El presidente de Colombia, Gustavo Petro, dirigió este miércoles un mensaje a la población en el que hizo un breve comentario sobre el paro de camioneros, tachándolo de "empresarial" y asegurando que "tiene oscuros intereses económicos o políticos".
Este 4 de septiembre, los transportistas colombianos entraron en su tercer día de protestas y bloqueos de autopistas en Bogotá y otras ciudades del país, como respuesta al incremento en el precio del combustible por parte del Gobierno.
"Aunque se presumiera por obvias razones que voy a hablar del paro camionero, no voy a hablar de él, sino de algo que me parece todavía más preocupante. Sobre este primer punto solo mencionaré —ya tendré oportunidad de hablar a profundidad mañana o pasado— que sabemos distinguir perfectamente qué es un paro empresarial, que en inglés se llama lock-out", sostuvo Petro.
"Siempre tienen oscuros intereses económicos o políticos", aseveró el mandatario, que diferenció esas acciones de las de "un movimiento social, como ocurrió con el estallido en el Gobierno pasado". "El movimiento social siempre tiene reivindicaciones justas", manifestó.
Pegasus
Petro dedicó la mayor parte de su alocución al programa informático israelí Pegasus, denunciando la compra de ese software para espionaje ilegal por parte del Gobierno de Iván Duque (2018-2022).
Petro afirmó que la Dirección de Inteligencia Policial de Colombia (Dipol) "compró, en efectivo, por 11 millones de dólares, a una empresa israelí, un software para espiar celulares (Pegasus) en medio del estallido social (2021) y antes de las campañas" para las elecciones de ese año, que comenzaban en octubre.
De acuerdo con la información difundida por el presidente, obtenida por la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF), ese año un banco israelí detectó y reportó entre sus cuentas una actividad inusual por 5,5 millones de dólares.
Se trataba de una transacción entre la empresa NSO Group y la Dirección de Inteligencia Policial de Colombia para la compra de Pegasus, un software de espionaje cibernético, por un total de 11 millones de dólares que no habrían sido declarados.
Según dijo Petro, el pago se realizó en efectivo y el dinero fue transportado por vía aérea desde Bogotá hasta Tel Aviv.
"Un lavado de activos hecho desde nuestro propio Estado", precisó el mandatario.
Y añadió: "¿Cómo salen del país 11 millones de dólares en efectivo en un avión o en dos, desde oficinas estatales hacia Israel, para comprar un software que espía celulares, comunicaciones privadas?".
En razón de ello, el Ejecutivo pidió a la Fiscalía General de la Nación que realice una investigación sobre esa transacción.
Asimismo, el jefe de Estado dijo que tanto él como su familia fueron víctimas de interceptaciones ilegales durante los gobiernos de Álvaro Uribe (2002-2010) y Duque.