El desastre que se presenta en las elecciones de Estados Unidos tiene como base su Constitución: "Dado en Convención, por consentimiento unánime de los Estados presentes, el día diecisiete de septiembre del año de Nuestro Señor de mil setecientos ochenta y siete, y duodécimo de la Independencia de los Estados Unidos de América"; o sea, la Constitución del 17-09 de 1.787, con sus respectivas enmiendas posteriores.
Tal Constitución, en su artículo 1 establece: "Sección 1. La Cámara de Representantes estará formada por miembros elegidos cada dos años por el pueblo de los diversos Estados… Sección 2. … El número de Representantes no excederá uno por cada treinta mil habitantes con tal que cada Estado cuente con un Representante cuando menos… Sección 3. El Senado de los Estados Unidos se compondrá de dos Senadores por cada Estado (elegidos por seis años por la legislatura del mismo)…"
En la Vigesimotercera Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos, ratificada en marzo 29, 1961, en la Sección 1 señala: "Al Distrito de Columbia o Washington D. C., aunque no es un estado, se le concede tres votos electorales". Lo que indica, que teniendo Estados Unidos 50 estados, dispondrá de 100 Senadores; actualmente por la distribución Constitucional, la Cámara de Representantes está conformada por 435 integrantes; entonces tenemos 100 Senadores, mas 435 Representantes y los 3 de Washington D.C., suman 538 miembros del Congreso.
Por otra parte, tenemos que, el número de electores es igual al número total de miembros del Congreso de los Estados Unidos (compuesto de 435 representantes y 100 senadores), además de tres electores del Distrito de Columbia; o sea 538 votos electorales.
Los electores no están obligados por ley federal a respaldar a un candidato, sin embargo, en la inmensa mayoría de los casos lo hacen votando por el candidato a quien se prometió. Además, muchos estados tienen leyes destinadas a garantizar que los electores voten por los candidatos que se comprometieron
A diferencia de muchos otros países, incluida Venezuela que tiene un Poder Electoral, Estados Unidos no cuenta con una autoridad electoral única; cada estado tiene sus propias normas y sus propios plazos, y por eso el recuento de votos en Estados Unidos es mucho más complicado de lo habitual.
La elección en USA es una elección indirecta, donde se elige es el colegio electoral (538), que son los que determinan quien será el presidente de Estados Unidos. No hay autoridad centralizada, cada estado decide como contar sus votos.
El candidato que gana se lleva todos los votos electorales del estado, no existe participación para las minorías, pero no hay una regla única como contar los votos de los ciudadanos; varía dependiendo de cada estado. El estado decide como es su voto, electrónico, en papel, por fax, etc; así como la fecha límite para recibir votos por correo, implementada este año por el caso de la pandemia, que fueron decisivos.
Biden llamo a votar de manera anticipada, por efectos del covid, pero Trump dijo que ese voto llevaba al fraude.
Siguiendo con las elecciones tenemos que, durante el proceso electoral, cada estado va publicando resultados que son iniciales, la totalidad del conteo solo se conoce días después. Al no haber autoridad electoral, son los medios de comunicación que hacen las proyecciones de ganador en cada estado.
Los medios van reportando el conteo de votos y cuando aprecian que un candidato tiene una tendencia irreversible en un estado, proyectan un ganador, pero cuando está muy reñido, algunos medios, deciden no proyectar ganador ante la posibilidad de un recuento. Las proyecciones no son totalmente fiables. Si alguna de las partes no se está de acuerdo con los resultados, se impugna ante los tribunales del estado, sino están de acuerdo con la decisión de ese tribunal pueden apelar a la Corte Suprema.
Las leyes estatales, regulan cómo los estados escogen los votos de los colegios electorales. En todos los estados, a excepción de Maine y Nebraska, el candidato que gane la mayoría de los votos recibe todos los votos electorales del estado.
El Colegio Electoral ha sido muy criticado por varias razones: por ser anti-democrático por definición, ya que a través de él, el Presidente es elegido indirectamente, en vez de por un sistema electoral directo. Otra crítica es que crea desigualdad entre los votantes en diferentes estados durante la Elección Presidencial. Por lo general, solo los votantes en estados decisivos determinan el resultado de las elecciones, y por eso se afirma que la gran mayoría de los estadounidenses, los cuales no viven en esos estados de mayor peso electoral, resultan ignorados por las campañas electorales. Si el sistema de Colegio Electoral fuera eliminado y todo el país fuera tratado como un solo distrito para las elecciones presidenciales, entonces los resultados no dependerían de los estados cruciales. Este sistema también crea desigualdad, en el sentido que las poblaciones de estados muy pequeños, con un mínimo de 3 votos de Colegio Electoral, están sobrerrepresentadas en comparación con los votantes de estados más grandes.
El Colegio Electoral es el cuerpo de compromisarios electos encargado de elegir al presidente y al vicepresidente de los Estados Unidos. Desde 1964 el Colegio Electoral tiene 538 electores.
Cada estado tiene un número de electores igual al número de sus senadores (siempre dos por estado) y representantes en el Congreso de los Estados Unidos. Además, en virtud de la Vigesimotercera Enmienda, el Distrito de Columbia recibe electores como si se tratara de un estado, pero nunca más que el número de votos del estado menos poblado, como indica la Constitución norteamericana, señalado al principio de este artículo.
Cada elector tiene derecho a un voto para presidente y un voto para vicepresidente. Para ser elegido, un candidato debe tener una mayoría (desde 1964, por lo menos 270) de los votos electorales emitidos para ese cargo.
Numerosas enmiendas constitucionales se han introducido en el Congreso para que se sustituya el Colegio Electoral por un sistema de voto popular directo, sin embargo, ninguna propuesta ha logrado llegar con éxito al Congreso.
Indicamos en nuestro artículo de la pasada semana, en plenos escrutinios, que aparecía con la delantera Biden, pero Trump en los estados no definidos estaba aventajando, y tal como previó el mismo Biden, con los votos adelantados arrasó, según las últimas cifras que se manejan con respecto a su triunfo, que Trump sigue desconociendo, pero los grandes socios de Estados Unidos ya han felicitado a Biden y parte del equipo republicano se ha quedado callado ante las denuncias de fraude de Trump, porque no ha consignado prueba de ninguno de los hechos señalados ante la opinión pública.
Esta historia continuará porque Trump sigue desconociendo el triunfo de su contrincante y negando acceso al equipo de transición establecido en la Constitución norteamericana.