Los noticiarios de Venezuela están más colombianizados que nunca en la lucha política, se desentienden de sus continuos episodios donde han sido derrotados contundentemente por la revolución bolivariana, e insisten en darle a la vecina al fin y al cabo bolivariana en su mayoría, una impresión que puede ser creída fuera de las fronteras colombianas, matrices de opinión inmensamente falsas similares a las que le han creado a Venezuela por algo más de dos décadas, no comprenden que las y los venezolanos junto a millones de colombianos acá, progresamos en paz socialista venciendo arteros ataques contra nuestra independencia y soberanía.
Pruebas al canto son: leer nuestros periódicos pro capitalistas salvajes, u oír y ver informativos de la tv privada venezolana, impresionando sin disimulo a su teleaudiencia con espacios destinados a confirmar ahora el desastre de su vida diaria, presentándolo cual culpa de Gustavo Petro quien apenas ejerce la Presidencia desde agosto 2022. En su afán comunicacional se auto ridiculizan pues los colombianos en su territorio los conocen y reconocen, sobre todo en los sectores populares a los que jamás la prensa pro capitalista y pititanky han respaldado, siempre abocándose a favorecer negocios de los todopoderosos gobiernos pitiyanquis de otrora.
Medios secularmente enemigos del pueblo de a pie y sufriente máximo en desplazamientos, son responsables de que Colombia sea catalogada de país narcotraficante en guerra civil, solapaban la desgracia hecha política social pero escondida bajo el complejo anticomunista atrasado y servil, a punto de permitir bases militares gringas en su territorio, por gobernantes entregados a los USA. ¿A quién psicológicamente van a convencer en la Colombia 2022, que sus medios han trabajado para los colectivos mayoritarios más necesitados, cuando han sido medios que respaldaban brutal represión policial y militar de anteriores gobernantes conchabados de gringolandia?
Son tan lerdos que, a pesar del desengaño por no triunfar sus tesis en Venezuela, las ejecutan reiteradamente en Colombia y enla Chile del disimulócrata Gabriel Boric, otro que le pusieron alfombra roja en Washington y se derritió arrastrado a los pies de gringolandia, cual perrito faldero a su amo. La historia política siglo XXI los registrará más por sus miedos que por sus ejecutorias, desnudadas valientemente por Hugo Chávez y profetizada por hombres como Simón Bolívar, ejemplos de la historia innegablemente respetuosa de la democracia sin escondrijos, adulancias y componendas serviles.
Ultra necesario recordar que a Chávez le intentaron hacer lo mismo en tiempos de Bill Clinton, recibido como presidente electo en Venezuela, al viajar a los EE UU les demostró que la tan alfombra no compraba conciencia recta, el Comandante se dirigió al Bronx, prometió y cumplió en ayudar a los más pobres con la calefacción, les dijo a los gringos en su cara las hipocresías mesiánicas que ellos utilizan por siglos, o sea que en definitiva no solo en la ONU u otros organismos, hizo alocuciones antiimperialistas bolivarianas de cara al pueblo que hoy es sociedad de USA narco pútrida cual neo "way of life".
Ojo con Colombia en manos de un inteligente guerrillero a quien desean derrocar y no han podido ni podrán, tampoco en el país vecino del Brasil donde cayó Jair Bolsonaro y como estuvo cerca de LULA en el resultado, acá la prensa sucia de titulares y contenidos no puso como noticia destacada "ganó LULA", sino que escogieron encabezados así "Brasil partido en dos" o textos de aviso sobre lo ocurrido en la votación del 30 de Octubre 2022, dudando del voto mayoritario del pueblo, igual que en Venezuela cuando Maduro venció al Capriles bueno para nada.