1. Pensar es analizar, reflexionar, ser crítico, buscar salidas y soluciones; incluso se guarda silencio por dudar. Lo contrario es repetir lo que oímos, lo que escuchamos en televisión, incluso discutir sin razones válidas; lo peor es opinar por obediencia ciega. Por ello, en política, los que adoptan una posición cerrada de partido, se comportan dogmáticamente como cualquier religión que proclama: ¡Esto es así y no puede ser de otra manera!
2. Los seguidores de Marx adoptamos siempre reflexiones críticas y en permanente búsqueda. Aunque aún manejemos principios políticos básicos que parecen dogmas, éstos siempre requieren demostración: 1) La existencia de clases sociales y la necesaria lucha entre estas en búsqueda de la igualdad; 2. La permanente lucha contra el capitalismo hasta lograr su destrucción; 3) No hay nada estático, todo es cambio en la naturaleza y sociedad.
3. No estoy de acuerdo con Xóchitl al repetir -como todos los presidentes de México siempre subordinados a los intereses de los EEUU- que, como vecinos nuestra relación comercial y todo, la hemos tenido desde hace casi un siglo con EEUU, así tendrá que seguir. Es decir, nuestra soberanía, independencia, autonomía, seguirá siendo de discurso y seguiremos andando como reptiles tras sus políticas siempre de bombardeos y asesinatos de EEUU en el mundo.
4. Si Xóchitl quiere ser Presidenta de México tiene que ser inteligente, confrontadora, aguerrida, para no ser una presidenta igual a sus antecesores. Le he escuchado dos o tres discursos muy combativos, así como una entrevista larga de Blumberg de agosto pasado, muy interesante. Sin embargo, hay expresiones derrotistas en ella en la que trata bien a AMLO y a la Sheinbaum, como si no estuviera en la oposición, recibiendo fuertes agresiones verbales.
5. Como independiente de los dos bloques de poder -representados por la vieja y nueva mafia- es imposible apoyar a alguna de ellas. Escribe un articulista: un alto porcentaje de los mexicanos que están encarcelados han sido privados de su libertad por un robo que no rebasa los tres mil pesos, mientras los pillos de Segalmex desaparecieron casi 15 mil millones de pesos y los funcionarios de alto nivel de esa paraestatal aún siguen libres, sin estar sujetos a investigación y protegidos por el gobierno federal. ¿Hay diferencias? Me gustó.