Las Naciones Unidas, es una organización internacional fundada en 1945 tras terminada la Segunda Guerra Mundial, por 51 países, que se comprometieron a mantener la paz y la seguridad internacional, fomentar entre las naciones relaciones de amistad y promover el progreso social, la mejora del nivel de vida y los Derechos Humanos. Hoy cuenta con 193 países miembros. Los objetivos centrales de la Organización son principalmente mantener la paz y la seguridad internacional, centralizar y armonizar los esfuerzos de las naciones para alcanzar sus intereses comunes y fomentar las relaciones pacíficas entre los Estados. Después de 79 años de fundada que tiene la O.N.U, no hemos visto paz, ni seguridad internacional, ni relaciones de amistad, ha privado el criterio de la política exterior de los gobiernos estadounidense, no tenemos amigos solo tenemos intereses.
En estos momentos no se cumplen los objetivos que justifican la creación de la O.N.U: Mantener la paz y la seguridad internacional. Proteger a los derechos humanos. Distribuir ayuda humanitaria. Apoyar el desarrollo sostenible y la acción climática. Debido a las competencias que le asigna la Carta fundacional, la Organización puede adoptar decisiones sobre un amplio espectro de temas y ser el escenario de negociación de sus 193 Estados Miembros, a través de la Asamblea General, el Consejo de Seguridad, el Consejo Económico y Social, entre otros órganos y comisiones. Los objetivos de la O.N.U no se encuentran presente en la agresión criminal de Israel en contra del pueblo Palestino, tampoco lo vemos en la guerra que se desarrolla en territorio Ucraniano, donde el reino Unido, la Casa Blanca, Canadá y la OTAN, tienen interés de desestabilizar el estado Ruso.
El mundo “ha entrado en la era del caos”, incluso lo reconoce el propio secretario general de la O.N.U. Amenazas de crisis climática, inteligencia artificial sin regulación, instituciones internacionales no representativas y unas desigualdades cada vez más agudas, representan un peligro para el mundo. El mundo “está entrando en la era del caos”, alertó el secretario general de la ONU, António Guterres, al presentar ante la asamblea General sus prioridades de trabajo para 2024. Antonio Guterres describió el mundo actual como “una peligrosa e impredecible ley de la selva (donde reina) la total impunidad”, con amenazas como una crisis climática desbocada, una inteligencia artificial sin regulación, unas instituciones internacionales no representativas y unas desigualdad es cada vez más aguda.
El político portugués, que lleva más de su octavo año al frente de la organización, siempre ha estado al servicio de la Casa Blanca, aun no reconoce sus responsabilidad de la crisis que vive el mundo. Es Publico Notorio y Comunicacional que en la trama por el Esequibo se colocó al servicio del reino Unido y de EE.UU, y en contra de Venezuela. No creo que la crisis de la O.N.U, se resuelva con reformas como las que están proponiendo: la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, “que nunca estuvo tan mal” por sus divisiones, y la de las instituciones financieras internacionales, cuyo diseño es “anticuado, disfuncional e injusto”, además de que “favorece a los países ricos que lo diseñaron”. La realidad no está para reformas, la O.N.U, debe ser sustituida por una nueva organización que evite la guerra, que trabaje por la paz para todos y que se respeten las reglas que se acuerden.
Los conflictos armados en el mundo tienen “atrapados a millones de personas para las que la vida es un infierno diario y mortal”, ya sea para los que mueren como para los que huyen de la violencia. Donde deciden muy pocos estados: E.E.UU, Reino Unido, Israel y Canadá, con la complicidad de la Unión Europea.