Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona
Strategic Culture Foundation
https://www.strategic-culture.org
Cuando se trata de los derechos de las Tierras Aborígenes en Australia, surgen diferentes contradicciones. En el mes de Mayo, la Corporación Aborigen Yindjibarndi que representa a las comunidades aborígenes…
https://www.ft.com/content/ecb8ab12-4d74-4dfc-a750-cfe573831898
obtuvo los títulos nativos exclusivos sobre los derechos a la tierra que está siendo explotada por el Grupo Fortescue Metals. Contando con la posesión legal de sus tierras, las comunidades Aborígenes pueden ahora procurar una compensación por el daño económico y espiritual infligido por la corporación minera –medida que demuestra el reconocimiento legal de los reclamos Aborígenes sobre su tierra y su uso.
En otras informaciones que causaron gran malestar entre los aborígenes y grupos ambientalistas, la gigantesca empresa minera Río Tinto…
https://www.riotinto.com/Operations/australia/pilbara/pilbara-communities
"que piensa que toma muy en serio "el patrimonio cultural y las asociaciones con agrupaciones de Propietarios Tradicionales" perforó dos piques Aborígenes con el propósito de expandir sus minas en Pilbara Occidental –la Junkan Gorge 1 y 2—de gran significación tanto nacional como indígena. Los refugios destruidos por la compañía minera tenían una antigüedad de 46 mil años y contenían evidencias de la primera ocupación humana en Australia.
A pesar del hecho que las excavaciones arqueológicas en el sitio llevadas a cabo el año 2013 desenterraron importantes reliquias históricas a la Río Tinto se le permitió explotar la tierra y sus recursos. Las excavaciones realizadas por la compañía minera fueron autorizadas mediante consentimiento ministerial, por lo tanto la voladura de los refugios no está considerada ilegal por la ley australiana.
Si un sitio histórico no está incluido en la lista del patrimonio nacional, el lugar queda sujeto a las leyes estatales las cuales aportan importantes vacíos que aprovechan las compañías mineras. El Acta del Patrimonio Aborigen del año 1972…
es contradictoria en términos de la protección de la herencia. La sección 17 del Acta sostiene que cualquier daño o alteración realizada a un sitio Aborigen constituye una agresión a menos que haya una autorización o permiso ministerial, este último, definido en la Sección 18.
El gerente ejecutivo de Río Tinto, Chris Salisbury, informó "lamentar el malestar que hemos causado" y declaró que la compañía trabajará estrechamente con las comunidades "con el propósito de aprender de lo ocurrido y fortalecer nuestra participación".
Desde el año 2010 las compañías mineras han solicitado permisos para la demolición de más de 463 sitios del Patrimonio Aborigen. Solo los inquilinos de la tierra pueden apelar por una anulación. Río Tinto declara que…
Las comunidades Aborígenes fueron notificadas en el sentido que el sitio seria volado, declaración que fue refutada por los representantes de la comunidad, quienes declararon que ellos informaron a la compañía que la significación hereditaria del sitio data desde el año 2013.
La disparidad entre las concesiones para las compañías mineras sin tomar en cuenta las preocupaciones indígenas juega un importante rol en la apropiación y explotación de tierras. Para los pueblos aborígenes su vinculación con la tierra es parte de su historia, de sus relaciones sociales ancestrales, espiritualidad, economía y administración de recursos. Las compañías mineras, por otra parte, están preocupadas de la explotación con fines de lucro—concepto capitalista que ha despojado a las comunidades indígenas destruyendo sus vínculos ancestrales con la tierra, de este modo forzando una ruptura entre la tierra y la comunidad que solo podría ser restaurada a través del reconocimiento de los derechos aborígenes a la tierra. Para los pueblos indígenas, la tierra es un concepto fundamental de identidad. Este vínculo es ignorado por los gobiernos y las corporaciones para quienes la tierra significa solo una fuente de explotación.
Los derechos nativos a la tierra que les fueron entregados…
en el año 2015 a las comunidades de Puutu Kunti Kurrama y Pinikura no ofrecían ninguna protección para los sitios hereditarios, por lo tanto, el único recurso que queda es la denuncia y la movilización pública permanente. La participación de los pueblos aborígenes en la toma decisiones hasta ahora se ha visto duramente prejuiciada por las corporaciones y en los acuerdos respecto las ganancias y el uso de la tierra. La conservación de la herencia aborigen está lejos de ser considerada favorablemente cuando se trata de las exigencias de las compañías mineras. Bajo la legislación administrativa se pueden obtener algunos retardos al empeño de las mineras, no obstante, el problema de la protección de la Herencia Aborigen continúa todavía sujeta a compromisos que mucho gravitan a favor de las corporaciones mineras y a sus fines de lucro.
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