El primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, confirmó este miércoles que asistirá a la reunión del jueves en San Vicente y las Granadinas, donde el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y su homólogo de Guyana, Irfaan Ali, discutirán cuestiones relacionadas con la disputa fronteriza del Esequibo.
La Oficina del Primer Ministro trinitaria anunció en un comunicado que el primer ministro "asistirá a la reunión en San Vicente y las Granadinas prevista para el jueves 14 de diciembre de 2023 entre los presidentes de la República Cooperativa de Guyana y la República Bolivariana de Venezuela en Asuntos relacionados con la disputa fronteriza entre ambos países."
El comunicado de prensa señala que la reunión del jueves "surgió de las discusiones en curso y de una decisión tomada en una reunión virtual de emergencia de Caricom celebrada el viernes pasado".
Los presidentes venezolano y guyanés aceptaron la semana pasada una invitación del primer ministro de ese país, Ralph Gonsalves, para reunirse en San Vicente.
Gonsalves declaró el fin de semana que había estado trabajando en la reunión durante algún tiempo, mientras que su oficina también compartió el sábado pasado una carta que envió a Ali y Maduro ofreciéndose a facilitar las discusiones.
En su carta a Ali y Maduro confirmando su aceptación de la invitación, Gonsalves había llamado a ambos líderes a "buscar la sabiduría de Salomón" y las virtudes de otros profetas antiguos.
El expresidente de Caricom y actual presidente de la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) también recordó a ambos líderes que estaban comprometidos a mantener el Caribe como una zona de paz.
La carta de Gonsalves afirmaba que los dirigentes de la Celac y Caricom "han evaluado, en interés de todos los interesados, incluidas nuestras civilizaciones caribeña y latinoamericana, la urgente necesidad de reducir la intensidad del conflicto e instituir Un diálogo apropiado, cara a cara, entre los presidentes de Guyana y Venezuela".
"Ambos habéis coincidido con esta valoración en la búsqueda de la convivencia pacífica, la aplicación y el respeto del derecho internacional y la evitación del uso o amenaza de la fuerza", había afirmado Gonsalves.
La carta señalaba que ambas partes solicitaron la asistencia del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, pero él no asistirá, pero si un representante.