Según el experto, especialista en materia de “transiciones de regímenes autoritarios a la democracia” en Venezuela el proceso de transición esta “a punto de caramelo”, dicho en jerga popular. Claro el enfatiza que es un académico y que sus conclusiones se derivan del estudio riguroso de experiencias políticas enjundiosamente analizadas desde la Academia.
Esto nos recuerda palabras del historiador Samuel Moncada, en su brillante exposición en la que devela el golpe cibernético contra Venezuela, tales como: ¿quién financia estas investigaciones?.
El “especialista”, hablando en “clave politológica” arranca opinando que “Venezuela desde hace muchos años es una autocracia” y añade que “se sabe que esa autocracia venezolana tenia algunos rasgos autoritarios preocupantes ” (preguntaría Moncada ¿quien sabe Dr.?). El hombre arranca citando a sus maestros y recomienda una bibliografía que según su perfecto ingles fue editado por la John Hopkins University, solo en idioma inglés. Con esto de entrada va quedando claro que es la ideología del imperio dominante la que prevalece en el enjudioso análisis que nos trae el “experto”.
Dice que el no fue parte de los asesores de los políticos opositores y que se ha mantenido al margen de la estrategia pero que algún día hablara de las cosas de las que tuvo noticias, cuando sea oportuno. Menciona que hay 59 casos en los que autocracias caen en el contexto de elecciones. Si conocer los detalles específicos de estos casos no cuesta nada suponer que siempre ha habido imperios con intereses que han promovido la caída de esos regímenes políticos.
Afirma el especialista categóricamente que el 29 y el 30 con la represión a los pobres, por parte del gobierno, ocurre la “debacle del mito revolucionario”, se acabo el mito revolucionario enfatiza el experto.
Menciona que a su entender en la estrategia opositora la movilización de la gente era fundamental para como diría MCM, cobrar. Por las razones que allá sido, esto no ocurrió, afirma el experto. Pero él no pierde las esperanzas.
Este experto venezolano, al igual que los académicos que desde los Estados Unidos activaron el golpe contra el CNE según lo denuncio Samuel Moncada, ha fallado en sus pronósticos sobre el proceso político venezolano, pero no se rinde. Porque no son meros individuos, representan a un poderoso imperio que desde 1998 apuesta a poner fin a lo que inicio Hugo Chávez y hoy continua Maduro junto a un pueblo que desde los tiempos de Bolívar sigue apostando por su independencia definitiva.