Está en desarrollo una crisis de gobernanza en Venezuela. Los que están arriba no pueden seguir sosteniéndose gobernando como hasta hoy lo han hecho, y los de abajo no quieren seguir siendo gobernados como hasta ahora, probablemente ocurra una revolución. Entendiéndose, en este caso como revolución ese periodo politico donde participan en condición de actores principales, distintas organizaciones del pueblo venezolano, articulados y guiados por un programa común de transformación políticas y sociales radicales. Y aquí definimos, especificamente al pueblo venezolano, como ese conjunto social de hombres y mujeres que han sido despojados de su condición de ser los únicos dueños legitimos de los medios de producción que tiene el Estado venezolano y que además se les ha conculcado sus derechos constitucionales y han sido sometidos por las clases capitalistas usurpadoras, como son las lumpen burguesías madurista y maricorinista, a sobrevivir nada más que vendiendo su tiempo de trabajo por un salario de esclavos y para ser explotados por los capitalistas nacionales y transnacionales.
En Venezuela el 28J se violó el artículo 5 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, y no solo lo violó el madurismo, lo violaron también todos y cada uno de los partidos y candidatos que participaron de ese teatrillo electoral que no fue sino una vulgar trampa para que el pueblo venezolano no participara con los candidatos y opciones electorales propio. Fueron unas elecciones diseñadas para que el pueblo quedará por fuera y encerrado en la polarización de dos candidaturas contrarias a sus genuinos intereses y serviles a los intereses de los ricos, eso fue el 28J.
El maricorinismo que contribuyó desde un principio con el montaje de esa trampa contra el pueblo y sabía que unico ganador sería maduro porque la trampa fue diseñada para eso, igual se presto para LLEVAR HASTA EL FINAL LA TRAMPA CONTRA EL PUEBLO, ahora pretende que el gobierno muestre unas actas.
Es decir, lo que todo esto demuestra es que el 28J fue pensado para salvar al sistema capitalista de ser destruido por el pueblo, y la violación del articulo 5 de la Constitución justifica que el pueblo se declare en revolución, para hacer su propia revolución.
La propuesta concreta de este artículo, es que el pueblo venezolano debe organizarse en una Junta Patriótica de Salvación, que se estructure desde la parroquia hasta un nivel nacional de articulación, y apoyado en este solido instrumento de unidad y lucha, que emerge con éxito desde lo más profundo de su historia, lleve a cabo una revolución que acabe con todas las causas de la explotación y las desigualdades generadas por el capitalismo, y edifique un modelo en donde se desarrolle una sociedad de productores libremente asociados.
Permitannos hacer una breve caracterización de Venezuela para que podamos tener presente aunque sea muy superficialmente, qué no hay ninguna razón para que los venezolanos vivamos en la pobreza, incluso aún siendo bloqueados y agredidos por las sanciones del imperialismo norteamericano.
Venezuela es el país más septentrional de la América Latina, lo que la sitúa estratégicamente en el mapamundi. Pero además, cuenta con ese raro privilegio de poseer cuatro fachadas geográficas, la amazónica, la andina, la caribeña y la llanera, es decir, puede al mismo tiempo mirarse, mirar, comprenderse y comprender al mundo desde cuatro ángulos culturales, son cuatro grandes vías de comunicación con la humanidad. Si lo anterior fuera poco, es cubierta casi siempre por un cielo azul claro y cuando se nubla es porque necesita regar su agricultura y llenar sus embalses. El territorio es bañado por uno de los ríos más grandes y hermosos del mundo, el Orinoco, y asimismo, fluye otro, el Caroní, que es una maravilla hidráulica por naturaleza, que fluye de cascada en cascada, convirtiéndose así en una extraordinaria fuente de generación eléctrica estimada en 24.920 MW requeridas para el desarrollo industrial y social del pais.
Por otro lado, Venezuela ocupa a nivel mundial, el primer lugar en reservas probadas de petróleo, lo que la hace, sin lugar a dudas, muy apetecible a los voraces imperios capitalistas. Más aún, en su suelo se hallan importantes minerales hoy usados para la fabricación de computadoras. Un simple ejercicio de imaginación nos permite vislumbrar, que si todos estos recursos, en ves de ser robados por las lumpen burguesías maderistas y maricorinistas, se invirtieran más bien en educación, salud y desarrollo agroindustrial y en investigación científica, en salarios más justos la sociedad venezolana fuera una de las más prosperas del planeta.
Luego hay un dato cultural que casi siempre se oculta o el cual incompresiblemente no se resalta, y es el referido a que Venezuela es una sociedad que ha cobijado a casi todos los ciudadanos que por distintas razones llegaron aquí para rehacer sus vidas o a colaborar con ella y tomaron la decisión de quedarse. El ser venezolano nunca ha tratado con desprecio a ningún ciudadano de otra nacionalidad, son escasisimas las veces que eso ocurre, sólo a algunos idiotas trastornados y atrapados por el chovismo burgues se les puede señalar. Y la razón de ser solidarios y fraternales tiene su origen en los códigos que se han forjado su evolución cultural . Desde sus primeros pobladores que han desarrollado y convivido en relaciones sociales de producción comunales, y luego, están el fragor de las guerra de independencia y seguidamente la guerra federal que imprimieron en el alma nacional la vocación internacionalista del pueblo venezolano. En pocas palabras, nos sentimos también ciudadanos del mundo.
Sin embargo, para salvar a este pais, necesitamos entonces que la administración de todo este caudal de recursos naturales y potencial cultural que es el soporte del bienestar material del pueblo venezolano dejen de estar en manos corruptas e irresponsables como las manos sucias del madurismo y las del maricorinismo que quieren volver, ambos son los mismos nuevos y viejos capitalistas ambisiosos y soberbios, que santifican la desigualdad y la tiranía para someter y empobrecer al pueblo venezolano.
Pero lo que se requiere en este momento, de profunda y catastrófica crisis que sufre Venezuela, es una clase política preparada, de públicas credenciales morales, humilde, sencilla, honesta y que demuestre en los hechos y todos los dias, estar dispuesta a gobernar obedeciendo las decisiones del pueblo, ese es el modelo de democracia y de socialismo que queremos y necesitamos; un socialismo y una democracia del pueblo y para el pueblo, y esto es pura utopía factible, es decir, los venezolanos podemos hacerlo, el único impedimento que tenemos, por ahora, es el rato que nos tardemos en quitarnos los miedos y temores y en construir la unidad.
No obstante, para alcanzar ese objetivo estratégico, necesitamos implementar y forjar con mucho arte, el momento táctico, ese instante mágico donde coinciden lo deseado con lo posible, elementos que están presentes hoy en la realidad venezolana pero que todavía siguen estando separados. Es urgente sintetizarlos en la creación a nivel nacional, en cada parroquia, municipio y estado en una JUNTA PATRIÓTICA DE SALVACIÓN, eso sería, no cabe ninguna duda, la chispa que prendería la revolución en la mente y el corazón del pueblo venezolano, siempre que se lleve a cabo desde el lugar y la cosmovisión de los empobrecidos del chavismo y los empobrecidos de la oposición que son un solo pueblo, y armados de uno de los programas, que despues de la Carta de Jamaica, es el documento patriótico más avanzado referido a la transición hacia una sociedad de productores libremente asociados, el Plan de la Patria 2013-2019, documento que fue deformado y traicionado por la contrarrevolución madurista para restaurar un régimen antinacional, antipopular, de decadencia y muerte como es el capitalismo
Pero Venezuela tiene hoy suficiente tierra, recursos económicos, conocimiento científico/técnico y hombres y mujeres preparados para producir varias veces el alimento que necesita. Venezuela, tiene suficientes maestras y maestros Con una innegable vocación robinsoniana para desarrollar la escuela pública como nuestra principal empresa estratégica que el pueblo necesita, tiene miles de médicos bien preparados para atender la salud que el pueblo venezolano necesita. Venezuela tiene todo lo suficiente para construir una escala más elevada de vida, una sociedad de productores libremente asociados para satisfacer las necesidades del estomago y las fantasías del espiritu.
Sin embargo, mientras permitamos que el país siga secuestrado en manos de políticos corruptos como el madurismo o como la vieja burguesía maricorina (no olvidemos que esta ultima clase social tiene siglos enriqueciendose del estado venezolano), entonces no será posible salir de este desastre que ahora destruye las esperanzas del pueblo venezolano.
La revolución que estamos planteando es para crear una realidad nueva, una realidad que tenga como centro el cuidado del ser humano y de la naturaleza. Necesitamos una revolución que cree una nueva espiritualidad donde estén invitados a participar viejos fantasmas como la fraternidad, la solidaridad, la libertad y la igualdad. Pueden ponerle el nombre que más les guste a esta revolución, pero tiene obligatoriamente que ser una revolución hecha por el pueblo y para el bienestar del pueblo y para destruir la civilización fracasada e indeseable del capitalismo.