1. Me gustó el fuerte y corto discurso de Xóchitl Gálvez en el Congreso el pasado 1 de septiembre. Así fuertes, de un minuto, deben ser sus intervenciones en su gira, pero tiene que ser acompañada por dos oradores profesionales o del sitio visitado, buscando que en cada lugar se hable de la miseria, la explotación, los ingresos y la falta de atención gubernamental, a pesar de que es el pueblo el que mantiene al gobierno.
2. No debe olvidarse nunca lo que se llama lucha de clases, que es la batalla de los pobres y miserables contra los ricos explotadores y su gobierno. Todos los políticos (gobiernos y candidatos), silencian la lucha de clases porque están al servicio de los ricos, además porque éstos les dan mucho dinero. Entre políticos se confrontan, pero sólo peleando dinero y poder; no hay ninguno que alguna vez haya luchado a favor de los pobres o explotados.
3. Las "Mañaneras" de AMLO son dos horas diarias de chismes del presidente entre políticos; nunca he entendido cómo pueden resistir tanto tiempo los 20 periodistas que les pagan por aguantar las mismas frases de siempre. Yo las escuché unas 20 veces para saber si eran interesantes y podría aprender algo de ellas; pero después me vi como un imbécil religioso que esperaba una segura recompensa del señor.
4. Entendí que el gobierno de AMLO son sus Mañaneras. Le ha servido para atacar a sus enemigos como ladrones, asesinos y tramposos y, al mismo tiempo para defender a sus hijos, familiares, amigo y apoyadores, como los personajes más buenos y puros del país. Pero también para esconder el despojo al erario de nuevos políticos y la mayor acumulación de dinero de grandes empresarios. ¿Cuánto paga AMLO por la difusión de sus Mañaneras?
5. El gobierno de Xóchitl no sería mejor o peor que el de AMLO o Sheinbaum; sería igual si sólo se preocupa por realizar obras materiales y dar limosnas a la población para entretenerla. La única transformación en serio sería igualar el ingreso de la población con los ingresos de funcionarios y empresarios. Pero si me salen con la cantaleta imbécil de que no es posible y que habría que esperar unos dos siglos, pues concluiré que todo seguirá igual o peor.
6. Xóchitl o Sheinbaum, cualquiera, va a ser la misma gata revolcada; van a representar a la vieja y la nueva mafia; ellos saben que eso son porque el sólo hecho de estar en el gobierno los convierte en más de lo mismo. Tendrán diferentes cuerdas que las controle, pero su raíz es el capitalismo que les ordenará qué pueden hacer y qué no. AMLO ya cumplió con los ricos, ahora falta que Xóchitl denuncie a fondo, con investigación, para enterarnos de la otra o nueva mafia. (