Es cierto que lo que sucede en un sitio no necesariamente tiene porque repetirse en otro, pero si es bueno aprender de los acontecimientos y hasta aplicar aquello de "cuando veas las barbas de tu vecino arder pon las tuyas en remojo".
En Ecuador sucedió lo que sabemos, un reventón por culpa del FMI; pudiera haber sido por otras cosas, pero los hechos parecen confirmar que eso fue lo sustancial o la mecha que prendió el candelero. Y como observaremos a lo largo de este trabajo, produjo unos resultados inesperados.
En Venezuela, por primera vez en 20 años, en la calle se comienza a tomar una bandera que une a las mayorías y esta es la del salario. En el gobierno hay una conducta inusual, como que un constituyente, ex ministro, antiguo discrepante o "rival interno", del sindicalismo, de Maduro, Torrealba, quien unos 30 ó 40 días atrás habló de elevar el salario mínimo al valor real del medio petro, lo que sería unos 500 mil bolívares, es quien hasta ahora ha dado la información que según está en gaceta. Maduro nada ha dicho, contraviniendo su usual proceder y hasta costumbre de hablar y responder por demás sin que nadie le esté preguntando nada. Pudiera uno pensar que eso es producto del enfrentamiento entre monetaristas y sus contrarios. Lo que se ha traducido en las extrañas conductas de Torrealba y Maduro y el nivel del aumento, muy por debajo de lo esperado. Sin hablar de las tablas de Meléndez. A Guaidó y sus íntimos, asuntos como los del salario y costo de la vida no interesan, por lo que los abordan como quienes saludan la bandera. Decimos todo esto para alertar a los políticos y excitarlos se fijen en el cuadro que hoy se pinta en Ecuador.
Atilio Borón, analista internacional argentino, con estrechos vínculos con los gobiernos llamados "progresistas" en América Latina, ha dicho en relación con el desenlace "previo", le llamo así, porque pese lo que dicen las apariencias eso no ha terminado, "Salvo la cuestión del precio de la gasolina -sin duda importante- todo lo demás sigue intacto, como si la enorme movilización popular en contra de las imposiciones del FMI no hubiera ocurrido. Los temas que hacían al "paquetazo" asombrosamente quedaron fuera de la discusión, lo mismo que el reclamo, anteriormente expresado por la dirigencia indígena, de revertir la carta de intención firmada con el FMI "de manera inconsulta."
http://www.elsiglo.cl/2019/10/15/el-critico-analisis-de-atilio-boron-sobre-lo-acontecido-en-ecuador/
Es cierto lo que afirma y eso lo confirma la información que se puede recoger en la prensa internacional y tanto es así, que pese el movimiento indígena planteó como salida prácticamente el rompimiento del acuerdo con el FMI, lo que se ha acordado es lo que dijo Borón, sólo la revisión del precio de la gasolina y lo demás sigue latente, porque como dijimos nosotros en otro espacio, ya en las arcas de Moreno hay parte del préstamo que le otorgó el ente financiero internacional y es poco probable que ellos estén dispuestos y en disposición de desbaratar todo aquello. Por eso Moreno, melosamente, ofrece revisión y algunas compensaciones como el pago de los empresarios de un bono de unos 30 dólares a sus trabajadores para tranquilizarles.
Pero a todas estas, la economista jefe del FMI, Gita Gopinath, dijo en Washington que celebra que se intente "reunir a todas las partes interesadas y que se tomen las decisiones sobre las reformas macroeconómicas, teniendo en cuenta a las comunidades que van a ser afectadas".
Es evidente que dice exactamente lo mismo que ha dicho Moreno, que se revisen algunas de las medidas ya decididas entre el ente que representa y el gobierno y haciendo los ajustes que ya ellos mismos previeron para rebajar las presiones en el movimiento popular y seguir adelante con el "paquetazo". Pues eso es exactamente lo que quiere decir con lo de "teniendo en cuenta a las comunidades que van a ser afectadas". Y es curioso que el redactor de la nota diga que la declarante aquello "celebra".
Aspiran pues, que esa inmensa fuerza que desataron las medidas y obligaron a un ególatra, "guapo y apoyado" como Moreno a huir de Quito a Guayaquil y se viese obligado de decretar toque de queda y al final derogar el decreto sobre el alza del combustible, quede disipada dando unos bonos y disminuyendo, por ahora, el precio de los combustibles a espera de una coyuntura propicia.
Cuando decimos esto, estamos ratificando lo que sostuvo Atilio Borón, como que el resto de medidas que contemplan "el paquetazo" de Moreno y el FMI quedaron por fuera del acuerdo.
Recuerdo que un viejo amigo de los tiempos de nuestras luchas en Valencia, comentó por las redes que la prensa internacional, según su opinión, estaba dando un cuadro parcial de lo que acontecía en Ecuador, cuando ponía demasiado énfasis en caracterizar el conflicto por la participación indígena. Creo que los hechos demostraron que si no fue todo lo que la prensa reflejó, si en gran parte. Según los reportes de la prensa internacional, de América Latina y Europa, eso fue en buena medida así, tanto que los acuerdos se tomaron entre el gobierno y la representación indígena. Todo lo demás quedó por fuera. Con posterioridad, se informó de la represión desatada por Moreno contra los factores políticos opositores como el partido de Correa, sin que en la mesa donde se firmaron o convinieron los acuerdos se estableciese nada al respecto.
Por esto último, el carácter del acuerdo que como dice Borón, casi dejó todo como estaba, revela la ausencia de una propuesta política sustancial y una mayor visión sobre el problema. Y es por demás obvio que, a esa mesa de negociaciones, sólo acudió aparte del gobierno y el movimiento indígena, lo que revela que el cuadro ofrecido por la prensa, al contrario de lo que mi viejo amigo de Valencia pensó, fue acertado. O para decirlo de otra manera, los políticos de las distintas tendencias que hacen oposición a Moreno, incluyendo parte del movimiento socialcristiano y las fuerzas de Rafael Correa, no tuvieron presencia significativa y determinante en esas luchas y en consecuencia tampoco liderazgo.
Pareciera que el esfuerzo que Rafael Correa hizo desde Bruselas de intentar orientar la protesta y hasta asumir liderazgo, lo que en Venezuela tuvo mucha resonancia a través de los medios audiovisuales, no tuvo efecto sustantivo allá en el terreno de los acontecimientos.
Este cuadro quedaría mejor pintado, como para ser una buena interpretación de lo que ahora pudiera estar pasando en Ecuador, cuando ponemos atención a un reporte de prensa que hace mención a un dirigente indígena, para nosotros hasta ahora mismo desconocido. Según la nota el dirigente indígena Leonidas Iza "un quichua de la comunidad San Ignacio de Toacazo, 60 kilómetros al suroeste de la capital en la provincia de Cotopaxi– y Jaime Vargas –un indígena achuar de la Amazonía– fueron los líderes visibles del poderoso movimiento indígena que con poco recursos, limitado apoyo de los capitalinos y enfrentando a la policías y los militares, lograron cambiar decisiones que, Moreno aseguró, no eran reversibles."
https://www.aporrea.org/internacionales/n347841.html
De él dice la nota en cuestión que "todos quieren una foto. Lo graban y, cuando se aleja, un coro masivo grita emocionado "¡Iza, Iza, Iza! ¡Comienza la paliza!"
https://www.aporrea.org/internacionales/n347841.html
Esa nota fortalece lo que antes dijimos, pero en ella hay algo más. Y esto es que el dirigente indígena Leonidas Iza y Jaime Vargas, son de las figuras más importantes que, "con pocos recursos" y "limitado apoyo capitalino", lograron cambiar decisiones que Moreno y el FMI tenían como irreversibles". Demos valor a eso de "limitado apoyo capitalino".
Por supuesto, habrá que advertir que esa nota exagera, pues el paquete sigue vivo y amenazante como hemos intentado demostrar y apenas está suspendida la medida en torno al precio del combustible, pero Moreno y el FMI esperan reponerlas sólo "teniendo en cuenta a las comunidades que van a ser afectadas", como dijo la economista jefe del FMI.
Pero la nota periodística que estamos comentado ahora trae otra información como para llamar la atención en grado superlativo a Rafael Correa y los suyos, de quienes uno cree, según de lo que emana de la información periodística y por las partes que entraron a convenir, no jugaron papel significante en los acontecimientos o fueron rebasados por los mismos, que tiene que ver con el rol que ahora pudiera comenzar a jugar Leonidas Iza. De este se dice que en las calles de Quito es exaltado como la figura prominente de esos acontecimientos, tanto que espera "avanzar hacia la discusión directa con el Estado sobre políticas económicas, tributarias y sociales". https://www.aporrea.org/internacionales/n347841.html
Según lo que dice espera estar en primera línea en la discusión con el gobierno en el diseño de las políticas por aplicarse y hasta "ve posible que el movimiento indígena dispute la presidencia en el futuro". Las próximas elecciones generales están previstas a inicios de 2021.