Bachelet entelequia de los Derechos Humanos

Martes, 03/09/2019 11:07 AM
Que cara dura resulto la Señora Bachelet, ahora con su cara de yo no fui sale lamentándose al decir que las nuevas medidas anunciadas por el verdugo Presidente de los Estados Unidos contra la República Bolivariana de Venezuela, son algo así como muy duras y que éllo, podría traer más penurias al sufrimiento al que ya padece el pueblo venezolano; olvidándose la susodicha señora Bachelet, que fue élla, quien al firmar el aciago “Desinforme” lleno de falsedades y manipulaciones contra el gobierno de Venezuela; al describir como ciertas situaciones y hechos fabricados por parte de la derecha interna e intereses de Corporaciones y gobierno de presidente Donald Trump, élla, consciente de su criminal decisión, abrió la puerta para que los enemigos del proyecto concebido por Hugo Chávez, sea puesto en cuarentena, para que colapsen las instituciones y por lo tanto la vida del pueblo que habita nuestro país, como consecuencia del acoso que le ha ocasionado los decreto ejecutivos y medidas extraterritoriales emanados del seno de los Departamentos de gobierno estadounidense, bajo el cálculo político que la asfixia económica y carencia de múltiples productos de primera necesidad lograrían llevar a la población a un estado de ebullición social que dé al traste con el gobierno legítimo y democrático que se dio por votación libre y secreta el 20 de mayo de 2018 el pueblo elector de la República Bolivariana de Venezuela.

En la conclusión de mi artículo anterior relacionado con la señora Bachelet, le había recriminado y anunciado, que si ese infausto “desinforme Bachelet” servía para que su amo del norte tuviera argumentos o bases para tomar acciones unilaterales contra Venezuela, pasando por encima de la Ley Internacional que rige las Naciones Unidas; élla (léase la Bachelet), tendría o mejor dicho tendrá culpa de atrocidades y saqueos calificados como crímenes de lesa humanidad que se sobre vienen contra 30 y mas millones de seres humanos que residimos en territorio venezolano; de ahí que es bueno recordarle a la señora Bachelet, que después del ojo afuera no vale Santa Lucia.

Pero aún más, lo más desgraciado e hipócrita de esas lágrimas de cocodrilo con lo que pretende enmendar su plana, la descalificada “alta funcionaria de los Derechos Humanos de la ONU”, es que en sus últimas declaraciones, ni siquiera tuvo la entereza de condenar los anuncios y medidas ilegales de bloqueo marítimo y prohibición contra terceros que vayan a negociar con la República Bolivariana de Venezuela; lo que implica que al hacerse la desentendida y no condenar Decretos extraterritoriales de Trump por ilegales, al saltarse la instancia que tiene ese tipo de facultad que sólo lo corresponde según Ley Internacional a la ONU; la propia Bachelet, se pliega a la arbitrariedad, a las bravuconadas del Tío Sam, al dar luz verde al hegemón del mundo que no respeta, autodeterminación e independencia del resto de naciones del globo terráqueo.

En todo caso, a quien ejerce ese rol de alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, si fuese sido leal consigo misma, lo que le correspondía hacer, era condenar las acciones arbitrarias, ilegales y por tanto ilegitimas del Ejecutivo Estadounidense, por ser a todas luces violatorias al propio derecho internacional y por tanto de crimen velado de lesa humanidad. Esa ha debido ser la posición digna y ajustada a derecho y por lo tanto de respeto al pueblo de la República Bolivariana de Venezuela; pero pudo más su pleitesía al gran garrote y dólar; como en los tiempos de Jesús de Palestina, que el imperio de entonces y sus cortesanos compraban igualmente a quienes se vendían al primer postor.

Bueno qué se puede esperar de personas formada en instituciones de inteligencia de los gobiernos estadounidenses, de gentes del sur del sur, que se considerar euro-céntricas como el engendro de Almagro y la Bachelet, que coinciden con el pensamiento anglosajón del policía del mundo encarnado hoy por Míster Donald Trump, ante quien se rindieron seguramente por un puñado de billetes verdes, sin importarles que las hienas sedientas de petróleo y oro tengan escusas infundadas para tomar por asalto al pueblo digno de la Patria de Simón Bolívar. Pueblo valiente y Patriota, que sabrá honrar el ejemplo de aquella gente que en tiempos pretéritos ganaron a pulso la condición de pueblos libres e independientes, como lo es y seguirá siendo Mi Patria Venezuela.

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