Según Hiran Johnson la primera víctima de la guerra es la verdad y el conflicto ucraniano no es una excepción y la verdad en esta guerra está escondida en la mejor mentira nazi, ya que el nacionalismo ucraniano no es otra que la resurrección de la doctrina Nacional Socialista, sin ningún tipo de disimulo y el regimiento Azov con sus símbolos y sus actuaciones es una muestra.
No debemos olvidar; muchos lo olvidan; que el nacionalismo ucraniano respalda al gobierno de Volodymir Zelensky y conmemoran el día del cumpleaños de Stepán Bandera, el líder pro nazi del cual nos referimos extensamente en un artículo hace unos días.
El Regimiento Azov es una unidad militar de voluntarios neonazis, que pertenecen a la Guardia Nacional de ese país bajo el Ministerio del Interior ucraniano, supuestamente contando con financiamiento de Igor Kolomoisky, oligarca ucraniano del sector eléctrico.
El Regimiento Azov en su escudo consta de una runa wolfsangel estilizada, y detrás de ella, un sol negro, símbolos que fueron utilizados por los nazis, como lo hicieron las divisiones de las Waffen SS.
Se ha notado a los combatientes del Azov con símbolos asociados a los nazis en sus uniformes, la red de televisión alemana ZDF señaló imágenes de soldados del batallón con cascos con la esvástica y "las runas de las SS del cuerpo de élite uniformado de negro de Hitler".
Michael Colborne de Foreign Policy señala a los Azov como "un peligroso movimiento extremista amigable con los neonazis" con "ambiciones globales".
Un periodista de nacionalidad polaca tuvo acceso a una de las bases del Regimiento en el complejo vacacional Majak, los soldados le mostraron tatuajes nazis y emblemas en sus uniformes.
Este cuerpo está situado en la ciudad Mariupol , conformada por grupos de extrema derecha como Svoboda y Pravy Sector que fueron participantes en la caída del Presidente Viktor Yanukovich a inicios de 2014, son parte de fuerzas paramilitares que combaten contra las milicias del este de Ucrania.
Inicialmente era un batallón integrado por voluntarios que se entrenaban por la costa del Mar Azov, sureste de Ucrania, que provenían de los grupos de ultras del futbol, del grupo neonazi Asamblea Nacional Social (SNA) y del grupo ultranacionalista Patriota de Ucrania.
De clara ideología ultranacionalista blanca, con una marcada tendencia militarista, antisemita y xenófobo.
En junio de ese año 2014 un asesor del Ministerio del Interior de nombre Anton Herashchenko señaló que el regimiento contaba con 400 combatientes y dos meses después junto a paracaidistas ucranianos recuperan Marinka de fuerzas pro rusas y luchan en la Segunda Batalla de Mariupol.
Un mes después el batallón se convirtió en regimiento y es inscrito en la Guardia Nacional de Ucrania, comenzado una mayor dotación de armas pesadas, es financiado no solamente por el Ministerio del Interior sino se supone que reciben dinero de poderos hombres de negocios de la oligarquía ucraniana como el ya mencionado Igor Kolomoisky.
El periodista Oleksiy Kuzmenko concedió una entrevista a la revista norteamericana Newsweek señalando que "desde la revuelta del Maidán de 2014, el gobierno, el ejército y las fuerzas de seguridad han institucionalizado en sus filas antiguas milicias y batallones de voluntarios vinculados a la ideología neonazi".
Este batallón paga a sus voluntarios 70 dólares mensuales y han sido registrados neonazis europeos, incluyendo españoles y norteamericanos recibiendo entrenamiento militar por el Regimiento Azov. Los integrantes del regimiento provienen de 22 países y son de diversos orígenes.
Existen franceses combatiendo en el Regimiento Azov, teniendo un instructor de nombre Gaston Besson. En el año 2016 investigadores brasileños descubrieron un supuesto complot para reclutar activistas brasileños de extrema derecha para el Batallón.
A pesar que los acuerdos de alto el fuego de Minsk, que señala que mercenarios de otras nacionalidades no pueden servir en las fuerzas armadas ucranianas, el Regimiento Azov tiene combatientes extranjeros como el militar ingles Chris Garrett, "Frank Horrigan"; un nacionalista brasileño; un ex miembro de la Legión Extranjera que apodan "El Griego".
Con esto se puede señalar que la fama de nazis del Regimiento Azov es justificada y sumada a que uno de sus primeros comandantes fue Andriy Biletsky, un antiguo parlamentario y jefe de un grupo de extrema derecha, que en los años 2014 a 2019 tenía un escaño en el parlamento de Ucrania conocido como Rada Suprema.
Al concluir su periodo parlamentario, no pudo revalidarlo en las elecciones, ya integrado al partido Svoboda, ultranacionalista y que tiene como referente histórico a Stepan Bandera, personaje de la II Guerra Mundial, con una destacada participación como colaboracionista de los alemanes.
Esta agrupación es señalada por el Departamento de Estado como un grupo de odio nacionalista, además de estar incurso en violaciones graves de derechos humanos, en el 2018 una disposición en un proyecto de ley de asignaciones, aprobado por el Congreso de los Estados Unidos bloqueó la ayuda militar a Azov por razones de su ideología supremacista blanca.
Ya en marzo del 2015 Arsen Avakov, Ministro del Interior, informó que el Regimiento Azov sería entrenado por el Ejército norteamericano en su misión de entrenamiento Operación Fearless Guardian pero como ya se dijo es bloqueada cualquier ayuda militar sea en entrenamiento y armas debido a su origen pro nazi.
Informes publicados por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) relacionan al Regimiento Azov con crímenes atroces de guerra, como asesinatos, saqueos, violaciones, detenciones ilegales y torturas.
Se señalaron saqueos masivos a viviendas civiles, ataques a zonas civiles entre los septiembre del 2014 a febrero del 2015 por parte de las fuerzas armadas ucranianas y el regimiento de Azov en Shyrokyne y sus alrededores en un informe de ACNUDH de marzo de 2016.
En otro informe de ese organismo se señala un caso de violación y tortura a un hombre con discapacidad mental por miembros de Azov.
Como ocurre siempre cuando hay intereses económicos y políticos por parte de Estados Unidos y sus aliados, se ha silenciado las tendencias pro fascistas y nazistas de Ucrania por los medios occidentales.
Las tendencias de esta milicia han sido divulgadas en varias ocasiones, como con el interesante documental Winter on Fire, divulgado por Netflix.
El gobierno de Israel ha realizado protestas por las simpatías fascistas del gobierno de Ucraniano y Joel Lion, embajador israelí en Ucrania ha sido enfático en el rechazo a la exaltación del nazismo por parte de la extrema derecha ucrania.
Este grupo paramilitar, junto al gobierno ucraniano, ha sido destacado en multitud de medios de comunicación como punta de lanza de una embestida de la OTAN hacia territorios limítrofes a Rusia, tratando de presentar a esa nación como invasor a Ucrania y la revista Newsweek señalaba estos grupos neonazis promocionados por la derecha estadounidense.
El Regimiento Azov es una fuerza política de cierta importancia que organiza campamentos juveniles, club de lectura y deportivos, donde niños y adolescentes reciben entrenamiento de combate combinado con conferencias sobre el nacionalismo ucranianiano.
Este movimiento generó una red internacional militar y política con grupos afines en América y Europa, participando en la creación de un foro virtual entre los años 2011 al 2017 con la intención de articular a fracciones fascistas, nazistas y de ultraderecha como CasaPound de Italia o Amanecer Dorado de Grecia.
Biletsky fundador de Azov; según el politólogo gales Richard Sakwa; rindió unas declaraciones donde señalaba una "misión histórica" para liderar a las "razas blancas del mundo en una cruzada final por su supervivencia... una cruzada contra los Untermenschen liderados por los semitas".
La ideología del Regimiento Azov, ha señalado el politólogo Ivan Katchanovski; que es comparada la del Patriota de Ucrania, que defiende una ideología neonazi. Por eso el Estado ruso trata de desnazificar a Ucrania.
El grupo paramilitar Azov tiene un ala política y una organización no gubernamental llamada "Cuerpo Civil Azov", quienes fundan un centro social llamada "Casa Cosaca" en Kiev.
Para septiembre de 2016 aseguró que el Cuerpo Civil Azov sería un partido político, pero no utilizaría los símbolos del Regimiento y a finales de ese año celebraron su primer Congreso, en donde eligieron a Biletsky para dirigir al partido por cuatro años.
Este partido aboga por ampliar los poderes del Presidente de Ucrania, concediéndole autoridad para ser el Comandante en Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas de Ucrania, estando a favor de reintegrar el estatus de energía nuclear de ese país, abogaron por romper los lazos diplomáticos, comerciales y culturales con Rusia.
En el conflicto de Rusia con Ucrania esta organización paramilitar es una de las principales fuerzas que enfrentan las fuerzas rusas en el sitio a la ciudad puerto de Mariúpol.
Es necesario recordar toda la desgracia que para el mundo trajo el Nacional Socialismo y reconociendo los antecedentes del gobierno de Ucrania y del Regimiento Azov, ya podemos predecir lo que a nuestro planeta le espera con esta doctrina política incentivada por capitalismo que demuestra con su actuación que no le interesa la humanidad.