En la historia de Guatemala, el gobierno de Juan José Arévalo entre 1945 y 1951 fue un período trascendental, primer presidente electo democráticamente, Arévalo implementó reformas políticas, económicas y sociales transformando radicalmente la nación. Llevó a cabo una amplia reforma agraria, redistribuir la tierra y mejorar condiciones de vida de los campesinos. Se crearon el Banco Central y el Seguro Social destinados a promover desarrollo económico y mejorar la calidad de vida de la población, dichas medidas generaron tensiones con los sectores derechistas guatemaltecos y empresas extranjeras bajo influencia estadounidense, hubo conflictos y protestas del capitalismo voraz de Washington and Company, intensificadas por los medios de comunicación, los metiches pitiyankys profundizaron pronunciamientos contra las medidas de Arévalo a favor de la población más necesitada.
Electo en los primeros comicios verdaderamente democráticos en 1945, Arévalo padre, intelectual y escritor accedió al poder gracias al voto popular, en la misma década en Venezuela desde la presidencia el también escritor Rómulo Gallegos destacaba medidas al colectivo de menores recursos, el presidente fue derrocado y no tuvo miedo de indicar años más tarde que, fue la embajada estadounidense en Caracas la responsable de su salida. En Guatemala al finalizar la presidencia Arévalo padre, se inició una serie de dictaduras pitiyankys, mientras tanto en Venezuela, el General Marcos Pérez Jiménez producto de golpe de estado, era arropado por los yankys y su política bastarda. Vayan viendo la repetición de la sociedad estadounidense dominando a los pueblos al sur del río grande, implicándose sin respeto alguno a la democracia, en convenientes golpes de estado.
Uno de los aspectos más destacados del gobierno de Arévalo padre, fue su enfoque de reformas en la educación y la cultura, democratizando el acceso popular a los planteles en general y a las universidades y al desarrollo intelectual de la población, pecados políticos inaceptables para los gringos en su afán de avasallar pueblos regidos por lacayos a su servicio, Arévalo padre solo estaba sintiéndose independiente de gringolandia, ejerciendo de manera soberana su gobierno, sin embargo, las disposiciones le parecieron comunistas a los gringos.
La historia de Guatemala nos cuenta de un pueblo heredero de la hermosa e inteligente civilización maya, los conquistadores españoles llegaron en 1523, Nicolle Valle nombró a ciudad de Guatemala en carta dirigida al monarca Carlos V, fechada en México 15 de octubre 1524. Hernán Cortés se refiere desde su conquistado México a ciudades pasando a formar la Capitanía General de Guatemala adscrita al Virreinato de la Nueva España. Los criollos guatemaltecos lograron su independencia del imperio español y tras la separación de México se iniciaron guerras entre criollos conservadores de mayor abolengo habitantes de la capital con amplia influencia de la iglesia católica, enfrentados a liberales criollos de menor categoría dedicados a la agricultura, residiendo en el resto de la nación.
La lucha de la desintegración dio pie al surgimiento de las cinco repúblicas de Centro América hoy conocidas, aquella división para reinar sembrada por españoles conquistadores y sacerdotes, es seguida por imperialistas estadounidenses empleando a quienes llamaba Mario Briceño Iragorry en Venezuela, "blancos de orilla". En estas ácidas les decimos jaladulantes de pacotilla siglo XXI perdidos cual niño extraviado de sus padres durante procesiones de semana santa o actos similares: religiosos, políticos o de reclamo a gobernantes, en busca de reivindicaciones sociales prometidas e incumplidas.
En la actualidad veo a la CEV ensotanada pronunciándose sobre "elecciones limpias y transparentes", comunicados de esa Conferencia Episcopal Venezolana, no existentes cuando estaban conspirando contra Chávez y Maduro, les diré una y muchas más veces CEV -Comunidad Engañosa Venenosa-, mínima pero peligrosa, alejada de su DIOS. El periodista Eligio Rojas afirma por cierto en otro aspecto de enero 2024 que, "en el plano interno de cada gobernante derechista, en particular si son fuerzas retrógradas, el derecho a desconocer el Estado de Derecho, sigue siendo promocionado como legal", a quienes así actúan, dirigentes malvivientes salvajes afiliados al dominio de EEUU tradicional amenazante homicida, bombardeador a distancia y en mi parecer antipatriota, les escuece que, patrióticamente en serio nuestra Venezuela no tenga cobardía, nos sobra hidalguía legada de nuestros libertadores.
Ya en el poder en Guatemala, Bernardo Arévalo, tiene el deber de cumplirle a los sectores populares, ojalá no haga lo de su tocayo aquel personaje de la serie estadounidense de TV "El Zorro", al menos aquel sabía el lenguaje de señas, ¿este Bernardo podrá dar señales ciertas de merecer ser hijo e´papá?, no vaya a imitar a otros presidentes latinoamericanos, quienes una vez en el solio los invitan a Washington y pasmados con los jefes de estado domeñantes gringos, regresan a sus respectivas naciones a entregarse decididos y cobardes a la gringolandia bastarda, homicida, actuante siempre como hoy en Palestina, arrasando a la tierra de nacimiento de Jesucristo.
Estaremos en observación permanentemente ácida, déjelos a un lado si se le presentan aquellos adulantes, no solo del pitiyankysmo sino de las orientaciones negadas por el capitalismo, decídase Bernardo y emule a su padre el de la era presidencial 1945-1951, entréguese a informar lo que hizo aquel personaje guatemalteco, es decir su señor padre, en beneficio de los más necesitados, sin quitarle a los ricos sino más bien solicitando su ayuda legal, cancelar los lógicos impuestos, para evitar ser arrastrados al vasallaje gringo, ineficaz, hoy peleándose entre presidentes cada vez peores desde el imperialismo norteño despreciable.