La suspensión de la red social X en Venezuela sigue vigente tras cumplirse el lapso de 10 días que dio el presidente, Nicolás Maduro, para que los directivos de esa empresa estadounidense —propiedad del magnate sudafricano Elon Musk— presentasen los documentos legales para formalizar sus actividades en ese país suramericano.
La medida anunciada por Maduro el pasado 8 de agosto iba a estar vigente hasta el pasado domingo, pero ante la decisión de los representantes de X de ignorar la solicitud del mandatario venezolano, las autoridades decidieron mantener el bloqueo de la red social hasta que la compañía norteamericana se presente legalmente en el país.
Sobre esta situación, el ministro de Comunicación de Venezuela, Freddy Ñáñez, comentó este martes en una entrevista al medio local La Iguana TV, que lo que ha pasado con la red social de Musk, es que ellos aún no han presentado su documentación para funcionar legalmente en Venezuela y de momento lo que pasará es que ese portal digital seguirá suspendido.
"¿Qué ha pasado? Todavía estamos esperando que ellos se hagan cargo", expresó Ñáñez, quien previamente explicó que "lo que corresponde es que esta empresa, así como lo hace en otros países, se presente y diga: 'esta es mi junta directiva, este es mi representante en Venezuela (...) y ese responsable acepta las leyes venezolanas y convive con las leyes venezolanas y hace uso legal de la plataforma", señaló.
Además, comentó que entre los compromisos que debe adquirir esa empresa, es sancionar las informaciones falsas y engañosas, los mensajes de odio, los llamados a la violencia, a la sedición, perfiles falsos, entre otros, que promueven actividades delictivas, entre ellos, los ciberataques.
"Venezuela puede vivir sin X"
Ñáñez agregó que tras la primera semana de la suspensión de X en Venezuela, la evaluación es que "el impacto social está claro", y es que "la gente puede vivir sin X", porque, además, históricamente ha sido una de las redes que presenta menor consumo y menor cantidad de usuarios, al tener activas 2,7 millones de cuentas; mientras que otras redes como TikTok, que va en ascenso y ya tiene 8 millones de perfiles; Instagram* con 7,9 millones; Facebook* con 22 millones; y Youtube con 30 millones de usuarios.
El ministro comentó que desde que Musk compró Twitter, la red ahora llamada X ha perdido "el prestigio" que logró su antecesora y ahora "viene en franca decadencia", sobre todo, porque funciona como "una especie de red de fantasmas digitales", donde la mayoría de cuentas activas y usuarios que interactúan con las cuentas son 'bots' o perfiles manejados por inteligencia artificial.
"Es un mundo distópico donde los bots escriben y leen (...) mientras la comunidad real de X es muy pequeña", explicó Ñáñez sobre la cuestionada red social, en donde su propietario ha difundido informaciones falsas sobre la situación política y electoral en Venezuela, e incluso ha hecho llamados que promueven el rompimiento del orden constitucional venezolano.
A pesar de estos mensajes y de la suspensión de la red social, el titular de Comunicación indicó que en su país "la gente está en la calle haciendo la vida porque hay una vida más allá de X (...) Venezuela puede vivir sin X, se los garantizo".
"Lo que yo creo que va a pasar en Venezuela es que van a empezar a entrar nuevas redes sociales", destacó el ministro, quien dijo que entre esas nuevas redes están las creadas en China y Rusia; así como también las propuestas que vienen creando en Venezuela una serie de "emprendedores" que también "plantean alternativas" para los usuarios del mundo digital.
Ñáñez también resaltó que en este momento, el país requiere de un amplio debate sobre el consumo de redes sociales y el impacto negativo que causa en la población la proliferación de mensajes que buscan adoctrinar a las personas en una sola línea de pensamiento, así como también las adicciones que generan y las limitaciones en el desarrollo intelectual de niños y adolescentes.
El lunes, el presidente Maduro reiteró sus acusaciones contra Musk, a quien ha señalado de estar detrás de la violencia postelectoral generada por el extremismo opositor de su país, respaldada por sus aliados internacionales, para generar "fascismo", "odio" e intentar propiciar un golpe de Estado en Venezuela.
*Perteneciente a Meta, calificada en Rusia como organización extremista, cuyas redes sociales están prohibidas en su territorio.
VIDEO Entrevista tomada de La Iguana.