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Hemos visto a través de medios internacionales al presidente de Israel de la mano de Elon
Musk, mostrando los sitios donde atacó Hamas, pero nos preguntamos ¿Porque no lo llevó a la Franja de Gaza, para que viera la tierra arrasada por los bombardeos que han dejado en ruinas, hospitales, edificios gubernamentales, universidades, miles de viviendas de los pobladores de esa zona destruidos y millares de muertos?
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Apenas concluye la frágil tregua que por presión internacional aceptó Israel, ya reanudan los bombardeos contra civiles dejando la alfombra de muertos, lo que demuestra la acción genocida de un Estado que se ha propuesto eliminar totalmente al pueblo palestino, bajo la mirada indiferente de la llamada Comunidad Internacional.
En reflexiones anteriores sobre el permanente conflicto entre Israel y Palestina, lo venía asomando, pero hoy definitivamente observando el comportamiento del Gobierno Israelí, sus fuerzas militares, policiales y brigadas de auto defensa que arrasan sin piedad el territorio de Gaza, sin consideración de las vidas humanas que allí existen, sin impórtales si son niños, mujeres embarazadas, ancianos, si el bombardeo es contra hospitales, universidades, casas donde se atiende a niños prematuros o con enfermedades graves, afirmo que las víctimas de ayer se han convertido en verdaderos verdugos, hoy, ciegos por el odio con un solo propósito desaparecer al pueblo de Palestina.
Y digo víctimas de ayer, porque ciertamente, luego que se abre la Caja de Pandora, y se pone a desnudo las barbaridades cometidas contra el pueblo judío, en lo que se conoce históricamente como El Holocausto, el mundo asombrado se solidarizó con ellos y condenó los actos de barbarie cometidos por Adolfo Hitler y sus adláteres.
Testimonio de este aprecio han sido los innumerables documentales y películas que inundaron los cines y espacios televisivos donde se denunciaban tales hechos. Así mismos libros, testimonios, declaraciones de sobrevivientes, y hasta juicios organizados por la Comunidad Internacional, donde se revelaron detalles del Holocausto y se condenó a varios de los responsables de estos hechos.
Nadie podía imaginarse que en pocos años este aprecio iba cambiando progresivamente por un sentimiento de rechazo y animadversión, producto de la conducta de toda la élite gobernante del Estado Judío, que se ha propuesto apoderarse de un territorio que históricamente le pertenece al Pueblo Palestino, violando descaradamente el Derecho Internacional, La Carta de los Derechos Humanos y el Derecho Humanitario.
Los que fueron víctimas ayer del intento hitleriano por desaparecerlos, hoy utilizando procedimientos peores, se convierten en Verdugos, pretenden y no lo ocultan en sus declaraciones, desaparecer del Mapa, al Pueblo Palestino, que dignamente lucha con todos los medios a su alcance, por cierto, con gran desventaja, por defender su territorio y su derecho a existir como nación independiente y soberana.
Viendo lo que sucede, en su verdadero contexto, es una lucha de David, contra Goliat, porque si analizamos los actores en juego, no es un enfrentamiento en Israel y Palestina; sino la lucha del Pueblo Palestino, contra todo un poder imperial, donde a la cabeza de la agresión están los Estados Unidos, secundados por Inglaterra y que cuentan con el silencio y complicidad de muchas naciones europeas que aparentemente ven los toros desde la barrera.
Es una lucha de un pueblo por su derecho a existir, por su independencia y soberanía y contra el imperialismo, que pretende además de controlar geopolíticamente la región, apoderarse de los recursos naturales que ya han detectado que existen y que seguramente utilizaran para consolidar su poder hegemónico y preparar nuevas agresiones contra potenciales enemigos que ellos mismos dicen tener como China y Rusia.
Si no fuera una lucha imperial contra Palestina si no estuviera detrás los Estados Unidos y sus secuaces, como se explica entonces que ese país, movilice, hasta submarinos con armas atómicas para intimidar no sólo a los palestinos sino, a los gobiernos que se han solidarizado con sus luchas. Cómo se explicaría entonces las ayudas financieras multimillonarias que ese país anualmente, envía a los gobiernos de Israel todos los años? Cómo se explica entonces, que Estados Unidos dote de armamentos, sofisticados al ejército israelí, para que ejecute el genocidio que se han propuesto ejecutar.
Afirmamos igualmente, que el propósito imperial, a través del Estado Sionista de Israel es la desaparición del pueblo Palestino, porque voceros de ese gobierno públicamente han sugerido utilizar armas atómicas para aniquilar en forma definitiva cualquier vestigio de vida en la Franja de Gaza.
Frente a estas nuevas amenazas, que debelan entonces que Israel tiene armas atómicas y que están dispuestos a utilizarlas en cualquier momento, igualmente, nos preguntamos y qué papel juegan los organismos de Control Internacional. ¿Qué opinión tienen los encargados de supervisión y cumplimiento del Tratado de No proliferación de armas nucleares?
Pienso como muchos, que en la actualidad la simpatía que se había creado en torno a las víctimas del Holocausto, producto de la conducta genocida de los gobiernos de Israel, se ha venido desvaneciendo y por el contrario muchísimas personas, personalmente he oído algunas, que se preguntan si estos procederes no justifican la conducta de Hitler.
¿No observará el liderazgo obcecado israelita los sentimientos de rechazo que concita esta conducta guerrerista, bárbara e inhumana?, la animadversión que están generando mundialmente contra su propio pueblo. Millones de personas participan en manifestaciones contra el genocidio, cientos de intelectuales, igualmente lo rechazan y lo dan a conocer por sus escritos y artículos, la prensa mundial en grandes titulares revela las barbaridades cometidas contra el pueblo palestino, es decir, que el rechazo es global. “ERRAR ES DE HUMANOS, PERDONAR ES DIVINO, RECTIFICAR ES DE SABIOS’’. Poeta Alexander Pope.