En muy pocos paises de latinoamerica y el caribe se hacen elecciones libres, transparente y democráticas pero tampoco se respeta el derecho a elegir y ser elegido y seguimos siendo manipulados por las encuestas, por la publicidad, por el reparto de dinero, por forzar el voto de electores, por el dislocamiento de electores y por la injerencia de los organismos internacionales afectos al imperio.
En la mayoría de estos países, aunque se hagan encuestas eficientes y se cumpla con la igualdad en la divulgación y la propaganda, resulta cuesta arriba imponer el derecho del libre tránsito en las elecciones ya sea porque hay un bloqueo criminal promovido desde fuera, ya sea porque existe el voto asistido o ya sea porque se sale a buscar forzosamente o con dinero el voto ciudadano.
En Venezuela como en otros países se sale a buscar el voto casa por casa, a resolver problemas sociales, de salud y de empleos y aunque la constitución prohíbe el financiamiento público de los partidos, el TSJ aprobó una norma que permite el reparto a las campañas electorales o sea a la publicidad. Pero a la fecha en Venezuela solo se permite el financiamiento privado. Mientras más dinero se reparte, sea desde el poder o desde el sector privado a la oposición, mayor capacidad se tiene para influenciar o manipular las elecciones.
Mientras en venezuela se siga imponiendo el bloqueo económico, las amenaza de invasiones para afectar la integridad física del presidente y promoviendo las sanciones criminales desde los EU, y mientras el gobierno siga fortaleciendo su maquinaria electoral con el 1X10 qué es la táctica para que 1 chavista lleve a 10 personas a votar, no habrá elecciones libres ni elecciones democráticas.
Cabe preguntar ¿Es la compra de votos o es la práctica de forzar el voto del elector, un fraude electoral? Claro que sí. La población debe votar por sus propios medios y recursos. Forzar o comprar el voto se ha convertido en una cultura que se festeja hasta con júbilo y alegría cuando lo que debe dar es asco y repugnancia. El voto en cualquier nación sea de izquierda o derecha debe ser libre y secreto
¿Para qué convocar elecciones presidenciales en Venezuela cuando una mayoría de la oposición aunque participa, la rechaza, grita fraude , convoca guarimbas e intenta fabricar un golpe de estado? En todas las elecciones presidenciales se acusa al presidente de dictador y de irrespetar los derechos humanos. Con la agravante de que EU en estas elecciones ha emitido una orden de captura y ha fijado un monto como recompensa por su cabeza. Y más aún hubo un acoso mediático y económico y los gringos, Europa, la ONU y la OEA gritaron fraudes sin tener pruebas
No hay la más mínima condición para que el presidente pueda garantizar el derecho al voto de los venezolanos. Desde que perdió Henriquez Salas Romer 1999, Francisco Arias Cardenas 2000, Manuel Rosales 2006, Henriquez Capriles 2012-2013, Henri Falcon en 2019 en venezuela se denuncia fraude sin aportar la mas minima pruebas. Y se ha creado un estado de excepción post electoral que ha afectado la vida de muchos venezolanos. En ese sentido, el gobierno debe reflexionar sobre si limita o no las elecciones presidenciales hasta que cese el estado de guerra y de sanción.
El artículo 337 de la constitución bolivariana de venezuela Capítulo II
De los Estados de Excepción dice: El Presidente o Presidenta de la República, en Consejo de Ministros, podrá decretar los estados de excepción. Se califican expresamente como tales las circunstancias de orden social, económico, político, natural o ecológico, que afecten gravemente la seguridad de la Nación, de las instituciones y de los ciudadanos y ciudadanas, a cuyo respecto resultan insuficientes las facultades de las cuales se disponen para hacer frente a tales hechos. En tal caso, podrán ser restringidas temporalmente las garantías consagradas en esta Constitución de elegir y ser elegido, salvo las referidas a los derechos a la vida, prohibición de incomunicación o tortura, el derecho al debido proceso, el derecho a la información y los demás derechos humanos intangibles.
De los Estados de Excepción dice: El Presidente o Presidenta de la República, en Consejo de Ministros, podrá decretar los estados de excepción. Se califican expresamente como tales las circunstancias de orden social, económico, político, natural o ecológico, que afecten gravemente la seguridad de la Nación, de las instituciones y de los ciudadanos y ciudadanas, a cuyo respecto resultan insuficientes las facultades de las cuales se disponen para hacer frente a tales hechos. En tal caso, podrán ser restringidas temporalmente las garantías consagradas en esta Constitución de elegir y ser elegido, salvo las referidas a los derechos a la vida, prohibición de incomunicación o tortura, el derecho al debido proceso, el derecho a la información y los demás derechos humanos intangibles.