Antes que nada debo dejar claro, que lo que yo hubiese deseado es poder votar por un candidato de la Izquierda y de los movimientos populares, pero lamentablemente la dictadura madurista no lo permitió. Este gobierno intervino a través del TSJ todos los partidos de izquierda y derecha y les nombró directivas títeres y serviles al gobierno Neo-Liberal de Maduro. No conformes con eso, de manera ilegal el gobierno rechazó toda candidatura de izquierda.
Por el contrario el gobierno promueve una serie de candidatos de derecha, que no tienen la más mínima posibilidad de ganar, y que el gobierno solo los permite para tratar de restarle votos a la única candidatura opositora. Estos personajes, sea con intención o no, juegan completamente a favor del gobierno.
En el marco de esta coyuntura es preciso estar plenamente consciente del escenario que tenemos en Venezuela: el gobierno de Maduro es una Dictadura, y de las más miserables que se recuerde. Si usted todavía no se ha dado cuenta de eso es mejor que lo haga, o el precio será 6 años más de miseria para nuestro Pueblo.
El caso de Chile nos puede servir como ejemplo: en el año 1988 se realizó el Plebiscito contra el Dictador Pinochet y poco después las elecciones presidenciales. En esas elecciones -igual que aquí- el gobierno chileno prohibió cualquier candidatura de izquierda y solo dejó un candidato opositor de derecha y a otro que era un empresario. La izquierda al saber que no podía participar tuvo que decidir si apoyaban la única opción que había para derrotar al candidato del gobierno o se quedaban mirando una posible victoria del candidato de Pinochet y de esa forma permitir que todo siguiera igual.
Lo que sucedió fue que la mayoría de los partidos de Izquierda apoyaron al candidato de derecha, sabiendo que era de derecha, pero sabiendo también que era la única vía para salir de la dictadura, gracias a eso salvaron a Chile. Votar por Maduro es seguir viviendo en un país en el que nada funciona y nada va a mejorar, con el salario más miserable del continente, y el que proteste va preso, un país en el que ningún medio de comunicación dice ni pio del gobierno y si alguien dice algo lo botan o lo encarcelan.
- El debate a lo interno de la Izquierda venezolana
En el marco de este escenario electoral, hay sectores de la Izquierda venezolana que plantean la abstención o el voto nulo como mecanismo de expresión, bajo el argumento de que las dos candidaturas que pueden ganar, representan intereses de la burguesía y grandes capitales extranjeros.
Si bien esto es complemente cierto, resulta importante realizar algunas consideraciones en el caso venezolano.
Si tomamos a cualquier país promedio de América Latina, incluso con un gobierno de derecha, de esos serviles al imperialismo, nos vamos a dar cuenta que en ese país yo tengo derecho a registrar un partido político y tengo derecho a postularme para un cargo público, en Venezuela no.
En Venezuela los derechos políticos del Pueblo han sido suprimidos por el gobierno, eso se llama Dictadura. Que en Venezuela todos los partidos políticos hayan sido intervenidos por el gobierno, que no se permita registrar nuevos partidos, que muchos partidos hayan sido ilegalizados sin razón, que no se le permita a la gente postularse para un cargo público salvo que al gobierno le simpatice su candidatura, que el gobierno le haya robado el derecho al voto a 8 millones de compatriotas que viven en el extranjero, que se criminalice la protesta y la militancia política, nada de eso puede verse como algo secundario, se trata de graves violaciones a los derechos humanos. Que vivamos en un país en el que los medios de comunicación han sido completamente censurados, que vivamos en un país en el que la cúpula de gobierno maneja los recursos de la nación como si fuera su riqueza personal y no tenemos ningún derecho a exigir cuentas porque hasta se aprobaron una ley inconstitucional que les autoriza a negociar cualquier activo de la nación sin tener que informar a nadie, nada de eso es normal, ni siquiera en un país con un gobierno de derecha.
En cualquier país de América Latina y del mundo, por muy malo que sea el gobierno, al menos se trata de mantener una apariencia de institucionalidad que medianamente funciona, y que en el caso de algunos países es más eficiente, pero en la Venezuela de Maduro no, aquí de manera repugnante y descarada todo funciona para sostener los intereses de una cúpula corrupta que solo gobierna en función de sus más mezquinos intereses sin importar en lo más mínimo lo que tenga que padecer el Pueblo.
El solo hecho de recuperar la institucionalidad y sobre todo, recuperar los derechos del Pueblo, ya es una gran razón para salir a votar contra Maduro.
¿Y qué podemos decir en el ámbito económico y social?
Nuevamente volteamos hacia cualquier país promedio de América Latina, y voy a tomar el caso de países con gobiernos de derecha, algunos totalmente serviles a capitales extranjeros, ahí vamos a encontrar que en El Salvador el salario mínimo decretado por el gobierno es de 365 dólares, en Costa Rica es 675 dólares y en Uruguay es 556 dólares, el salario mínimo en toda nuestra región, con gobiernos sean de izquierda o derecha no baja de los 300 dólares, mientras que aquí en Venezuela, el gobierno impone y sostiene por la fuerza contra el Pueblo un salario miserable de 3 dólares mensuales.
¿Estoy diciendo con esto que esos gobiernos burgueses son una maravilla? No, lo que estoy diciendo y demostrando es que el gobierno de Maduro es extremadamente miserable con su Pueblo. Es un gobierno despótico y corrupto que tiene dinero para todo lo que le da la gana menos para pagar salarios dignos al Pueblo trabajador.
Si a usted mi estimado compa, le parece que es igual vivir con un salario de 300 dólares mensuales a sobrevivir con un salario de 3 dólares mensuales yo debo decirle que a mí me no da igual. Si a usted mi estimado compa le parece que es igual vivir con un salario de 300 dólares que tener que buscar 3 trabajos al mismo tiempo, en muchos casos sin ninguna clase de derechos laborales, para medio tener que llevar algo de comer para su familia, si a usted le parece que eso es igual yo debo decirle que para mí no lo es. Si a usted mi estimado compa le parece que es lo mismo vivir en un país en que los servicios públicos funcionan normalmente a vivir en un país en el que a la mayoría del territorio nacional se le va la electricidad todos los días y tampoco tiene acceso permanente al agua potable yo debo decirle que a mí no me da igual.
Decir que gane quien gane, la crisis seguirá exactamente igual, es lavarle la cara al gobierno de Maduro, restándole responsabilidad sobre el desastre que padece el Pueblo. La realidad es que el éxito o fracaso de un gobierno no depende del espíritu santo o de las tres divinas personas, el éxito o fracaso de un gobierno depende de las políticas que ese gobierno desarrolla, y el desastre en Venezuela tiene el nombre y apellido de Nicolás Maduro. El Paquetazo Neo-Liberal que Maduro ha impuesto al Pueblo venezolano es el más duro y criminal en la historia de América Latina y posiblemente del mundo entero.
El madurismo maneja el país como si fuera de ellos, ni siquiera Chávez con toda la popularidad que tenía hizo algo parecido, Chávez todos los años iba a la Asamblea Nacional a rendir cuentas al país, Maduro en sus 11 años de gobierno no ha presentado cifras de nada, desde le época del dictador Juan Vicente Gómez no se había visto algo igual, la opacidad de este gobierno en el manejo de los fondos públicos es un crimen descomunal contra esta nación.
La política económica del gobierno de Maduro se resume en que arriba se roban todo y nos ponen a nosotros a pagar lo que ellos se roban. Ni siquiera en la cuarta república llegaron a hacer algo así, en la cuarta república los adecos y copeyanos se robaban los fondos públicos, pero en el gobierno de Maduro no solo se han robado los fondos públicos, sino que han negociado a futuro activos de la nación y eso también se lo robaron y de paso, después que se han robado todo, le meten las manos en los bolsillos al Pueblo, imponiendo y aumentando toda clase de cargas impositivas y tributarias, y la realidad es que no hay un solo servicio público o ente público que funcione.
No existe ninguna posibilidad de que Venezuela tenga una mejora real mientras Maduro siga ahí, porque las causas del desastre que vivimos en Venezuela son implícitas a su gobierno. No hay nada que Maduro pueda hacer ahora que ya no hubiese podido hacer antes si hubiese querido. Dejarlos ahí es que van a seguir haciendo lo que les dé la gana, sin que nadie pueda hacer contraloría de nada, y con ellos conservando el poder absoluto para imponerse sobre el Pueblo de la manera más despótica.
Tal como hicieron en Chile, tocará asumir esto como un plebiscito y prepararse para las nuevas luchas, votaré por una gente que no me representa, entendiendo que al primer día que comience un hipotético gobierno de ellos voy estar ahí como oposición, pero aquí es urgente un proceso de re-institucionalización y reconstrucción nacional que con Maduro jamás se va a dar.
Y para el discursito gobiernero del chantajito de que si voy a votar por un candidato pro yanqui o bla bla bla, queda claro que voto por esa opción sencillamente porque la dictadura madurista no me dejó otro camino al prohibir cualquier candidatura de izquierda, ante semejante crimen contra los derechos del Pueblo, no voy a salir yo a premiar a un gobierno despótico que hace eso dándole mi voto o absteniéndome o votando nulo, que en la práctica es un voto para ese gobierno.
Este 28 de julio yo voy a votar por un país con futuro para nuestros hijos, por el fin de los abusos contra el Pueblo, y por fin de la pobreza y la miseria en Venezuela.