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Jueves, 21/11/2024 04:45 AM

Los caminos que conducen a la democracia fueron cerrados, ¿qué más evidencia hay que aportar?. Y en esa destrucción de la democracia no está sólo el madurismo, también está involucrada la derecha progringa, por eso la pregunta clave no es dónde están las actas, sino ¿por qué el gobierno y la oposición se pusieron de acuerdo el 28J para llevar a cabo unas elecciones que son de origen inconstitucionales? ¿A qué le temían, que fueron diseñadas para que maduro saliera ganador (esto sabían todos los que participaron de ese teatrillo) e impedir que el pueblo participara libremente con sus propios candidatos? Entonces, ¿cuál constitución es la que estamos defendiendo?. La respuesta a estas preguntas son las que ambas bandas lumpen burguesas ocultan y que muchos izquierdistas o progues contribuyen encubrir.

 Este desastre es lo que está haciendo sentir en el ambiente nacional que estamos muy cercanos al colapso de la dominación del madurismo y asimismo arrastra a la oposición de derecha que quedaron para montar repúblicas aéreas. Y tan cerca pudieramos estar, que la corta distancia impide que pueda ser vista claramente por el ojo humano. O, quizas sea por aquello que decía Hegel, de que el Búho de Minerva vuela de noche, queriendo decir que el pensamiento y la razón se tardan en darse cuenta de lo que acontece en la realidad. 

 Pero, la verdad es que la perdida de la hegemonía del madurismo obedece fundamentalmente a dos razones, por un lado, perdió sin ninguna posibilidad de recuperarlo, el inmenso apoyo del pueblo chavista, mismo que sigue siendo virtualmente una fuerza política pero desactivada y sin dirección, que decidió después del asesinato de su lider y de la traicion del madurismo, refugiarse en su casa. Esta pérdida no puede remediarse con bloques historicos. Y por otro lado, el madurismo  desechó, como consecuencia directa de la traición, el aplicar el Plan de la Patria 2013-2019, y en su lugar asumio conjuntamente con fedecámaras el proyecto salvaje y destructivo del neoliberalismo hundiendo al país en el empobrecimiento. Por eso sigue planteada la tarea de hacer surgir una dirección colectiva para que esta fuerza, el chavismo popular así como el conjunto de los destacamentos del movimiento popular, vuelvan a retomar el protagonismo en la conducción de la revolución y el timón del nuevo estado comunal socialista que incipientemente se había logrado.

Está verificado que la desigualdad es general y es evidente.  El empobrecimiento de las masas, en todo el país, está llegando a niveles alarmantes. Varios miles de millones de personas han pasado a ser lo que la escritora Vivian Forrester llama, los superfluos, una humanidad excedente, sobrante que ya no le sirve al capitalismo ni siquiera para ser explotada. La catástrofe en los sectores de la salud y la educacion pública en Venezuela se han convertido en un solo problema de salud pública. 

La situación de las clases trabajadoras en Venezuela experimenta un socavamiento constante de sus condiciones más elementales de vida.  En los último 13 años a raíz de la contrarrevolucion restauradora capitalista del madurismo, los obreros y el conjunto de los desposeidos, han sucumbido en una sociedad sobrecargada por muchas crisis: el desempleo y subempleo,  salarios miserables y de esclavos, la desintegración social, la inseguridad alimentaria, crisis sanitaria, la ranchificación de sus viviendas,  y la crisis de la salud mental; además del deterioro de los servicios publicos y la destrucción del medio ambiente.

A esos niveles de sobrevivencia nos ha conducido como sociedad la opresión neoliberal madurista con la complicidad de todos los partiditos de la oposición de derecha que  hacen el papel de decorado democrático, de potes de humo y distracción. Y a  la prueba nos remitimos. Andan ya  lanzándose a candidatos a las gobernaciones y alcaldias como parte de la continuidad de la trampa del 28J.

El empobrecimiento y la pauperización social están globalizados. El pais entero experimenta la tragedia de la crisis general del sistema capitalista restaurado por la traicion del madurismo. Casi que la mitad de su población se encuentra esparcida por todo el planeta buscando mejores horizontes de vida, miles han dejado sus huesos sembrados en las selvas y desiertos de la geografía latinoamericana, sin mencionar que continuamente están sometidos a la discriminación chovinista que vomitan las mismas burguesías dueñas de las distintas republiquetas burguesas  como las calificó en su momento el mismo libertador.  Las mismas que destruyeron el sueño bolivariano de hacer de  Abya Yala, una Patria Grande. 

El hombre y la mujer de a pie sufren cotidianamente la violencia estructural del sistema capitalista venezolano, violencia abstracta que se hace concreta día a día en la violencia política y en la represión del estado, porque el madurismo asociado al sindicato de los explotadores, fedecámaras, y a empresas transnacionales requiere recurrir al miedo que produce la represion para intententar desmantelar la subjetividad libertaria que yace condensada en la rabia y el descontento, y que nadie garantiza que en algún momento, puedan bajo ciertas circunstancias especiales, transformarse en una situación de rebeldía y explosividad social. El 27 y 28 de febrero de 1989 es un espectro que deambula las calles de Venezuela. 

La que hace preguntar  ¿Cuándo entonces se puede producir una rebelión de los de abajo? eso nadie lo sabe, la historia no se repite, sin embargo, hay situaciones parecidas y se desarrollan en espiral. No obstante, está latente, sus latidos y su vibración se siente en todos los rincones de la sociedad. Ojalá al madurismo le quede todavía algo de sentido de  respobsabilidad y antes de que estalle una rebelion, deje de seguir haciendo más daño al pueblo venezolano y entregue el timón del poder a la Junta Patriótica de Salvación para acortar el camino de los sacrificios hacia la recuperación del bienestar de la Patria.

 Por esa razón es que se hace imperioso que todas las fuerzas revolucionarias socialista, ¡que el chavismo popular auténtico! que es una fuerza mayoritaria en la sociedad, despierte y se reorganice para que ayude a acelerar la conformación de esa tan urgente y necesaria Junta Patriótica de Salvación. 

En este marco de profunda y multiple crisis politica y moral, de corrupcion generalizada que destruye hasta las mismas instituciones del Estado burgués y arrasa con la vida de millones de personas, de la ausencia de un liderazgo decente, coherente, honesto y capaz que tome la conducción del timón del Estado, la sociedad venezolana necesita recuperar los grandes sueños y relatos como el cristianismo, el marxismo y el bolivarianismo que puedan servir de una amplia plataforma unitaria de lucha y se transforme en una conciencia teórica para poder salir de este desastre civilizatorio en la que está hundida toda la nacion. Porque más salidas liberales burguesas no aguanta la sociedad venezolana.

Resulta claro, que en momentos de tanta oscuridad como la que arropa a Venezuela, se hace necesario que todos sus habitantes que resisten a la bestialidad del capitalismo madurista se agarren de las grandes esperanzas contenidas en los pensamientos arriba mencionados que sirvieron a los pueblos en el pasado y sin lugar a duda le servirá al pueblo venezolano en esta hora dificil y trágica como una guía en el proceso de su propia liberacion, porque ha quedado suficientemente evidenciado que los pueblos empobrecidos no pueden esperar más que su liberacion sea obra de ningún mesías, que sólo el pueblo organizado es quien salva al pueblo.

Por tal razón, es que nos parece  fundamental la emergencia de una Junta Patriótica de Salvación que sintetice toda la energia transformadora que hay en la sociedad venezolana y produzca una subjetividad constituyente, instituyente como diría Castoriadis, que ofrezca una imagen del mundo más clara y distinta, que coloque firmemente en el imaginario colectivo, desactivando en la gente el miedo, el marasmo y la inmovilidad, la convicción de que sí es posible concretar un modelo de sociedad de productores libremente asociados en la cual se garantice el libre desarrollo de cada uno como condición del libre desarrollo de toda la sociedad, que por cierto, esta utopía perfectamente realizable ya está contemplada en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

El llamado entonces es el mismo de siempre, que no dejaremos de repetirlo hasta que consiga ser escuchado por el conjunto de las organizaciones populares. Y es a no dispersar en esta hora los esfuerzos y las energias, a poner de un lado las aspiraciones personales y grupales, eso debilita. Y  si colocar por encima de todo los intereses, el interes colectivo. El proyecto de poder no puede ser otro que Venezuela, pero de una Venezuela bajo el control y la planificacion de las clases trabajadoras para satisfacer sus necesidades radicales y de toda sociedad y en la cual se acaben las clases exploradoras y las clases explotadas.  

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