A nadie que viene a este mundo se le consulta si desea nacer, evidentemente esto es imposible. De igual forma, no todos los vivientes podrán estar contentos de ser parte de lo que actualmente está pasando. Todo nacimiento es responsabilidad de dos personas, por lo que son estos los culpables de haber traído a luz a un ser que emergerá en un ambiente con un padre, una madre y unos hermanos, en caso de no ser el primogénito. Sin embargo, el recién nacido, una vez que crece, no está obligado a querer a su madre, o a su padre y a sus hermanos. No es cierto, no es verdad verdadera que todos los padres son buenos y todos los hermanos deben resultar agradables. Hay papás borrachos, irresponsables, amargados es decir con defectos y vicios que un hijo no está obligado a soportar. De igual manera ocurre con la madre, esta puede ser insensata, mentirosa, floja, con las licencias propias de un ser vivo. De manera similar podrá suceder con el o los hermanos que constituyen el hogar. Un niño que se forme dentro de una familia que no sea de su agrado puede generar una conducta que podría ser cuestionada por el entorno que lo rodea y peor aún, el niño que va a la escuela, no necesariamente sus compañeros de estudio y sus profesores puede ser de su complacencia. Al final, el futuro adolescente y adulto se le ha moldeado un carácter cuestionable para las personas que están a su entorno. La pregunta que se debe formular es ¿de quién es la culpa que el joven tenga un comportamiento cuestionable? La respuesta es inmediata, los padres que lo trajeron al mundo en un entorno desagradable donde se desarrolló el niño. Esto convirtió al joven en un individuo con sentimientos de resignación que derivó en una persona con un carácter extraño.
Por lo general cuando sucede algo desagradable, el o la afectada trata de buscar la persona o situación que causó tal estado de ánimo. Esta podría ser de su responsabilidad por no tomar las precauciones necesarias, también podrá ser culpa de terceros, así mismo de la inexorable madre naturaleza o también de decisiones erradas de uno o varios gobernantes.
A manera de ejemplo, si una persona es obesa, no quepa duda que sufrirá de los males propios del sobrepeso como diabetes, problemas cardíacos, de la tensión entre otros. En este caso la culpa de tales trastornos la tiene la persona que fue aumentando lentamente de talla, dado que nadie amanece con 10 kg de un día para otro. Es decir, la culpa de este trastorno la tuvo la o el sujeto que no tomó las previsiones necesarias en su manera de comer en la medida que la cintura y la talla aumentaba, de igual modo, la ropa no le servía. Para esto sirven los espejos.
En el caso de un obrero que trabaje para una empresa y el patrón no cumpla con lo contemplado en la Ley de Trabajo y las condiciones laborales hayan desmejorado, la culpa será del dueño de la empresa. En este caso el afectado acudirá a los órganos competentes para resarcir el o los daños causados por la inobservancia del contrato o de la ley. En caso de que esto ocurra, si el afectado cumplió con los pasos pautados y el ministerio no cumplió, la culpa será del organismo nacional que no obligó al patrón a subsanar el perjuicio. Como se ve, en oportunidades una culpa desencadena una cadena de culpas de terceros.
El caso que no tiene discusión son el de los desastres naturales, muchas son la personas que perecen durante una terremoto, un huracán, una vaguada, un alud, un tsunami, entre tantas catástrofes, al igual que miles de personas pierden sus casas y enseres en un fenómeno que es imposible predecir. En tales situaciones la culpa es de la madre natura en un proceso de reacomodo que no son posibles de presagiar.
En la actualidad los habitantes del planeta viven situaciones muy peligrosas que para muchas personas son inentendibles dado que los medios de comunicación mercenarios se dedican a confundir los hechos. Hay dos situaciones peligrosas que están poniendo en peligro la existencia del globo terráqueo producto de las actuaciones violentas que amenazan a gran escala la vida en el planeta, cuyas responsabilidades tienen nombre y apellido. Se trata de la guerra de Ucrania, EEUU, la UE y la OTAN contra la federación Rusa y el genocidio del pueblo palestino, mediante los bombardeos continuos contra la franja de Gaza y contra la zona de refugiados de Rafah. La pregunta inmediata es ¿quién tiene la culpa de tales barbaries?
Comencemos por lo segundo. A raíz de finalizada la Primera Guerra Mundial (1918) las potencias occidentales ganadores de la guerra decidieron dividir la zona del Medio Oriente que estuvo bajo el dominio del derrotado Imperio Otomano. Por medio de un tratado secreto conocido como "Sykes-Picot" por el nombre de los funcionarios que lo negociaron (Mark Sykes y François Georges-Pikot, 1916), Francia y Gran Bretaña se dividieron sus áreas de influencia con el objetivo de ocupar lugares geoestratégicos y los puertos, fundamentales para el comercio mundial. En esta repartición Palestina, Transjordania (actualmente Reino de Jordania) y las provincias de Mosul, Bagdad y Basora (Irak) corresponderían a Gran Bretaña, mientras el Canal de Suez seguiría bajo su control. Siria y Líbano fueron adjudicadas a Francia, en en tanto Egipto se convirtió en un estado independiente. Como se lee en esta repartición no aparecía Israel en el tratado, puesto que no existía.
A partir de 1916 sucedieron muchas situaciones que no voy a describir, sin embargo surgen los grupos sionistas que esperaban ocupar un territorio para fundar un país. Antes de finalizar la Segunda Guerra Mundial los judíos europeos askenazis, quienes huían de las persecuciones de los nazis se dirigieron hacia Palestina con la aquiescencia del gobierno de la UK y poco a poco fueron ocupando (usurpando) territorios que pertenecían a los palestinos.
Durante varios años se desató una lucha entre judíos, árabes e ingleses, incluyendo ataques terroristas de los sionistas contra propiedades inglesas y palestinas. En este conflicto murieron miles de árabes y unos cientos de ingleses. Hasta que el gobierno británico cansado de estas disputas abandonaron Palestina y fue entonces cuando en el 1948, la ONU en complicidad con EUU, Francia y la UK les entregó a los sionistas una parte de las tierras de los palestinos, con la condición de la creación de dos estados, el de Israel y el de Palestina. El primero se creó con éxito, el segundo, el estado Palestino nunca se formó. Aquí comenzó todo. Sin ahondar más en el conflicto Israel-Palestino, ya sabemos quiénes son los culpables del genocidio que se está cometiendo en la franja de Gaza y en la zona de refugiados de Rafah. La ONU en complicidad con EEUU, Francia y UK son los culpables de este conflicto y estos deberán resolverlo antes que el carnicero de Gaza decida exterminar del mapa al pueblo palestino.
El conflicto de Ucrania, EEUU, la UE y la OTAN contra la Federación Rusa en sencillamente un problema de dinero y para esto, los gobernantes de los primeros encontraron un títere en Kiev, el comediante Zelennsky para llevar los planes siniestros de las empresas gasíferas de EEUU. La primera parte del plan contempló el saboteo del gasoducto de Nord Stream que llevaba gas desde los campos de Rusia a Europa a bajo costo. La segunda parte del plan fueron los bombardeos, por parte del gobierno de Ucrania, contra Dombas y Donetsk, zonas rusos parlantes. Esto obligó a Rusia a defender a sus connacionales y tercero la aplicación de sanciones por parte de EEUU y la UE mediante el cual prohibía la exportación de productos rusos hacia Europa, incluyendo gas y petróleo. Estos dos últimos podrían ser sustituidos por los exportados desde EEUU a un precio mayor al que ofrecían las empresas rusas. Este es el origen del conflicto y por esto Ucrania, EEUU, la UE y la OTAN le declararon la guerra a la Federación Rusa. Ahora el lector podrá inferir quienes son los responsables del conflicto que actualmente vive Europa. La sed de dinero de las empresas petroleras y gasíferas de EEUU está llevando al mundo en conflicto que podrá desencadenar una guerra nuclear, ya que la Tercera Guerra Mundial está en marcha. Por fortuna será la última.
Hay mucha hipocresía de parte de algunos líderes del mundo occidental quienes se niegan aceptar la culpa del genocidio que actualmente acontece en la franja de Gaza y Rafah, además de los delitos de lesa humanidad que cometen las tropas nazis ucranianas. Zelenssky y Netanyahu son responsables de crímenes de guerra y deben ser condenados, basta de hipocresía. Bien lo expresó Francisco de Quevedo el escritor español: "La hipocresía exterior, siendo pecado en lo moral, es una gran virtud política". Lee que algo queda.