1. Todos los gobiernos mexicanos, desde Benito Juárez (1857-72) hasta lo que va de López Obrador (2018-2024) estuvieron –o han estado- al servicio de la burguesía, como clase absolutamente dominante en política, economía, cultura, en el país. De los aproximadamente 25 altos mandatarios, sólo tres: Lázaro Cárdenas (1934-40), Luis Echeverría Álvarez (LEA) (1970-76) y Andrés Manuel López Obrador (AMLO) (2018-24), por las acciones como gobiernos centristas, tuvieron cierta cercanía con las posiciones política de izquierda. Lo digo, después de mi relectura de la trilogía de Daniel Cosío Villegas sobre el sistema político mexicano.
2. A pesar de las acusaciones que se han hecho contra ellos, lo que más distingue a Cárdenas y LEA, es el abrir las puertas de México a decenas de perseguidos españoles en 1937, de chilenos y argentinos en la década de los años setenta, después de romper relaciones con los fascista españoles encabezados por Francisco Franco, por un lado, y con los golpistas militares de aquellos países de América del Sur (Pinochet y Videla/Massera) No era cualquier cosa, dado que toda la derecha política y empresarial, así como los yanquis, se pronunciaron contra los refugiados.
3. De los tres gobernantes (Cárdenas, LEA y AMLO) parece que el más avanzado fue Cárdenas porque incluso habló de la "educación socialista", distribuyó tierras ejidales, impulsó la creación de la CTM (la organización más grande de los trabajadores) y, como acción más conocida, expropió el petróleo de manos inglesas y yanquis. Aunque sus medidas siempre estuvieron bajo el control de la burguesía, un fuerte sector de ésta lo combatió al final de su gobierno, logrando que no pudiera imponer –como costumbre- a su sucesor.
4. Echeverría (LEA) ha sido el más criticado de los tres porque en su sexenio se vivió una represión y persecución de una especie de guerrilla urbana que venía directamente del descontento contra las represiones a estudiantes en 1968 y en 1971. Personalmente –durante la llamada "guerra sucia"- fui detenido con salvajismo en 1973, junto a unos 50 compañeros del grupo espartaco, acusándonos falsamente de "guerrilleros"; gracias a desplegados e intervenciones de compañeros maestros de la UNAM, nos liberaron en corto tiempo.
5. Sin embargo LEA, desde que tomó posesión, comenzó a confrontarse con la derecha por sus discursos un tanto radicales, particularmente, contra el grupo Monterrey, Fidel Velázquez y Televisa. Al final de su gobierno le provocaron una gigantesca devaluación del peso, pero logró imponer a López Portillo como su sucesor. Pretendió dirigir la ONU, así como que le aprobaran una carta de "deberes y derechos" y ser líder de América Latina. Todo se le vino abajo por la devaluación del peso. Pero a pesar de ser acusado de demagogo algo hizo para no estar totalmente subordinado.
6. López Obrador lleva tres años y medio gobernando. Ha realizado importantes esfuerzos para hacer reformas y frenar la enorme delincuencia de políticos y empresarios, pero la clase dominante se las ha impedido bloqueando inversiones, así como una reforma fiscal y evitando el pago de impuestos. Aunque AMLO ha tenido manifestaciones positivas apoyado a Evo Morales, a Venezuela, a la CELAC, a los miles de migrantes, AMLO ha demostrado mucha blandenguería al permitir que cientos de ex gobernantes saqueadores sigan libres.
7. A pesar de los pesares, a pesar de que he sido enemigo durante 62 años de la democracia electoral, por ser un entretenimiento con el que el capitalismo somete a los pueblos, el análisis y opiniones de lo político –ahora que he dejado de ser activista anti poder- ha sido mi entretenimiento favorito con la esperanza de que alguien lea lo que publico. Por ello, con toda mi convicción, puedo opinar desde afuera con base en mis lecturas y experiencias, acerca de estos tres altos políticos no del todo tan funestos como todos los expresidentes restantes.