Un día de marzo a aporrea, no llegó…
Los que usaron todo el veneno ideológico, político y emocional contra Oscar Heck, por sus agudas y realistas opiniones en contra de Maduro y su gobierno; ahora que nos dejó a medio terminar su carrera, no quiero imaginar lo que sienten porque esa es, cosa muy de ellos.
Yo por mi parte sigo sosteniendo, que:
Oscar Heck, es radical en el tratamiento analítico de la problemática estructural venezolana; en el sentido que creativamente va a la realidad a tocar las raíces del problema; con su empirismo investigativo (INDUCCIÓN) y poco a poco sube a las generalizaciones, donde revela, en las políticas del Estado actual y en la manera operativa que el gobierno de Maduro y sus ministros ejecutan tales políticas, la causa fundamental de los problemas anunciados y denunciados en sus escritos.
Por supuesto, los del gobierno nunca salen bien parados; porque los contrastes empíricos con los cuales demuestra sus apreciaciones críticas gubernamentales, lo validan.
Pues, los datos experimentales, que toma para fundamentar su opinión, son hechos que cualquier investigador o poblador concreto, los vive y los siente. Miremos:
Cuando sale a la calle a corroborar el precio de la arepa y marca su relación con los bajos salarios. La descripción personal de los efectos de aislamiento que producen los cortes continuos de energía y las comunicaciones, puestos en relación causal con la inoperancia y desinterés del Estado, en una solución técnica del problema. La descripción del aniquilamiento político de la oposición como medida de afianzamiento y continuidad electoral en el poder, de Maduro y su cohorte.
Yo diría que más que un anti madurismo es una confesión de realismo político y menos que una posición de coincidencia con el anti madurismo de derecha o toma de posición desde la derecha. Es una crítica realista de las repercusiones económicas, políticas, sociales y migratorias que la depreciación de la vida producida por la manera privatizante de administrar PDVSA y otros órganos estatales que el gobierno, en este momento dirigido por Maduro ha generado.
Cuando habla de su vida, su infancia migratoria y su estabilidad en Venezuela; sus logros académicos y su brillantez matemática; no es ningún fetichismo académico, ni exposición cursi de su vida. Es la exposición sencilla de la vida de un hombre conectado a los problemas comunes de la población venezolana, que escribe en un estilo irónico y analiza inductivamente la realidad y puede decir la verdad crudamente.
Pero en sus escritos, se nota como un llamado de atención a los políticos de turno, porque sus decisiones jurídicas y políticas están fuera de los contextos y del momento adecuado para su realización. Y exige siempre partir de la verdad.
"Yo siempre trato en mis escritos de decir la verdad lo más crudamente posible, y yo sé que hay gente a quienes eso les ofende, pero es mi manera de hacerlo, y probablemente se sentirían irrespetados también, no es mi problema, es de ellos, especialmente porque las personas contra quienes yo escribo con rabia y disgusto y que me dan ganas de vomitar, son solamente y únicamente la gente corrupta, engañadora, ladrona, deslamada, y mentirosa, y si por hacer eso, Sant Roz sentiría que yo irrespeto a todos, y que él sentiría disgusto de vómito por mí, bueno, ese no es mi problema."
Tampoco lo comparo con Sócrates, pero me parece que pretende utilizar el método socrático para sus exposiciones.
Ese, sencillamente, es Oscar Heck. Uno de los promotores del pensamiento crítico que rompe a verdades los mitos del poder, de la alienante maniobra política de los gobernantes y de los defensores ideológicos del gobierno de Maduro y su privatización.
Y es la dialéctica de sus ideas, el posicionamiento ético y la valentía moral para sostenerlos, el entramado teórico, donde los que pretenden vedar la concepción crítica del mundo, de Oscar, chocan y se molestan; a tal grado llega la imposibilidad de cuestionar las verdades expuestas, que recurren a los procedimientos más irracionales de amenazarlo con sanciones migratorias, espionaje gubernamental, ingresos clínicos psiquiátricos, aislamiento social y desafíos a muerte.
los que exaltan la violencia, el odio y la imposibilidad del diálogo intelectual; donde muestran lo rancio de su visión del otro y el menosprecio por el hombre que piensa independiente de los parámetros oficiales como ellos lo hacen.
"sinceramente que me gustaría desafiarlo a duelo, como se hacía en otros tiempos cuando alguien cometía una ofensa que sólo podía dirimirse eliminándose uno de los dos, porque ya las palabras o el diálogo se hacen imposible."
Ellos mismos se encuentran en la selfi tomada: esto no es cuestión de derechas y ultraderechas, ni de anti patriotismo; sino de menosprecio por los que piensan desde las raíces de los problemas. Y son ellos, los que descalifican el pensamiento de Heck, los que cierran y niegan el diálogo teórico.
En cualquier lugar del mundo que te encuentres, yo sé que dijiste "palante con la verdad"
…con su cuerno de añil pescaba una canción, saberla compartir era su vocación…