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El decretazo de Milei constituye un Harakiri, al sistema democrático, que se pretende imponer sobre la base de violar conquistas laborales y sociales, mintiendo descaradamente, para justificarlas.
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Las Madres de Plazas de Mayo, califican el decretazo como inconstitucional y participaron en la movilización nacional.
Con sus poses extravagantes, y con un arsenal de mentiras por delante, como la esgrimida para justificar el paquetazo de medidas que empobrecerá más a la población, que "Argentina era la Primera Potencia Mundial hace 40 años, anunció más de trecientas medidas con las que según él pretende salvar a la Argentina.
La primera lectura y forma general que el paquetazo nos revela, es que de un plumazo se llevó por delante 40, años de democracia. Muchas de las medias anunciadas, deberían haber sido discutidas y aprobadas por el parlamento de ese país, constitucionalmente acreditado para legislarlas por el carácter de las materias abordadas.
Poco le importa a Milei, si está echando por la borda 40 años de democracia, porque durante su campaña electoral, dejó entrever su simpatía por las dictaduras militares e incluso su Ministra de Seguridad, públicamente ha demostrado su simpatía por las dictaduras que generaron miles de muertos en ese país, incluso es partidaria de que se libere algunos militares que fueron sentenciados por delitos de Lesa Humanidad. Podría convertirse en un Videla más, si el pueblo argentino se descuida, lo que sería aplicarse un verdadero harakiri político.
Ya mostraron sus fauces, al tratar de criminalizar el derecho constitucional a la protesta, amenazando con lanzar la fuerza pública contra cualquiera que manifieste su descontento e incluso amenazando también, con quitarle cualquier tipo de ayuda social a los que osen oponerse a la forma de gobierno que intenta imponer.
Pero además del derecho constitucional a la protesta, Milei, pretende imponer su Ley, derogando en la práctica otros derechos laborales y sociales conquistados por el pueblo argentino y establece una desregularización que pone a la población en manos del empresariado en general, que es el más favorecido con las medias dictadas, no habrá control por ejemplo, sobre el canon de arrendamiento, es decir, el monto de los alquileres quedará en el plano especulativo, el precio de los alimentos, quedará también al libre albedrio de los comerciantes, así como también el costo de los servicios. Todo esto coloca a la población, sobre todo a los más necesitados, colocándolos en un estado de indefensión, porque tampoco existirán instituciones del estado que se encarguen de ejercer la protección social indispensable.
Hasta los medicamentos serán objeto de la desregularización, pudiendo sus precios ser impactados por un proceso inflacionario sin límites, quedado la población desprotegida en materia de salud pública.
Frente al decretazo, las protestas no se hicieron esperar, cacerolazos y la realización de una posible huelga general, anuncios que fueron subestimados por este autócrata demagogo, calificándolos, como contagiados por el Síndrome de Estocolmo. Y nosotros nos preguntamos, ¿Milei no estará contagiado por el Síndrome dictatorial?
Estaremos atentos al desarrollo de estos acontecimientos que estamos seguros generaran un estado de incertidumbre y desconcierto, que pueden ser utilizados por este autócrata demagogo para imponer nuevas medidas represivas y antipopulares. En nuestra opinión, las medidas dictadas por Milei y la nueva casta que gobierna a la República de Argentina, no pueden ejecutarse, sin vulnerar las bases de sistema democrático.