Análisis de discurso del libro de John Bolton

Viernes, 03/07/2020 10:03 AM

Contexto general:

  1. Por primera vez en la historia de los Estados Unidos un alto funcionario, quien hizo carrera en el servicio exterior y estuvo a cargo de la seguridad nacional de ese país hasta hace poco, publica un libro con multitud de supuestas infidencias y filtraciones sobre la presunta orientación errática, personalista y electoralista de un Presidente de la República en ejercicio, sobre todo en temas de política exterior.

  2. La publicación del libro La habitación donde sucedió: una memoria de la Casa Blanca (2020) de John Bolton, ex Consejero de Seguridad de la Casa Blanca ha sido etiquetada por el mismo Presidente Trump y otros altos funcionarios de su gobierno como "un grave caso de filtración" de delicados asuntos de Estado. Filtración que "pondría poner en riesgo la seguridad y defensa del país", alimentando así un escándalo político de gran calado que ha resultado en que el libro haya escalado en pocos días al primer lugar en ventas como título más vendido en la historia de ese país bajo la categoría de literatura no ficcional.

  3. El escándalo político editorial se produce a escasos 5 meses de las elecciones presidenciales de EE.UU. y en el marco de un aparatoso desplome de la popularidad del Presidente Trump a causa de su manejo errático de la pandemia por coronavirus, la caída del PIB y la fuerte escalada de la tasa de desempleo, fenómenos a los que se le suma la ola de disturbios desatada en buena parte del país norteño tras el racista linchamiento y asesinato policial del deportista y actor afroamericano George Floyd.

  4. La publicación del libro de Bolton se enmarca también en una extraña circunstancia en la que este exterioriza en su libro —así como en declaraciones posteriores a su publicación— una serie de supuestas diferencias insalvables con Trump respecto de su conducción de la política exterior de USA. Diferencias que rayan en acusaciones por presunta irresponsabilidad e incompetencia. Pero lo más peregrino del caso es que Bolton no aceptó en su momento formular tales señalamientos ante el Senado en la oportunidad en que fue llamado para ello hace pocos meses.

  5. Invocando que no piensa votar por ni por el aspirante republicano Donald Trump ni por el aspirante Demócrata Joe Biden en las venideras elecciones, Bolton ensaya desmarcarse del señalamiento de que sus presuntas revelaciones en plena justa preelectoral obedecerían a una venganza personal contra Trump, en represalia por su abrupta destitución del cargo. Pero, obviamente, la opinión personal de Bolton es del todo irrelevante para alterar la correlación político electoral en Estados Unidos, aunque la recepción de ciertas denuncias por parte del electorado se arguye que pudiera virtualmente desfavorecer en algún modo a Trump.

  6. Una "prueba de fuego" entonces para entender la naturaleza de esta práctica político/ literaria que ensaya Bolton en su controversial libro sería sopesar qué tan graves —o irrelevantes— para efectos de la seguridad y defensa de ese país serían sus supuestas "filtraciones" o violaciones de los términos legales de confidencialidad del cargo como Asesor de Seguridad de la Casa Blanca.

  7. La edición practicada al libro de Bolton por órganos a cargo de la seguridad y defensa de Estados Unidos no es consistente con la supuesta actitud de repulsa del libro en su conjunto por parte del Presidente Trump y otros altos funcionarios de su gobierno. Tal ambivalencia abre al menos dos hipótesis plausibles: o el libro no pudo ser suficiente y responsablemente editado y purgado en el dilatado lapso de más de 6 meses tras ser consignado por el autor. O el libro es un montaje de laboratorio para hacer política exterior e interior, por otros medios. Es decir, para presionar y forzar agendas en diversos planos, so pretexto de un desliz involuntario cometido por los órganos estatales responsables de la faena de censura.

  8. Es un secreto a voces que la Casa Blanca es la mayor factoría de mentiras, medias verdades y montajes del estado estadounidense. Con base en esta hipótesis no sería inverosímil que el libro de Bolton sea un dispositivo más para aceitar la eficaz maquinaria de propaganda, desinformación y chantaje al servicio del estado profundo norteamericano y occidental.

  9. De ser plausible esta hipótesis sería válido examinar el libro de Bolton como una pieza más integrada a un vasto engranaje de relojería. Un enmarañado dispositivo de operaciones político-psicológicas orientadas por la filosofía nazi fascista y pro burguesa inigualablemente compendiada por el teórico de la guerra no convencional Joseph Goebbels. El ministro de propaganda de Hitler orientó su política de dominio hegemónico de sus enemigos con base en un paquete de tesis todavía imperantes, a saber: 1. "Más vale una mentira que no pueda ser desmentida que una verdad inverosímil". 2. "Hay que emitir constantemente informaciones y argumentos nuevos a un ritmo tal que cuando el adversario responda el público esté ya interesado en otra cosa. Las respuestas del adversario nunca han de poder contrarrestar el nivel creciente de acusaciones". 3. Carga sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con el ataque". 4. "Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan". 5. "Toda propaganda debe ser popular. Y se debe adaptar su nivel al menos inteligente de los individuos a los que va dirigida. 6. Cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar. 7. "La capacidad receptiva de las masas es limitada y su comprensión escasa; además, tienen gran facilidad para olvidar". 8. "Una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad". 9. "Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá." 10. "No nos habría sido posible conquistar el poder o utilizarlo como lo hemos hecho sin la radio y otros medios modernos de comunicación".

  10. El revoltijo incesante de verdades, medias verdades y mentiras vehiculadas desde las alturas del poder imperial termina instituyendo una suerte de realidad paralela. Una realidad difusa y gelatinosa cuya única verdad verosímil acaso sea la que aparece legitimada por un rocambolesco escándalo político entre hipotéticos intereses enfrentados. El que Trump afirme que el libro de Bolton no contiene sino una sarta de puras mentiras; y enseguida lo acuse de incurrir en graves filtraciones, no debe ser leído como una ingenua contradicción. Los imperios no nunca hablan rectilínea o denotativamente. Recomendaba el principal teórico español del barroco quien vivió en el siglo XVII, Baltazar Gracián, a quienes aspiraban a ejercer el poder: "Obra siempre con una intención inesperada. Apunta hacia un objetivo, para deslumbrar, amaga al aire con destreza, pero en la realidad ejecuta lo que nadie espera, dejando siempre lugar para disimular tus verdaderos fines."

  11. El hecho de que el presidente Trump y otras entidades del gobierno hayan presuntamente cuestionado —y hasta intentado vetar la publicación del libro— ungen al discurso contenido en esta obra de un inusual estatuto de verdad. Asimismo, que el libro haya sido publicado por una editorial de gran renombre (Simon y Schuster) también contribuye a imprimirle estatuto de memoria y de discurso de interés histórico. Pero el que los tribunales ante los cuales cursa la petición de censura haya autorizado su publicación alegando que es un documento de interés nacional termina sellando su valor como documento histórico, contribuyendo a su vez a su posicionamiento como best seller.

  12. En definitiva, y para concluir con este marco para textual del libro de Bolton cabe explorar la hipótesis de que el mismo haya sido maquinado como parte del arsenal de precampaña electoral de Trump. En política es muy extendido la tesis según la cual a los políticos no les importa tanto que tan bien o mal se hable de ellos, sino permanecer siempre en el foco de la atención pública.

  13. Pero seguramente mucho más importante que la atención lograda sobre la figura de Trump en virtud del libro sería los efectos políticos y geopolíticos que desencadene el libro. Y uno de los aspectos más importantes en este particular sería la contundencia con que Trump pueda contestar a esta supuesta campaña de descrédito. Desde luego que la capacidad de "voltear la tortilla" de esta presunta campaña de descrédito dependería de la presunta gravedad de las denuncias y de su impacto tanto en política exterior como en política interna. Y para ello resulta cardinal valorar hasta qué punto los ataques de Bolton asumen un carácter más bien subjetivo (opiniones, juicios, creencias, chismes, etc.) o asumen un carácter más bien fáctico.

  14. No sería ingenuo imaginar que frente un clima político interno en extremo enrarecido, el escándalo del libro de Bolton pudiera cumplir un objetivo de hielera, encaminado a enfriar la atención pública de problemas más concretos y preocupantes para el ciudadano medio estadounidense, al tiempo en que también alborota el avispero de la política exterior en diversos países objeto de la política de contención y agresión por la Casa Blanca. En el presente análisis de discurso abordaremos el libro en su conjunto incluyendo lo que dice sobre América Latina, pero con especial énfasis en lo que refiere al caso Venezuela.

Análisis de campos discursivos

  1. Pese a que el libro de Bolton virtualmente rebela y comenta multitud de apreciaciones, caracterizaciones, comentarios y hasta decisiones asumidas por Trump en diversos temas de política exterior —primordialmente relativos a Suramérica, Europa, Asia y el Gran Medio Oriente o Medio Oriente Ampliado, geopolíticamente definido como el espacio territorial que va desde ‎Afganistán hasta Marruecos— el clima general de su representación describe no solo un Presidente caricaturescamente pragmático, ignorante, desubicado, mal informado, errático y hasta temerario e irresponsable en sus comentarios y decisiones, sino que, asimismo, denuncia a la par una política exterior toscamente subjetiva e improvisada. Decir esto respecto de un estado con el más letal poder convencional y nuclear no es precisamente conchas de ajo.

  2. En casi ninguna página del libro, Bolton sopesa los éxitos en política exterior alcanzados por Trump. Tal maniqueísmo en su caracterización así como el clima tosco, doméstico y banal con que describe el modelo para la toma de decisiones de su jefe resulta tan caricaturesco que linda más bien, a veces, con una burla de la cultura política e inteligencia de sus lectores. Trump no solo ha reasumido la hegemonía imperialista en buena parte de América Latina sino que asimismo está forzando una fuerte reconfiguración del Oriente Medio Ampliado en beneficio de la agenda usamericana y occidental. El discurso político generalmente significa no tanto lo que explícitamente afirma sino que, habitualmente, significa más quello que omite o deja implícito.

  3. Así las cosas, el libro de Bolton pareciera más bien a veces una "trampa caza bobos" dirigida a que dirigentes del mundo y sobre todo del sur global subestimen el enmarañado aparato de inteligencia y diplomacia ensamblados con el poderío económico/ financiero/ comercial y la compleja ingeniería de la guerra asimétrica, escoltado por el aparato industrial/ militar de guerra convencional y nuclear en pleno despliegue hoy por EE.UU. en su condición de potencia defensora de los intereses del imperialismo capitalista global.

  4. El clima de chismografía política de baja estofa descrito insistentemente por Bolton pareciera más bien buscar describir un estado de descomposición general y terminal del aparato de inteligencia y de gobernanza del mundo occidental, a cargo de la administración presidida por Trump, incluyendo los diversos y especializados organismos de seguridad. Tal operación presenta visos de constituir una operación de bandera falsa. Se tramita así confundir al enemigo de clase, induciéndolo a desubicarse y confiarse. Pero el que en el informe sobre Venezuela Bolton "filtre" que la Casa Blanca ha logrado ‘’tocar" a altas personalidades de las FANB así como del Tribunal Supremo de Justicia indica muchas cosas. Una filtración de bandera falsa busca, por norma, invertir la verdad a fin de confundir y desestabilizar las filas enemigas. La Casa Blanca manejaría información de los cuatro ejes neurálgicos sobre los que hoy descansa el poder político en Venezuela, a saber: a) la capacidad para demoler el Estado y dislocar el desarrollo, faena que viene haciendo convenientemente bien la mal llamada "oposición" apátrida comandada por Guaidó; b) la moral combativa y democrática del chavismo de base, que sabe ha sido disminuida producto el asedio genocida de espectro completo; c) la lealtad de las FANB y d) la probidad institucional y alineamiento con el proceso revolucionario del Tribunal Supremo de Justicia, contrapeso institucional de los dislates parlamentarios. El hecho de que Bolton deje "filtrar" —como quien no quiere la cosa— que hay importantes personeros de las FANB y del Tribunal Supremo que han sido efectivamente hegemonizados —en favor del imperialismo y en contra del Presidente Maduro y el proyecto bolivariano— lo que en verdad significa es que sabe de buena fuente que tales instancias no han logrado ser efectivamente penetradas. Pero sibilinamente sugiere que seguirán trabajando arduamente para lograrlo, lo cual obliga al gobierno a tomar previsiones, propendiendo a coadyuvar así así el clima de coherencia y legalidad entre los distintos poderes del Estado.

  5. El imperialismo estadounidense se ha especializado en producir diferentes géneros de telebasura, todos dirigidos a desarmar y degradar las identidades culturales combativas, desmembrar la lucha de la clase revolucionaria y atapuzar las mentes y corazones de miles de millones con todos los contravalores imaginables: pornografía soft, hard y snuff, talk shows de pseudo-política, violencia extrema, sadismo ubicuo, lumpen deportes y representación de Sur del mundo como un territorio rico en materias primas pero sin ley. Un territorio sin seres propiamente humanos, a secas predestinado para ser explotado y dominado por sus sempiternos amos occidentales.

  6. En este mismo orden de degeneración de espectro total de todos los ámbitos de la vida humana pareciera que opera la producción de sentido del libro de Bolton. Una obra que se auto presenta como inscrita en el género literario de las memorias políticas, pero que en realidad embute dentro de este género históricamente constituido, subvirtiéndolo, degradándolo y reconfigurándolo, elementos característicos del talk show político neoliberal, la porno política, las pseudo filtraciones de documentos de inteligencia con posibles fines de chantaje diplomático y la biografía de personajes políticos prominentes en contextos electorales; eventualmente a fin de colocarlos al centro de la atención pública y de la intención de voto.

  7. Tras la saciedad de declaraciones altisonantes, amenazantes de guerras santas, incursiones en países, y hasta de uso unilateral del poder nuclear, estiladas por el Presidente Trump a lo largo de casi toda su presidencia, desatar un escándalo político durante su administración luciría casi que quimérico. Pero es lo que busca y en buena medida logra este libro de Bolton.

  8. "Filtrar" que el Presidente Trump dijo al voleo que "sería lindo (cool) invadir Venezuela", pues "Venezuela le pertenece a los Estados Unidos", y que resulta políticamente ético desconocer a un gobierno democráticamente electo y poner precio a la cabeza del Presidente de Venezuela Nicolás Maduro alegando que "es un hombre muy duro…" para poco después mostrarse dispuesto a celebrar una reunión con el presidente Maduro para ultimar los detalles sobre su separación del poder hace parte de una nueva doctrina de diplomacia. Una diplomacia aliñada de terrorismo de estado imperial de espectro total. Una doctrina hibrida, mutante y dinamitadora de todo el derecho y el orden internacional, a la que de forma genuflexa tributa el pasquín de Bolton.

  9. Pero es peor aún. La nuez de las supuestas diferencias de Bolton hacia el presidente Trump respecto de Venezuela estriba en que Bolton acusa a Trump de haber tenido una política de paloma diplomática en lugar de ordenar una agresiva política de halcón guerrerista. El significado implícito de esta supuesta diatriba puede resumirse en el siguiente enunciado: "si no fuera por la posición tímida de Trump hacia Venezuela, este país suramericano ya sería un protectorado más de los Estados Unidos". El subtexto de esta enunciación es que Trump es más ético, demócrata y respetuoso del derecho internacional que todo su anárquico y pragmático aparato de inteligencia, más alineado con la política de los feroces halcones en temas de política exterior.

  10. Del enunciado anterior bien podría colegirse que el libro de Bolton pudiera estar buscando enviar un mensaje cifrado a distintos gobiernos y gobernantes del mundo respecto de que Trump, caso de ser reelecto, sería menos intervencionista y guerrerista que Biden. Esta tesis es consistente con la reciente declaración de Trump según la cual el tiempo de intervenciones armadas de países por parte de los Estados Unidos es ya una anacrónica política ya desechada.

  11. La posición presuntamente defendida por Bolton de que una política de asfixia simultánea de los gobiernos, los pueblos y los movimientos progresistas de América Latina, incluyendo Bolivia, Nicaragua, Cuba y las FARC, constituía el mejor mecanismo para acelerar la caída del gobierno de Venezuela no es presentada por el autor como efecto del fracaso relativo de la política estadounidense de dominio armado del Gran Oriente Medio Ampliado. La política de tierra arrasada consistente en la reducción planificada a la miseria y hasta la destrucción de países completos, incluyendo el asesinato sistemático de sus líderes, para los operadores de la línea dura del Estado estadounidense no requiere ni ser justificada. Pues hacerlo, según Bolton, resultaría peligroso para la seguridad y defensa de los Estados Unidos.

  12. Así, casi todas las acusaciones que formula Bolton contra Trump resultan tan grotescas como fáciles de rebatir. Bolton acusa a Trump, por ejemplo, de haber pedido al líder chino Xi Jinping que lo ayudara a ganar la reelección, ofreciéndole reducir los aranceles estadounidenses a cambio de "algunos aumentos en las compras de productos agrícolas chinos, para ayudar con el crucial voto de los estados agrícolas" lo cual es obviamente lo que debería hacer todo mandatario medianamente responsable: incentivar el comercio para favorecer a los agricultores y la escomía de su país.

  13. Las acusaciones que hace Bolton contra Trump según las cuales el Presidente no sabía que Gran Bretaña era una potencia nuclear, que Finlandia no era parte de Rusia y que las ideas y posiciones del presidente surcoreano Moon Jae-in con respecto a Corea del Norte eran "esquizofrénicas" obviamente parecen más chismes de casa de vecindad en un teatro globalizado que delicadas filtraciones o graves delitos políticos. Naturalmente, en una "sociedad del espectáculo" como la sociedad capitalista denunciada por el filósofo francés Guy Debord tal anomia deviene en régimen de normalidad. Según Debord: "Toda la vida en las sociedades donde rigen las condiciones modernas de producción se manifiesta como una inmensa acumulación de espectáculos. Todo lo que antes se vivía directamente, se aleja ahora en una representación. (Cap. 1, sct. 1).

Conclusiones:

  1. El libro de Bolton es lanzado con bombos y platillos con una impresionante cobertura de medios y un graciosísimo empujón propagandístico de Trump, en un contexto en que este necesita una serie de eventos que sirvan de cortina de humo a sus recientes fiascos relativos en política exterior (Venezuela, Colombia, Nicaragua, México, Corea del Norte, etc.) y que lo ayuden a drenar el enfado masivo y creciente en la política interior estadounidense.

  2. Si bien Bolton insiste en su libro en la ignorancia, impericia y falta de consistencia de Trump para manejar la complejísima política exterior de Estados Unidos —en su carácter de representante y defensor de los intereses capitalistas globales— las supuestas impactantes filtraciones que promete el libro no son tales. A lo sumo se ventilan diferencias fundamentalmente de estilo entre dos funcionarios públicos, ambos obstinados en poner al mundo al servicio del gran capital financiero.

  3. Las presuntas discusiones ventiladas en la interacción entre Bolton y Trump para planificar invasiones de países y reducción planificada de población mediante genocidas sanciones económicas espectacularizan la ausencia más absoluta de empatía humana, de respeto por los derechos sociales y políticos de los pueblos del Sur del mundo, así como la falta más absoluta de remordimientos. Estas interacciones registran para la historia la temeridad que comparten todos aquellos que padecen graves trastornos no sólo de personalidad sino de comprensión de la dialéctica de la lucha de clases y sus consecuencias en historia.

  4. Mutatis mutandi, el libro de Bolton nos mueve a resonar aquella reflexión del eminente filósofo, sociólogo, teórico de la música y compositor alemán Theodor W. Adorno (1903 – 1969) quien decía: "Es imposible sustraerse a la reflexión de que el descubrimiento de la bomba atómica, que puede literalmente eliminar de un solo golpe a centenares de miles de seres humanos, pertenece al mismo contexto que el genocidio. El crecimiento brusco de la población suele denominarse hoy con preferencia "explosión demográfica": no parece sino que la fatalidad histórica tuviese ya dispuestas, para frenar la explosión demográfica, unas contraexplosiones: la matanza de pueblos enteros". Una reflexión filosófica que resume de manera magnífica Alexander Pichushkin aquel asesino serial ruso acusado en el 2006 de matar 49 personas. Pichushkin afirmó en su juicio una frase que aplicaría sin comillas para los gestores del imperialismo capitalista: "Una vida sin homicidios es para mí como una vida sin alimentos para ustedes."

  5. Pero simplificar el intento de dominio del planeta entero por el capitalismo financiero a la mente desquiciada de un psicópata es no comprender el núcleo complejo y de régimen socio metabólico del problema que subyace a los planteos visibilizados en este libro de Bolton. El fondo que subyace al antihumanismo extremo que promete el imperio del mercado capitalista es la promesa de alcanzar el cielo en la tierra. Pero la forma de alcanzar este cielo en la tierra para los defensores del imperialismo capitalista es arrancar del camino todo aquello y todo aquel que conspire contra el funcionamiento del sistema en que se funda el mito sagrado del progreso. Mito que para ellos presume la valorización sin límite alguno del capital. Por el contrario, una ética fundada en el compartir y el no acumular —como base del orden social y económico según el orden del capital financiero— llevaría a la postre, según las burocracias pro empresariales, a la miseria general de todos.

  6. Por ello mismo, los teóricos defensores del mercado y sus administradores se esfuerzan por convencernos de mil modos que lo malo (por ejemplo, someter o invadir países ricos en materias primas como Venezuela) es útil… y por ello mismo, es bueno. Y lo bueno (por ejemplo respetar la soberanía y derechos humanos de los pueblos ricos en materias primas indispensables para el funcionamiento del sistema capitalista) es a la larga malo para todos, llegando a ser, incluso, suicida para el sistema y para la "civilización" occidental. Como lo expresa Franz Hinkelammert en su libro El sujeto y la ley (2005): "Según San Pablo, la raíz de todos los males es el amor al dinero; según las burocracias empresariales, la raíz de todos los males es el amor al prójimo" (p. 509). Por eso es necesario y asimismo ético criminalizar, perseguir y hasta reducir genocidamente a los venezolanos, cubanos, nicaragüenses o colombianos humanistas y revolucionarios al estatuto de hordas subhumanas; y a los líderes de los movimientos revolucionarios, al de oscuros capos del narcotráfico y el terrorismo global.

  7. El libro de Bolton pudiera rotularse así como una operación psicológica (OPSIC) empaquetado como literatura snuff en la que se justifica y patrocina abiertamente desde la autoridad discursiva de la memoria política de cuño imperialista neoliberal, la necesidad, conveniencia y hasta urgencia de aterrorizar, quebrar e invadir militar y paramilitarmente países como Venezuela, para acto seguido exterminar líderes, movimientos sociales enteros y pueblos en diferentes partes del mundo. Todo para satisfacer las sacrosantas necesidades expansionistas y desarrollistas occidentales. Las películas snuff o vídeos snuff (del inglés snuff out, que significa «morir» o «apagar» en sentido figurado) son vídeos cortos o cortometrajes de asesinatos, torturas, suicidios, necrofilia, infanticidio, entre otros crímenes reales (sin la ayuda de efectos especiales o cualquier otro truco) con la finalidad de distribuirlas con fines de lucro cruel para el asesino/ realizador; y de entretenimiento sádico para el voyeurista/ comprador.

  8. El bloqueo genocida en pleno desarrollo contra el pueblo de Venezuela —derivado de las políticas imperialistas occidentales de signo terrorista mal llamadas sanciones económicas y comerciales—habría cobrado un estimado de 40 mil vidas tan sólo entre agosto de 2017 y agosto de 2019, estimó el Centro para la Investigación Económica y Política con sede en Estados Unidos. El abogado suizo y estadounidense, escritor, historiador y experto en el campo de los derechos humanos de la ONU Alfred-Maurice de Zayas estima que los efectos de estas mal llamadas sanciones e incautaciones occidentales de carácter ilegal e inmoral contra Venezuela bien pudieran doblar esta cifra. A este particular bueno es recordar la posición sostenida el secretario general de la ONU, Boutros Boutros-Ghali, refiriéndose a la matanza de Ruanda ocurrida en 1994: "No es simplemente un fracaso de las Naciones Unidas, sino también de la comunidad internacional, y todos compartimos la responsabilidad. Se ha cometido un genocidio. Más de doscientas mil personas han sido asesinadas y la comunidad internacional aún sigue discutiendo qué hacer."

  9. Así como medios los masivos de comunicación social occidental y la clase política mundial contemplaron con indolencia la política de exterminio étnico sucedida en Ruanda, hoy lo hacen con una situación de tragedia humanitaria inducida, similar en Venezuela. Una política de exterminio planificado de población civil que el panfleto político de Bolton aplaude y más bien espolea. Tal vez la acusación más pertinaz que hace Bolton contra Trump en su libro es no haber ordenado bombardear sistemáticamente cada ciudad de Venezuela para asesinar a unos cuantos millones de venezolanos. "El fin del terrorismo —decía Umberto Eco— no es solamente matar ciegamente, sino lanzar un mensaje para desestabilizar al enemigo". Por ello la derecha de toda la región ideologiza por todos sus medios que "el socialismo solo engendra la miseria que hoy en vemos en Venezuela". El discurso de Bolton es así funcional a la política de aislamiento regional y mundial de Venezuela incluso en su capacidad para defender sus derechos inalienables a la existencia como pueblo soberano y al ejercicio de la democracia.

  10. La pensadora mexicana Sayak Valencia ha propuesto el adjetivo "capitalismo gore" —que traduce capitalismo sangre— para caracterizar la forma y el contenido que éste mecanismo socio metabólico adquiere en zonas fronterizas (concretamente en la ciudad de Tijuana, México). Arguye Valencia: "…mientras que Marx habla, en el libro primero de El Capital, sobre la riqueza y dice: ‘la riqueza, en las sociedades en las que domina el modo de producción capitalista, se presenta como una inmensa acumulación de mercancías’, en el capitalismo gore (capitalismo sangre) se subvierte este proceso y la destrucción del cuerpo se convierte en sí mismo en el producto, en la mercancía; y la acumulación ahora es solo posible a través de contabilizar el número de muertos, ya que la muerte se ha convertido en el negocio más rentable" (2010: 16).

  11. El libo de Bolton sugiere y deja en claro muchas cosas. Pero acaso la principal pueda abreviarse en estos términos: "Si Venezuela todavía no fue invadida por ejércitos convencionales y paramilitares; y puesta bajo la bota salvífica de Washington fue porque Trump ha sido demasiado cándido y generoso con los comunistas venezolanos". Es claro: el nuevo modelo de guerra híbrida de VI generación que libra Occidente contra el mundo Sur tiene hoy como conejillo de indias al pueblo humilde y revolucionario de Venezuela. Venezuela padece hoy un asedio criminal (nueva diplomacia de cerco y asfixia) en algún modo análogo al que fue sometido la población de la ciudad rusa de Leningrado durante la segunda guerra mundial imperialista. Ante la perspectiva de tener que mantener a una población enemiga de más de 3 millones de habitantes, Adolf Hitler ordenó que se asediara Leningrado y se dejara sádicamente morir a esa población de hambre y frío. El sitio de Leningrado fue mantenido por casi 900 días, desde septiembre de 1941 hasta enero de 1944, provocando 1.200.000 muertos civiles. Los venezolanos hemos sido víctimas ya de 1400 días continuos de asedio genocida desde el inicio del sistemático paquete de sanciones y confiscaciones de activos y reservas monetarias internacionales ordenadas por Trump en agosto de 2017 hasta la fecha. La gran diferencia es que Leningrado era una ciudad de mediano porte, que movía el 11 % de la industria soviética y que había sido la antigua capital del Imperio Ruso y la cuna de la Revolución rusa de 1917. A diferencia, Venezuela es un país dirigido por un gobierno de signo socialista que ensaya diversos mecanismos para mitigar los efectos de un estado de sitio occidental inclemente y de espectro total. Se busca generar una gran parálisis industrial y comercial del país para forzar y redituar una hambruna programada. No le faltaba razón así a Marx cuando concluía en el tomo I de El capital: "Si el dinero, como dice Augier, viene al mundo con manchas de sangre en una mejilla, el capital lo hace chorreando sangre y lodo por todos los poros, desde la cabeza hasta los pies".

  12. La gran recesión del año 2009 y la pandemia y estanflación mundial que sufrimos en el 2020 nos confirman que bajo los dictámenes de un capitalismo por desposesión, las graves crisis no son ni impredecibles ni se esfumarán por arte de magia. Las crisis hoy son estructurales y se tornan cada vez más inclementes, genocidas y sincronizadas globalmente. Mientras Bolton presenta en su libro como que Washington sigue siendo el cuartel general donde se deciden arbitrariamente los destinos del mundo y se gestiona el insaciable impulso por apropiarse de la plusvalía global, el pueblo revolucionario de Venezuela y el gobierno bolivariano siguen librando una batalla. Una gesta épica en contra de acaso el más bárbaro crimen de agresión de nuestra historia contemporánea. Así, tal vez el único mérito literario del libro de Bolton sea su realismo naturalista para describir de cuerpo entero la psicología de clase y la catadura moral de una elite lumpen burguesa imperialista occidental devenida en jactanciosa pandilla de asesinos en serie.

Bibliografia consultada

Boito, María Eugenia. (2014). "Capitalismo/sensibilidad/violencia: forma mercancía y sensibilidad snuff. Fundamentos en Humanidades" vol. XV, núm. 29, pp. 19-44, Universidad Nacional de San Luis San Luis, Argentina.

Debord, Guy. (1967). La sociedad del espectáculo. Champ Libre.

Hinkemmert, Franz. (2006). El sujeto y la ley. El retorno del sujeto reprimido. Caracas. El perro y la rana.

Mainguenau, Dominique. (2010). O discurso pornográfico. Sao Paulo. Parábola.

Marx, C. (1994) El Capital. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica.

Valencia, S. (2010) Capitalismo Gore. Barcelona: Melusina.

 

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