Ta condía, Ta condía, era una expresión que utilizaba e hizo popular el célebre humorista venezolano, Joselo, cuando en uno de sus sketch para la televisión, con otro actor que lo acompañaba y se le ocultaba en los rincones de la Casa para espiarlo, Joselo lo buscaba y sabiendo que en algún lado del cuarto donde colgaba el chinchorro estaba, decía pícaramente y con su acostumbrada risita, TA CONDIO, TA CONDIOOO.
Traigo a colación estas escenas, porque las rememoré a propósito de la detención de la dictadora de Bolivia, Jeanine Añez, a quien los organismos de seguridad la encontraron CONDÍA, CONDÍA, debajo de un colchón en casa de uno de sus familiares.
Así de trágica es la vida de estas maniquíes que se prestan, cuando tienen el apoyo de los Estados Unidos y de los sectores pudientes de sus pueblos, para arremeter contra la voluntad popular de sus propios conciudadanos, los derechos humanos y ampararse en la represión para mantenerse en el gobierno.
Quien la veía tan arrogante, con un mamotreto bíblico en la mano y comparándose con artistas de Hollywood, no podía imaginarse que en poco tiempo, por voluntad del pueblo, voluntad que desconoció para prestarse al derrocamiento de Evo Morales, el mundo se informará que estaba debajo de un colchón escondiéndose de la acción de la justicia.
Pienso, que creía tener inmunidad y por eso no se preparó a tiempo para trasladarse a donde están sus amos, a los Estados Unidos, donde seguramente sería recibida con los brazos abiertos por los servicios prestados, por lo que recurrió al Colchón.
Es muy probable, que traten ahora los grandes medios de Bolivia, la Ultra Derecha de ese país y la mediática internacional que guardó silencio, cuando se prestó como dictadora para burlar la voluntad democrática del pueblo Boliviano, de presentarla ahora como víctima de la tenebrosa dictadura que ahora gobierna en Bolivia, con un abrumador apoyo popular, desenmascarando al tramposo de Almagro, que fue quien tejió el entarimado mafioso que derrocó a Evo Morales, denunciando un presunto fraude electoral que nunca pudo demostrar. Pronto verán Uds. Que denunciarán las torturas, la incomunicación y las tenebrosas condiciones en que tienen a la indefensa y demócrata Jeanine.
Debemos entonces refrescar la memoria de lo que durante el lapso la dictadora Ta Condía, Ta Condía, hizo: La prensa internacional difundió en su oportunidad la Masacre de Sacaba y Senkata donde aproximadamente fueron asesinados, víctimas de la represión militar autorizada por la dictadora, once civiles y resultaron heridas Ciento Veinte Personas. Igual pasó en las calles de la Paz y otras ciudades donde se escenificaban protestas contra la dictadura, más de siete bolivianos perdieron la vida y centenares fueron detenidos.
Pero además de esas órdenes criminales, violatoria de los Derechos Humanos de todo el pueblo boliviano, donde queda plasmada la verdadera catadura moral e ideología fascista de Jeanine Añez, en la cuenta de su Twitter:
"Sueño con una Bolivia libre de ritos satánicos, la ciudad no es para los indios, que se vayan al Altiplano y el Chaco"
Y refiriéndose a Evo Morales:
"Aferrado al Poder el pobre indio", acompañando la expresión con una caricatura de Evo, agarrando la silla presidencial.
Luego de la intensa represión autorizando a las fuerzas armadas y policiales para reprimir a sangre y fuego al pueblo boliviano, aprobó un Decreto para eximir de responsabilidad a las Fuerzas Armadas Bolivianas frente a las protestas. Es decir que les dio Licencia para Matar.
Esta es la verdadera Catadura Moral, de esta dictadora, que no tuvo el valor de enfrentar sus actuaciones, sino, que se escondió debajo de un Colchón y allí fue capturada por las autoridades policiales de Bolivia, cumpliendo mandatos judiciales.
TA CONDÍA TA CONDÍA, seguramente vuelva a apelar al mamotreto bíblico, que esgrimió para justificar su Dictadura o salgan sus amos del Norte a defenderla, pero ya la Justicia Boliviana y la opinión pública mundial conocen de sus célebres hazañas como gobernante dictatorial.