Cómo la rusofobia hizo que EEUU bombardeara a sus propios ciudadanos

Sábado, 14/11/2020 06:18 AM

Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona

Strategic Culture Foundation 

http://www.strategic-culture.org

Generaciones de incontables ciudadanos norteamericanos han sido contaminadas y enfermadas por el primer ensayo nuclear. La explosión denominada "La Trinidad" realizada el 16 de julio de 1945 se llevó a cabo en el desierto de Nuevo México. Tres semanas más tarde, dos bombas atómicas fueron lanzadas contra Japón matando alrededor de doscientas mil personas.

Pero, el número de víctimas norteamericanas causado por la contaminación radioactiva de la prueba "La Trinidad" se estima ser también imponderablemente alto. El gobierno de Estados Unidos realizó el ensayo de manera secreta, la población de Nuevo México no fue informada. Así fue a pesar de las advertencias de los científicos del Proyecto Manhattan sobre el alto riesgo para la salud de la población debido a la extremadamente alta radiación. No se advirtió al público y debido al encubrimiento realizado, incontables ciudadanos norteamericanos quedaron expuestos a la radiación cancerígena.

Durante una reciente entrevista de Karl Grossman….

https://www.youtube.com/watch7v=NSnEXMLI-rM&feature=youtu.be

con Tina Córdova, residente de Nuevo México, ella relató cómo su comunidad ha estado en campaña durante décadas para encontrar la verdad acerca del ensayo en "La Trinidad" y exigir indemnizaciones de parte del gobierno federal. Increíblemente, no ha habido ninguna investigación para establecer el impacto sobre la salud de los seres humanos provocado por la explosión del artefacto nuclear. Córdova y su comunidad calculan que el número de afectados es enorme. Ella pertenece a la cuarta generación en su familia que sufre de cáncer. Muchísimos otros cuentan….

https://www.trnitydownwinders.com/

sobre el alto índice de mortalidad infantil durante décadas y de otras morbilidades que se hallan a través de todo el estado de Nuevo México.

Una combinación de factores contribuyó a desatar una pesada carga sobre la población de Nuevo México. Este es una de los estados más pobres de Estados Unidos con una numerosa población de origen indígena y latino. Al seleccionar el sitio de la prueba de una bomba atómica, hubo un tácito racismo entre los planificadores de Washington que consideraron el área y a su población como descartables. Al no advertir a la gente sobre la explosión, se le negó la oportunidad de tomar medidas de protección tales como la evacuación o evitar el consumo de agua contaminada y alimentos producidos en el territorio contaminado. La población fue engañada para que continuara normalmente con su modo de vida luego de la explosión, bebiendo agua contaminada y respirando aire radioactivo. El periódico The New York Times resultó propicio para este encubrimiento publicando informes en que la explosión se debió a un incidente con un artefacto convencional. Fue solo después de los horribles bombardeos de Hiroshima y Nagasaki los días 6 y 9 de agosto que la población de Nuevo México se dio cuenta de lo que realmente había pasado en el sitio "La Trinidad". Desde entonces ellos han sido mantenidos desinformados de parte de Washington que ha mantenido un muro de concreto sobre el evento durante décadas.

Existe aún otro factor que aumenta al máximo el daño a la salud pública que fue el apuro del gobierno norteamericano para regimentar la tecnología de la bomba atómica. Tal como Karl Grossman lo señala, el pensamiento detrás del Proyecto Manhattan era el de atajar a la Alemania Nazi. Pero, alrededor del mes de julio de 1945 la Alemania Nazi fue derrotada y el imperio de Japón ya estaba de rodillas. La inevitable implicancia es que el presidente Harry Truman y el Pentágono querían desplegar esta ominosa arma de destrucción masiva contra la Unión Soviética lo cual habría sido una escalofriante demarcación del mundo de la pos guerra según el poderío norteamericano.

Truman impacientemente esperaba los informes acerca del ensayo de "La Trinidad" mientras asistía a la conferencia de Potsdam con los aliados en Alemania, junto a Winston Churchill de Gran Bretaña y José Stalin de la Unión Soviética. Al recibir las noticias acerca de la exitosa explosión, Truman de inmediato adoptó una actitud más estridente hacia Stalin. En ese instante, una nueva Guerra Fría había nacido.

De este modo se desató la rusofobia en la clase dominante norteamericana lo que aceleró la explosión de la bomba atómica en "La Trinidad", aunque ese evento provocaría a que generaciones de ciudadanos norteamericanos fueran afectados por enfermedades mortales a partir de la contaminación. De manera real y aterradora los gobernantes de Estados Unidos tomaron la decisión de lanzar un artefacto nuclear contra su propio pueblo. Tal así era su obsesión de enfrentar a la Unión Soviética.

Posteriormente, los ensayos nucleares de Estados Unidos durante la década de los 50 y 60 se realizaron en áreas remotas tales como Nevada y en el Océano Pacífico. Estos ensayos también cobraron una tarifa mortal contra el ambiente y las poblaciones locales de las Islas del Pacífico.

Pero las insensibles y osadas condiciones del ensayo de Nuevo México no tienen parangón en relación a la tóxica exposición que les fue impuesta a las poblaciones inocentes.

En efecto, la fría decisión de bombardear a sus propios ciudadanos tomada por el gobierno federal es un escalofriante testimonio de hasta dónde estaban dispuestos a llegar los planificadores en Washington y hasta donde estaban dispuestos a ir con su obsesiva rusofobia.

Cuando hoy en día observamos la permanente fijación de Washington y de la clase política de Estados Unidos culpando a ´Rusia por toda clase de malignas intenciones, podemos fácilmente discernir que esta endémica rusofobia que padecen los gobernantes de Estados Unidos no ha decaído.

La barbaridad de lo que ocurrió en Nuevo México hace 75 años sigue presente y activa. Si esto puede ser infligida a ciudadanos de Estados Unidos sin ninguna excusa ¿entonces qué se podría decir acerca del peligro que lo hagan en el resto del mundo?

Nota.- Sus comentarios y opiniones acerca de este artículo serán bienvenidos en

www.strategic-culture.org

Nota leída aproximadamente 1828 veces.

Las noticias más leídas: