El 5 de noviembre 2024, se llevan a cabo, las elecciones presidenciales en EEUU. Los dos candidatos son: la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump. Sus propuestas y características más nefastas son:
El libre comercio: Es una política comercial que permita la libre circulación de bienes y servicios, entre países, con una mínima intervención de los gobiernos. Los precios son determinados por el (Dios) mercado en función de la oferta y la demanda. En este sistema, no hay normas laborales explícitas y depende de las fuerzas del mercado. A su vez, no existen normas ambientales explícitas. Los socios comerciales, están abierto a todos los países, independientemente de sus antecedentes laborales y ambientales. Se enfocan en, maximizar la eficiencia económica y el crecimiento. Esta política comercial, puede dar lugar a precios más bajos, pero también puede dar lugar a la explotación de los trabajadores y a daños al medio ambiente.
Ahora, ¿cuáles son las desventajas en términos generales del libre comercio, propiciado por ambos candidatos a la presidencia de EEUU?
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La pérdida de empleos.
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La desigualdad de ingresos.
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La degradación ambiental.
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La uniformidad cultural.
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La dependencia de los mercados extranjeros.
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La pérdida del control sobre la economía.
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Los desequilibrios de poder entre los paises.
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La explotación de los trabajadores.
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El libre comercio, puede tener consecuencias no deseadas como: un aumento de la pobreza o un déficit comercial cada vez mayor en los paises menos desarrollados.
El énfasis en Trump, al proponer el libre comercio, es que desean aumentar siempre los aranceles; es decir, los impuestos, que se aplican a los bienes que se importan o exportan de un territorio; el más usual es el que se cobra sobre las importaciones. También se les conoce como derechos de aduana.
Por otro lado, Harris es judeo masona, jugando un papel protagonista en situaciones de influencia, alianza y/o subordinación. Su esposo (Douglas Emhoff) es judío, y ella está ligada al grupo Bilderberg, que reúne a la élite del mundo de la política y las finanzas y donde la mayoría son masones.
Trump, igualmente pertenece a la elite, aunque está vetado.
En otro orden de cosas, tanto Trump como Harris, en un triunfo de cualquiera de los dos, apoyaran las industrias bancarias, de la salud, automovilísticas, energética, y la industria del comercio minorista en EEUU.
Por otra parte, en el tema del racismo, ambos ven a América Latina como su patio trasero, creyéndose dueños de los recursos naturales de los paises, y ven a los latinos/as como sus esclavos. En este sentido, en un eventual gobierno de ambos, los latinos tienen todo que perder. Por ejemplo, para Harris, popularmente ve a los latinos/as como esclavos necesarios y los tolera mientras sean sus bestias de carga, por su parte Trump, con su fuerte carga nazista, considera a los latinos/as como ladrones, pervertidos, gente fea y mala, drogadictos, violadores, basura.
Al mismo tiempo, ambos apoyan y respaldan al presidente Benjamin Netanyahu, quien gobierna a Israel. Cuyo sistema de gobierno no es una democracia, sino una plutocracia, que es una forma de gobierno, donde el poder está en manos de los más ricos de la sociedad israelí. De allí que el termino plutocracia viene del griego "ploutos", que significa riqueza, y "kratos" que denota poder.
En una plutocracia las decisiones políticas, económicas y militares, entre otras, son influenciadas o controladas por una minoría adinerada.
En este sentido, mientras que, en España, Alemania, Cuba y en otros paises, el Banco Nacional pertenece al Estado, en EEUU, la máxima reserva nacional de dinero, que vendría a ser el Banco Nacional de cualquier país, es privado y está en manos de adineradas familias judías, como las Rockefeller, Morgan, Lehman Brothers, Rothschild. Es decir, mandan los de siempre, un grupo de familias judías en la sombra, los dueños de la Reserva Federal.
En el apoyo de ambos candidatos a Israel, según el internacionalista de la Universidad de Palermo, Martín Falco, "Israel, por ejemplo, que tal vez sea el asunto internacional más espinoso de esta campaña. Washington y Tel Aviv tienen una alianza de décadas y ningún candidato a presidente puede sugerir que no mantendrá esa sociedad, incluso si Israel está llevando adelante una operación militar cada vez más extendida y con un número muy alto de bajas civiles. El dinero del lobby israelí es crucial para financiar las contiendas electorales, y casi ningún político que quiera mantenerse en el Congreso puede permitirse prescindir de él".
A la vez, con respecto a la relación con América Latina, ambos candidatos han mostrado también más similitudes que diferencias, principalmente al enfocar tanto Trump como Harris la relación, por ejemplo, con México, con el eje puesto en la inmigración ilegal. "Cuando fue precandidata en el 2019 y al comienzo de su gestión como vice, Harris tenía un discurso más empático con los migrantes", considera Falco. "Ahora viendo que el discurso de Trump sobre los ilegales ha calado, y en vista del aumento récord de cruces en la frontera con México en los primeros tres años del gobierno de Biden, Harris ha cambiado su discurso, que ya no se diferencia mucho de la retórica del propio Trump", concluye el experto.
También podemos afirmar que Harris y Trump, han utilizado una especie de populismo de derecha, al dirigirse a las masas norteamericanas.
John Catalinotto, periodista estadounidense, comunista, antiimperialista y antirracista, también señala que: "Tanto los demócratas como los republicanos representan a las grandes empresas, al militarismo y al imperialismo".
Concluyendo, podemos aseverar con el escritor Héctor Miolán: "No hay que ser tan radical para rechazar ambas propuestas políticas, tanto las de demócratas, como las de los republicanos, solo hay que tener un mínimo de conciencia histórica para colocarse al margen de ambas. Únicamente los diferencian leves o ligeras diferencias tácticas, pero jamás estratégicas".
En fin, como se dijera en algunos paises de America Latina, tanto Trump como Harris, "son caimanes, cocodrilos del mismo charco". ¡Bestias del capitalismo imperial!
5 de noviembre, 2024