Las nuevas vertientes políticas que provienen de la Escuela Francesa dan como un eje muerto las tendencias de izquierda que desean desarrollarse sin la masa obrera y artesanal, profesionales y campesinos. Sin duda, es una confusión ante las nuevas alternativas de poder y, que colocan a Alemania como una referencia germano- cristiana para restablecer el orden mundial que viene desde Rusia hasta Berlín.
La humanidad, como concepto se definió mucho tiempo atrás, desde Abraham, desde ese instante comenzaron los mitos de la Edad del Oro, Platón, Tomás Moros, Campanella y de las religiones antiguas con sus idolatrías que hicieron caer en confusión al pueblo de Israel. Sócrates se atrevió mediante el método dicotómico haber dividido el género humano en griegos y bárbaros, cometiendo el error de partir de sí mismo.
Hay un punto de partida final que es el género humano. Así es la naturaleza humana donde se busca conocer el origen de la desigualdad que comenzó con Caín y Abel. Es un punto de partida entre la filosofía antigua y los principios de la cristiandad. De modo que hay un gran movimiento de historiadores y teólogos que buscan restablecer los lazos invisibles que duplican lo visible y, entender lo que sucede en el Medio Oriente y porque Rusia tiene como horizonte a Alemania, donde encontramos los orígenes del terremoto de Turquía y Siria, es apenas un comienzo.
Las teletecnologías, nos están dando una transparencia en la apertura de fronteras y, en este sentido en el encarecido proceso de globalización o mundialización solo se vienen beneficiando algunas clases sociales, que, ha traído confusiones por las desigualdades económicas y sociales como las hay ahora, que ha traído la pauperización y la marginalización de ignorantes de una realidad, víctimas de este proceso.
No estamos cifrando la identidad de una economía liberal, sino que utilizando un proceso político se deconstruye la democracia que es una formación de izquierda para alimentar una identidad socialdemócrata que tiene una historicidad con el comunismo y, donde la historia se convierte en radiosa. La respuesta hasta el presente es una caja vacía, siendo entendido la política doméstica que es desafiante, porque crearon leyes para apedrear al pueblo y llevarlo a un nivel de pobreza extrema ante el cobro exagerado de impuestos y de bajos salarios cuya cartera de economista está bajo el tutelaje del diputado Jesús Farías. Hablando de Venezuela,
Quienes hablan de política y del género, son solo impostores y oportunistas, desean aplicar un significante vacío para alarmar y conformar sus teorías, porque, simplemente es una lucha por la hegemonía política e ideológica en las estrategias del conocimiento. Es decir, según Segismund Freud es un fetiche para precisar un consenso y elaborar una matriz de poder, sin duda, los movimientos feministas y GTBL se desviaron al tratar de justificar las causas laborales en relación al sexo y, a las desigualdades entre hombres y mujeres.
Es una labor ardua de los filósofos políticos dedicados a la política, como es observar el carácter conflictivo de la esfera pública y el ejercicio en la división de los poderes, que en algunas repúblicas no existe.
Han pasado los días, no es el tiempo de somnolencias, es tiempo de trazar una nueva ruta que ya esta formando cuerpo desde el Perú hasta Venezuela. No es el tiempo de los discursos políticos, hay que apartar la nostalgia y formar juicios de valor para forjar una sola perspectiva, la de nuestra patria, con hombres de un solo género y criterio común
¿Quién contará la historia en el futuro? Debemos aprender de un pensamiento jurídico y crítico, reducir los conflictos sociales y avanzar hacia una nueva encrucijada ideológica. Hombre a hombre en su genero y sexo, mujer a mujer en su género y sexo, deben saber que está naciendo una nueva región continental y hay una sola causa que es la libertad.