El Arado y el Mar

¿Un nuevo pacto de Punto Fijo, volveremos a la Cuarta?

Miércoles, 08/05/2024 07:00 AM

La respuesta no es sencilla, en política ninguna lo es, son muchas las variables, en ella nada es mecánico. Solo podemos intentar una aproximación, estudiar las posibilidades. En el ambiente se asoma la expectativa de un pacto, la oposición de derecha lo propone primero con algo de timidez que se disipa a medida que se acerca el 28 y se hace evidente la derrota del madurismo. Y hemos tocado el nudo del asunto.

El madurismo vive un dilema: ¿cómo resolver su falta de apoyo popular? Ese es el centro de su angustia política. ¿Cuál será su conducta? Las reacciones pueden situarse en dos campos principales: uno, el legal, el madurato se comportará juicioso, acatará la Constitución y las leyes, no inventarán nuevas reglas del juego. O, al contrario, el madurato fiel a su naturaleza, saltará por sobre las leyes, romperá las reglas del juego, inventarán algún falso positivo, alguna nueva ley, una acusación, un estado de emergencia, alguna excusa para evitar la derrota previsible.

En el primer caso, opera la propuesta de pacto, el perdedor debe quedar con posibilidades de ser la contraparte, la oposición permitida, del sistema de dominación capitalista, con chance de volver a ser gobierno. De esta manera se cumple la alternabilidad, requisito indispensable para el engaño que permite la continuidad de la dominación. Los que así piensan se guían por la sentencia: "para el derrotado puente de plata".

La segunda posibilidad, es más afín a la naturaleza del madurato, a su mentalidad sindicalera, esa conducta la han demostrado muchas veces. De esta manera, calmarían las angustias de los sectores internos que temen quedar por fuera del posible pacto, los que temen salir del gobierno "por las buenas o por las malas."

¿Cuál será la decisión del madurato?

Vivimos días de intensas negociaciones, de duda, de miedos. Allá adentro del madurato debe haber reuniones permanentes, y desconfianza permanente, nadie está seguro, todos son negociables, hasta el propio maduro. Allí tenemos de ejemplo a tareck, que nos indica el torbellino interno. ¿Qué hará la oposición gringa? Las mismas contradicciones se mueven en el campo gringo, habrá quiénes quieren tender puentes de plata, y quiénes desean represión dura, "al enemigo ni agua". Los gringos, que tienen la última palabra, parece que quieren salir de la crisis por la puerta más o menos legal, cumpliendo los acuerdos.

Lo que sí está claro es la meta del capitalismo: le interesa restituir la democracia burguesa, volver a la cuarta, regreso que puede ser en paz, que esta crisis conduzca al nuevo pacto; o que sea necesario un intermedio dictatorial.

Al principio del artículo decíamos que la política es compleja; el esquema que presentamos tiene muchas variables sin considerar. Allí está el Chavismo auténtico, leal, que empieza a moverse, que está vivo, se yergue sobre la parsimonia del momento y dice presente. En el claroscuro de la crisis, como decía Gramsci, "surgen los monstruos". Pero también emergen las opciones revolucionarias.

¡CHÁVEZ ES LA OPCIÓN!

Nota leída aproximadamente 1783 veces.

Las noticias más leídas: