La denuncia fue realizada mediante un comunicado, la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (Unrwa), en el cual además se denuncia los continuos ataques de Tel Aviv han causado miles de muertes de civiles, desplazamientos forzados y destrucción de infraestructuras y edificios residenciales.
El texto afirma que nueve de cada 10 gazatíes, alrededor de 1,9 millones de personas, han tenido que desplazarse internamente, muchos en reiteradas ocasiones, mientras otros más de 10 veces.
Ante esa situación, le es muy difícil a los grupos de trabajo humanitarios y a los técnicos brindar ayuda a la población con recursos indispensables como agua, saneamiento, alojamiento y salud.
En el enclave todas las reservas de cloro para purificar el agua y hacer potable la poca disponible ya se agotaron, mientras el sistema de salud también está colapsado.
En ese sentido, la Organización Mundial y el Grupo Mundial de la Salud dieron a conocer que 90 centros de salud están fuera de servicio.
Ante la escasez de hospitales y los constantes ataques y agresiones de Israel, la Unrwa proporciona servicios de emergencia en 10 centros de asistencia y hasta 100 puntos médicos móviles en toda la Franja de Gaza.
El comunicado también citó datos del Centro de Satélites de las Naciones Unidas, el cual muestra que el “63 por ciento de los edificios en la ciudad de Gaza fueron evaluados en un nivel de destrucción total, grave o moderado”.
Desde el 7 de octubre pasado la agresión israelí ha asesinado a más de 39,790 personas y más de 92,002 han resultado heridos.