Es muy difícil para aquellos que estamos dedicados a promover el periodismo serio, plural, equilibrado, y sobre todo ajustado a la verdad y a la justicia, no darle repuesta a otro colega, sobre todo, que hace uso del periodismo para engañar, para satisfacer caprichos del mejor postor, y justamente para tratar de confundir a sus lectores, que desconocen la plena realidad de lo que se vive en Venezuela, precisamente por no recibir informaciones fidedignas, ajustadas a la verdad.
Esta vez nos vemos en la necesidad de sacar el "hacha de la guerra" en contra de esa otra colega del periodismo, nacida en España, llamada Marián de la Fuente.
Esta chica, que en su época de juventud derrochaba un cuerpo despampanante que la hacía ver como una auténtica Miss, con el transcurrir del tiempo se hizo acreedora en la sociedad española de reconocimientos, condecoraciones y numerosos premios de periodismo, pero hoy nos hace llenar de dudas que los haya ganado de manera limpia, como se ha querido hacer ver.
El tiempo pasa inexorablemente. Ya Marián no es la misma de antes. El cuerpo le ha cambiado, como normalmente ocurre cuando una mujer pasa de los 50. Desde luego el carácter también le cambia a las hermosas damas, sobre todo cuando debe enfrentar el proceso de la menopausia. Muchas veces se les ve irritable, desproporcionadas, sin ánimo de seguir la rutina, lo cual les incomoda y lo que es peor hace que se depriman, sin poder evitar que su entorno lo note.
En verdad no somos especialistas en estos temas, pero no sabemos si a la colega Marián, en estos momentos, todos esos cambios la están afectando.
Dejó en claro que "a las damas ni con el pétalo de una rosa", pero cualquiera de ellas se hace merecedora de una repuesta contundente, pues su condición de mujer no deberían darle el derecho para agredir, ofender, mentir, tergiversar, y sobre todo para engañar, en este caso, detrás de la profesión del periodismo, como lo hace esta periodista española.
Marián trabaja en una televisora de su país. Tiene un programa de opinión que se llama "El Espejo", desde donde hace un sinfín de comentarios, que en el caso del vídeo que acabamos de ver, no se ajusta a la realidad.
La Comunicadora en esta ocasión tomó como punto de discusión el tema de Venezuela. Comenzó esgrimiendo argumentos totalmente tergiversados en contra del presidente Nicolás Maduro. Le faltó solo mentarle la madre. Fue grotesca, incisiva y pedante.
Usó, en contra del Jefe de Estado, epítetos de baja calaña, desde dictador, hasta narcotraficante y de ladrón también lo trató.
Según Marián, el presidente venezolano es responsable directo de la quiebra de múltiples empresas en el país, del hambre que pasa la mayoría del pueblo venezolano, pero también de la inflación, del colapso de la economía, y pare de contar.
Le cuestiona que el gobierno use el oro que produce la nación para cubrir fallas y las deficiencias presupuestarias producto de las sanciones.
"Maduro es un engendro del diablo", dijo también en más o menos palabras.
Oírla profesar tanto odio sin duda nos produjo nauseas, pero sobre todo, desconcierto, a sabiendas que es una colega que se vende ante la comunidad internacional como la "pepa del queso" del periodismo.
No hay duda que Marián le miente a sus cientos de miles de seguidores. Por más que se maquille muy bien, claramente se le ven las arrugas ejerciendo un periodismo por demás cuestionado, poco creíble y desfasado.
Quizás Marian descienda de esos españoles que enarbolaron en el pasado histórico la bandera de la guerra contra nuestros libertadores. Por ello entendemos que después de 200 años de historia, aún se sienta frustrada.
Desde luego Marián no esboza, por ninguna parte, que las medidas coercitivas que se han impuesto a Venezuela, y han hecho que la crisis nos arrope, tiene otra lectura, y desde luego un culpable, que no es precisamente el presidente Maduro.
Evitó, en todo momento, referirse a la postura de la ONU que acaba de considerar violatorias de los DDHH, las sanciones y el bloqueo impuesto por el imperio a la patria de Bolívar.
Extrañamente tan preparada en el mundo del periodismo, no se explica que esta mercenaria de la Comunicación Social desconozca que la conducta criminal que ha asumido el imperio contra Venezuela ha generado ya más de 40 mil muertes en todo el país, con el apoyo también cómplice de España y el resto de Europa.
Marián al parecer desconoce también .y eso es grave en un periodista- que a Venezuela se le han confiscados sus cuentas bancarias, tanto en Estados Unidos, como en Europa, que le impiden cumplir compromisos internacionales con otras naciones.
En su resumen de verborrea barata, la periodista española también la enfiló contra Rusia y China, eso sí, tartamudeando, a sabiendas que son las dos potencias del mundo que próximamente harán poner de rodillas al gigante imperialista, que tanto daño le ha venido ocasionando al mundo.
Ni por el carajo Marián pudiera ver con buenos ojos que gracias a Rusia y China Venezuela no ha colapsado totalmente.
Igualmente ignora que 7 mil millones de dólares, que son de nuestro país, están represados en los bancos mafiosos de la Comunidad Económica Europea, entre otros miles más en EE.UU, que impide al gobierno legítimo del presidente Maduro poder comprar las vacunas para enfrentar la pandemia de la Covid-19, medicinas, alimentos y otros insumos necesarios, por ejemplo, para reactivar la industria petrolera.
Así pues que si Marián también desconoce en dónde queda Venezuela, la invitamos a que venga a indagar la propia realidad del país, pero sobre que dialogue con los coterráneos y les pregunté por qué siguen aun apoyando la revolución bolivariana, a pesar de la crisis que afecta al país.
Es evidente que la ultraderecha española, de la mano con la venezolana, le deben estar pagando a Marián para que hable las insensateces y las bagatelas que dijo en su programa de tv.
Conocer el monto de ese dinero, por demás mal habido, no dejaría de ser indignante, más si se trata para comprar la conciencia a una reportera que se ufana de tener una maleta repleta de premios.
A Marián le recordamos, al mismo tiempo, que nuestro país sigue invariable en el mismo lugar desde donde nuestro Libertador Simón Bolívar sacó a patadas a los españoles que pretendían seguir sometiendo al pueblo venezolano, como lo hicieron durante más de 300 años.
Por cierto, el vídeo de Marián fue montado en Instagram por ese otro lunático, que chilla cada vez que puede desde el imperio en contra de la revolución bolivariana, llamado Franklin Virgüez.
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