En Ucrania y Gaza, Estados Unidos mordió el leño. En ninguno de los dos lugares, Estados Unidos logró realizar sus objetivos.
Aun con la coalición militar de la OTAN a su favor y los aliados de otras latitudes, con el agregado de más de 100 mil millones de dólares, gastados en Ucrania en armas de todo tipo, calibre y alcance; más el sistema starlink con más de 100 satélites espías a su favor. Agregando a esto, la increíble cantidad de sanciones y el bloqueo al gas, al petróleo, los diamantes, el trigo, el abono, la madera y al tráfico aéreo, etc.
Desde el 2014, hasta inicios de 2024; es decir, en una década de guerra contra Rusia, pasaron los presidentes Obama, Trump y Biden y frente a un nuevo período electoral; Estados Unidos no ha visto ni una.
Estados Unidos y la OTAN, perdieron Crimea, Jersón, Zaporiyia, Donetsk y Luganks; casi medio millón de uniformados en bajas humanas y decenas de miles de armas destruidas en el molino de metales ruso. Ahora, declaran que la ayuda económica y militar para Ucrania, está suspendida.
En este momento, a 100 días de destrucción y genocidio de los habitantes de Gaza; los guerrilleros de Hamás con el apoyo de Hezbolá y la solidaridad de los Huthíes de Yemen, vuelven a controlar el 50% de la zona norte de Gaza, incursionaron una colonia ocupada por israelíes y continúan constantemente provocando bajas al ejército de ocupación, destruyendo tanques.
Los medios sionistas publicaron la cifra oficial de 4,000 soldados discapacitados y más de 500 bajas mortales. Y de la migración interna de casi 200 mil colonos, con el agravante de ser acusados en la CPI por genocidas y crímenes de guerra en Gaza. Acusación sostenida por Sud África.
Como puede observarse, los objetivos de derrotar y destruir a Hamás y recuperar los rehenes, con todo el apoyo y ayuda militar norteamericana, fue imposible.
Más parece que para ocultar las derrotas, hacen el gran escándalo de la agresión anglo-norteamericana a Yemen y las visitas diplomáticas del primer ministro inglés a Kiev para firmar cartas de apoyo recíproco.
El mundo ahora mira, que los países agredidos, han sido capaces de llevar el dolor de sus mártires en su corazón y la dignidad por su patria en la frente y en el arma para defender ambas.
También, todo el planeta no pierde de vista que, Washington, Israel, Ucrania, Reino Unido y toda la OTAN van caminando ya, en el agujero de la derrota.