Las elecciones presidenciales programadas para el 28 de julio de 2024 en Venezuela, donde el chavismo y quienes lo apoyan, y de una oposición que no pareciera dividida, pero lo está, lo que sin duda afecta los posibles resultados, pese a las inhabilitaciones, intervenciones y proscripciones que a todas luces deja mucho que desear, pues no hay garantías de que el proceso sea auténticamente democrático, sin subterfugios amañados, donde decenas de candidaturas se ven frustradas por fallos judiciales sacados de la manga a última hora y a la carrera, tratando de ocultar la grave situación que vivimos en el país por parte de un gobierno que preocupa a propios y extraños por su ambiguo proceder, tácticas a la carta del mandamás del gobierno, donde se inhabilita a los y las candidaturas que se destacan, y con sobradas credenciales en el escenario preelectoral.
Las descalificaciones, el negarle los derechos a la participación en la contienda electoral, desde que la campaña iniciara con el pote de humo del esequibo por parte del nimamismo, que quería aminorar el fuerte impacto del superministro de superbigote, a quien le estaba latiendo en la cueva de Alí Baba y sus 40 ladrones, y la estrepitosa derrota ante la escogencia de la candidata de la oposición fascista, hay que decirlo, representada por la candidata líder de los gringos MaCoMa, excluida por los llamados a que intervinieran militarmente, lo cual se constituye en delitos políticos. Aunque la medida salpica a todos quienes se oponen al régimen que pretende saltarse a la torera todo el ordenamiento constitucional, violan flagrantemente los derechos humanos y políticos, condenando a todos y a todas, y que muchos organismos internacionales como la Organización de Estados Americanos, la Unión Europea y Human Rights Watch, además de la derecha pitiyanqui, pero más delicado que muchos países y sus gobiernos, como Canadá, Chile, Colombia, Ecuador, Francia, Alemania, México, Paraguay, Reino Unido, Estados Unidos y Uruguay, a los cuales se les unen las ONGs y partidos políticos, estén elevando sus voces y protestas, denunciando el uso abusivo de las instituciones del Estado para favorecer al ejecutivo en funciones. Además del ventajismo y la desinformación por parte de los canales en manos del gobierno que no son veraces ni imparciales.
Sobran las amenazas de muerte a diestra y siniestra, los ataques físicos a los partidarios del chavismo disidente por parte de los simpatizantes de NiMaMo, y el nimamismo, que enlodan el recuerdo del líder de la revolución chavista el real, el del verdadero proceso de cambios revolucionarios del socialismo de este siglo, impulsado por Chávez y el pueblo soberano que lo acompañó, al cual el régimen ha defraudado con su corruptela y sus funcionarios venales que se han llenado estafando a la nación. Sobran los casos, como los consabidos falsos positivos, con los que tapan sus fechorías y desviar la atención, y los retardos en las investigaciones y los lapsos procesales, y que ahora sacan de la manga o del sombrero de ilusionistas, sin que se resuelvan los verdaderos problemas que arrastramos desde que en mala hora votamos por NiMaMo.
Los verdaderos y reales problemas los ha generado este régimen militarizado con sus políticas estalinistas, de un mando único y petrificado que se ha desgastado, despilfarrando los recursos de la nación, sin abordar los problemas de escasez, y donde sobran las conspiraciones como ejercicios y parte del entrenamiento y la formación de los militares, intentos de golpe y magnicidios. Como el que le propinaron al Comandante Chávez con anuencia de muchos de sus más cercanos colaboradores y que luego se blindaron entre los principales anillos del régimen y se creen inexpugnables. El perjuicio es contra el pueblo doliente, contra los viejitos, las madres que deben sortear la tragedia de ver que sus hijos deben abandonar el hogar y migrar para poder paliar la situación de existencia precaria y ayudar a sus familias; porque una burguesía revolucionaria parasitaria se acostumbró a vivir del esfuerzo de los trabajadores, mientras ellos en sus cúpulas y curules, se llenan quince y último, y los vemos cómo viven, y se dicen socialistas, mentira, engañan y manipulan a los incautos y las incautas.
Este quiste hay que extirparlo antes de que sea demasiado tarde para sanear el cuerpo enfermo, y recuperar la V República. La grosera entrega del país al capitalismo nacional e internacional está a la vista, empresas y empresarios de maletín, testaferros, puros fantasmas, pues a la hora de la rendición de cuentas nadie asume, y se acusa a quienes se atreven a acusar a los miembros del buró político, donde están los artífices de las mayores estafas a la nación, corruptos y corruptores, que elaboran campañas difamatorias urdidas desde los tanques de pensamiento perversos, y que hacen de la campaña electoral, un carnaval de difamaciones, detenciones arbitrarias, procedimientos militares y policiales, donde el arbitrio lo llevan los gobernantes, que ordenan torturar y los atropellos a los derechos humanos, restringiendo las libertades democráticas. Este es el escenario de las venideras elecciones, donde el ventajismo cupular gobiernero es grosero. La situación política, económica, social y laboral es compleja, y crece la preocupación por no haber un equilibrio y menos equidad ni transparencia.
El seguimiento que se lleva de cerca en el país por parte de organizaciones nacionales e internacionales, esperan que haya respeto a los principios democráticos y los derechos humanos. Luego de las inhabilitaciones sostenidas por el régimen a las y los candidatos desde las Primaria de 2023, y el subsecuente bloqueo de los y las aspirante no afectas al régimen de NiMaMo y los nimamistas que pretenden eternizarse en el gobierno y mantenerse en el poder por mucho tiempo, pese al mayoritario rechazo que tienen los chavistas y no chavistas, que se han dado cuenta de la farsa, la mentira y manipulación de un grupo de infiltrados en la política, bajo un discurso que para lo que ha servido es para acomodarse en torno al gobierno y los poderes públicos, sacándole grandes y sustanciosos dividendos a los negocios públicos en manos de bisoños y capitalistas de poco pelo que han desfalcado a la nación, repartiéndosela en pedazos, como cuando se beneficia una res o la cosa de todos, pero que solo disfrutan los enchufados y en nombre de un supuesto proceso de cambio socialista, que de social solo tiene el nombre.
Lo cierto es que desde la Plataforma Unitaria se decidieron respaldar a Edmundo González Urrutia, el candidato presidencial que no han podido inhabilitar, y cuenta con la tarjeta electoral de la MUD, y se medirá en la contienda electoral del 28 de julio de este año, si al gobierno no se le ocurre alguna otra maniobra a la que ya nos tienen acostumbrado con sus trapacerías en Venezuela, desde el 2013. Al candidato Urrutia lo respaldan los partidos y movimientos de la coalición opositora, y lo eligieron a través de diálogos, debates y concertaciones entre los factores de la derecha venezolana, y el apoyo del capitalismo y del sionismo y el fascismo internacional. Edmundo González es Licenciado en Estudios Internacionales de la Universidad Central de Venezuela (UCV), con máster en la American University Washington DC, desde 1971 hasta 2005.
Con una carrera diplomática y académica dilatada, ex diplomático en Argentina, Argelia, Túnez, Reino Unido, El Salvador y Bélgica, donde adquirió experiencia profesional, por más de una década ha sido consultor en institutos y medios de comunicación. Desde 2010 ha desempeñado diferentes labores en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), roles y con cargos como coordinador de Enlace Internacional y directivo de la Plataforma. Edmundo González Urrutia aceptó convertirse en la cara de la esperanza opositora que intentará derribar con 25 años de férreo control político del chavismo en Venezuela. Este sería en todo caso otro Milei pero a la venezolana y por tanto nos esperaría lo peor. El candidato o la candidata de las mayorías debe salir del chavismo originario sin más.