El primero de julio con motivo de la celebración de los 100 aniversarios del PCCH, su líder principal Xi Jinping se dirigió a sus connacionales y el mundo, con un discurso interesante, el cual merece ser comentado pues contiene indicadores claros del quehacer chino en un futuro inmediato.
Comenzó, como es tradicional, con un saludo a todos los miembros del PCCH en nombre del Comité Central, enarbolando el gran sueño chino para este siglo, logrado por el pueblo y su dirección política.
Brevemente hizo referencia a los cinco mil años de historia de la nación china y de los indudables logros aportados por ésta al mundo, seguidamente describió el siglo de la humillación, arduos tiempos donde China tuvo que soportar guerras (opio), tratados injustos, invasiones extranjeras, una China convertida en semicolonial y semifeudal, divisiones internas, cambios sociopolíticos, hambre y miseria.
El Partido Comunista Chino impulsado por los sucesos acaecidos en la vecina Rusia, con el marxismo – leninismo, decidió enfrentar la lucha para sacar al país del pobre estado en que se encontraba, esto no fue fácil, el trayecto ha sido largo y complicado, cada uno de sus líderes ha pasado por etapas concretas y específicas; Mao Zedong enfrentó un comienzo duro y difícil de consolidar, Deng Xiaoping aplicó las reformas (con resultados posteriores, pero en el momento de su aplicación era una incertidumbre), Jiang Zemin y Hu Jintao afianzaron las reformas de Deng, por último Xi Jinping el hombre de la quinta generación, deberá culminar el sueño chino bajo una guerra comercial con Estados Unidos, acusaciones y presiones diversas.
El presidente apunta en su alocución, "Con la victoria en la revolución de nueva democracia, se puso definitivamente fin a la historia de la sociedad semicolonial y semifeudal de la vieja China y a su situación parecida de un montón de arena suelta (divisiones internas), y se abolieron por completo los tratados desiguales impuestos a China por las potencias, así como todas las prerrogativas de las que había disfrutado el imperialismo en nuestro país, lo cual creó las condiciones sociales fundamentales para hacer realidad la gran revitalización de la nación china".
Con Deng Xiaoping comienzan las reformas, que da origen a un país dos sistemas, cuando se dice que es un socialismo de características chinas, dos de sus aspectos son, el capitalismo de estado en la economía y en la política el control del PCCH, muchos ven esto como antagonismo, mientras otros como verdaderas propiedades chinas, donde se maneja principalmente la dualidad, no el concepto binario ni la lógica aristotélica; donde los razonamientos tratan de definir el mundo en blanco y negro, los chinos manejan una cultura diferente, en su pensamiento un concepto puede no ser una u otra cosa sino complementos, como lo es el Yin y el Yan.
Al analizar el capitalismo chino no encontramos aquel ejército de desempleados, que según Marx sería el eje para derrumbar a sus propios creadores, por lo contrario, conseguimos a más de 800 millones de personas que han salido de la pobreza y la extrema eliminada 100%, lo que choca y contradice a los que hablan de esclavitud estatal; tampoco vemos invasiones a otros países para exportar socialismo chino a la fuerza, como sí ha ocurrido con las potencias occidentales que invaden para exportar democracia y libertad a su antojo, los préstamos a países en su mayoría del llamado tercer mundo; no condicionan las políticas internas de éstos como sí lo hace el FMI y el BM; su política exterior no es de amenazas, sino de paz, basada en los cinco principios: respeto mutuo por la soberanía, no agresión mutua, no interferencia en los asuntos internos de otros países, igualdad y coexistencia pacífica; tampoco forma grupos de países afines con reglas abstractas para sancionar a otras naciones, fuera del derecho internacional y de lo establecido en la ONU, práctica llevada a cabo por países occidentales, como lo afirmó recientemente en su discurso del 28/06/2021 por El Ministerio de Relaciones Exteriores de la Federación Rusa, el Canciller Serguéi Lavrov.
Naturalmente son muchos los logros alcanzados por el PCCH en estos 100 años, Xi Jinping dejó plasmado sus sentimientos de orgullo en la siguiente frase, "El gran camino abierto, la gran causa creada y los grandes éxitos alcanzados en esta centuria son dignos de figurar en los anales del desarrollo de la nación china y de la civilización humana".
También incluyó en su salutación al pueblo y sus diferentes formas de organización, expresó: "El pueblo es el creador de la historia, el verdadero héroe. En nombre del Comité Central del Partido, rindo aquí un sentido tributo a los numerosos obreros, campesinos e intelectuales de todo el país, a los partidos democráticos y personalidades sin filiación partidaria, las organizaciones populares y las personalidades patrióticas de los diversos círculos sociales".
Un saludo especial y para leer entre líneas, fue el dirigido a los compatriotas de las regiones administrativas especiales de Hong Kong, Macao e igualmente a los de Taiwán.
Para mediados del siglo XXI China espera cumplir su gran sueño, una China moderna y próspera, sin embargo, son muchas las amenazas que se esconden en el horizonte lleno de ojos occidentales, aquello de si quieres paz prepárate para la guerra, tiene algún sentido; el líder chino en su disertación señaló, "En la nueva expedición, debemos implementar cabalmente el pensamiento del partido sobre el fortalecimiento del Ejército de la nueva era….", luego agrega, "La paz, la concordia y la armonía constituyen las ideas que siempre ha buscado y desarrollado la nación china en sus más de cinco milenios, y en su sangre no están los genes de invadir a otros ni enseñorearse".
A pesar de las diferentes formas de paz diseminadas durante todo el discurso, Xi Jinping dejó claro que "China no ha atropellado, oprimido o esclavizado a los pueblos de los demás países del mundo", enfatizó "eso no lo hicimos antes, no lo hacemos ahora ni lo haremos en el futuro", también subrayó "Al mismo tiempo, no permitimos en absoluto que ninguna fuerza exterior nos atropelle, oprima o esclavice".
La China de hoy, es una nación con avances no solo en lo económico, también en la tecnología, la industria espacial, telecomunicaciones, transporte, cultura, robótica, entre muchas otras áreas, sus logros son incuestionables, son tangibles y están allí.