culpables. De fallecer en 1996,
Yakov Rapoport le contó a la BBC cómo después de esa noticia se empezó a hablar sobre lo que le ocurriría a otros médicos sospechados de ser parte del complot.
"Se esparcían los rumores sobre el tipo de castigo que impondrían. Había amenazas de ahorcamientos en la Plaza Roja", señaló.
Torturas
Rapoport se imaginó que pronto vendrían por él y así fue.
Cerca de un mes después del primer informe sobre un "complot" fue arrestado. Lo torturaron para que firmara una confesión, pero se rehusó.
En una autobiografía que escribió décadas más tarde -y que se terminaría publicando bajo el título "El complot de los médicos de 1953", describió cómo pasó su encierro en la prisión de Lefortovo.
Allí permaneció esposado y no se le permitía dormir. Lo interrogaban día y noche, hasta las 5am. Y luego lo obligaban a quedarse parado hasta las 6, solo para volver a comenzar con la misma rutina.
"Si hubiera firmado la confesión falsa, hubiera sido su condena de muerte", aseguró su hija al programa Witness..
En sus memorias, Rapoport contó que su única arma era el tiempo: esperar, fantaseando sobre la posibilidad de que su calvario terminara en un exilio y no en la muerte.
Salvado
Pero al final, su salvación y la de los otros médicos llegaron de la forma más inesperada.
Un día, en abril, llegó un nuevo agente de seguridad a la cárcel. En vez de interrogarlo a él, reprendió al investigador anterior por el mal estado físico en el que se encontraba el preso.
Poco después llevaron al médico a ver a un general y le dijo: "Has sido completamente rehabilitado y puedes irte a casa", recordó en su entrevista con la BBC.
Fue solo al regresar a su hogar y oír las noticias de su esposa que entendió lo que había ocurrido: Stalin había muerto, y con él se había acabado su calvario.
Un mes después del fallecimiento de Stalin -que ocurrió el 5 de marzo de 1953- su sucesor, Nikita Khrushchev repudió las acusaciones contra los médicos y ordenó liberarlos.
Inesperada muerte de Stalin puso fin a la persecución contra los médicos judíos y, según Khrushchev, evitó una purga aún mayor.
El diario Pravda anunció que el caso había sido reexaminado y se halló que todas las confesiones se habían obtenido bajo tortura.
Todos los médicos fueron exonerados -dos habían muerto- y el juicio y la purga que, se estima, planeaba Stalin, quedaron en la nada.
En 1954 un funcionario del Ministerio de Seguridad Estatal y algunos policías fueron ejecutados por haber fabricado las acusaciones.
Dos años más tarde, durante un discurso, Khrushchev aseguró que el propio Stalin había ordenado personalmente la persecución de los médicos y que planeaba incluir en le purga a miembros del Politburó (el comité del gobierno comunista).
"Aceleró su muerte"
Natasha Rapoport, que hasta el arresto de su padre había sido una admiradora del sistema soviético, nunca perdonó lo ocurrido.
Sin embargo, le dijo a la BBC que creía que el plan de Stalin terminó costándole muy caro. Cómo a Stalin le salió el tiro por la culata.
"Estoy convencida de que el 'complot de los médicos' terminó acelerando la muerte de Stalin", señaló.
Según ella, cuando sufrió un derrame cerebral a comienzos de marzo, "no había médicos cerca para asistirlo".
"¿No es increíble?", sonríe."
La ironía de la vida, la hacemos nosotros mismos. Stalin atacó hasta más no poder, a los Médicos Judíos porque supuestamente estos iban a matar uno a uno a los principales líderes del Estalinismo era igual al marxismo-leninismo. Irónicamente podemos decir que ahora será putinismo-estalinismo-marxismo-leninismo. Hasta la próxima entrega.