A los gobiernos del planeta, les importa más el humo que le irritó la piel a un casco azul, que las balas en las cabecitas y corazoncitos de miles de niños de Gaza asesinados por franco tiradores del ejército israelí.
Los medios occidentales han sido, los heroicos voceros de las declaraciones de protesta de los escandalizados gobiernos de todo el planeta, por el humo que el ejército de ocupación israelí les tiró a los cascos azules de la ONU y por el superlativo mandato israelí a que la ONU se retire de El Líbano.
Eso sucede, en el mismo momento que la aviación sionista israelí, destruye a bombazos el sur de El Líbano y extensas zonas populosas de Beirut, al mismo tiempo que continua la destrucción y genocidio infantil en Gaza y en tanto que el periódico NYT, hacía públicas las denuncias y radiografías presentadas por médicos que trabajaron en Gaza durante las masacres, donde mostraban las balas alojadas en las cabecitas, el cuello y corazoncitos de niños gazatíes, asesinados por franco tiradores del mismo ejército sionista israelí, que asustó a los de la ONU.
Pese a que los gobiernos están sabedores de los horrendos crímenes del ejército israelí contra palestinos y libaneses; los gobiernos están extremadamente más perturbados por el susto provocado a los cascos azules, que por el exterminio de árabes islamistas.
Pero, eso no es de extrañar, pues, las dualidades cartesianas de los gobiernos, de sonrojarse cuando se les mira públicamente la ropa interior, es la forma común de actuación de todos. Pues, ya cuando se agota la coreografía diplomática, se revela que, la filosofía y el Derecho Internacional de la Declaración de las Naciones Unidas ha sido sustituida y en su lugar, se ha trasladado la concepción de democracia y del mundo regido por reglas, que sostiene la política internacional de Estados Unidos, respaldado por Occidente.
Debe quedar claro que Estados Unidos, Israel y la Otan, operativamente ejecutan el plan de exterminio, ocupación y ampliación de la guerra en Oriente Medio y si asustan a la fuerzas de paz de la ONU- FINUL; cuando son ellos los que manipulan la ONU, lo que quieren justificar con esa acción es, el desalojo del FINUL porque su programa pacificador ya perdió vigencia y que, en vez de estar haciendo nada, es mejor que se vayan y desalojen el local, no solamente porque son ellos los que deciden el papel de los organismos de la Organización, sino porque necesitan dichas bases militares en el combate a Hezbolá.
Así de desvergonzados y arrogantes son los imperialistas; pero, aparte del poder que Hollywood le crea al ejército de ocupación y contar con poderosas fuerzas aéreas mata niños y civiles; en el enfrentamiento a distancia cero, en el terreno de combate, no pueden contra los muyahidines. Allí en el terreno están teniendo muchas bajas contra el ejército de Nasralá.
Más bien, con desalojar al FINUL, están buscando protección en la base militar montada por la ONU y su Consejo de Seguridad.
Y más aún, escandalizarse por el humo y la irritación de la piel de un casco azul y callar la matanza y destrucción, significa que van usar el motivo de salvar las vidas de los del FINUL, como una forma de encubrir, la entrega de las bases militares y las posiciones geográficas favorables, al ejército de ocupación; dicho de otra forma, quieren esconder de una manera miserable la colaboración con el ejército de ocupación en el combate contra Hezbolá.
Estos gringos son tan siniestros, que no sería extraño ver en el FINUL, el relevo de militares europeos por soldados norteamericanos, mejor equipados. Y allí, no ha pasado nada.
Pues, los imperialistas se pasan la Asamblea General, el Consejo de Seguridad y su filosofía política: La Carta de las Naciones Unidas, por la parte más graciosa del cuerpo humano que queda en el lado de atrás.