Guaidó siempre ha sido una ilusión para algunos sectores contrarios al proceso revolucionario venezolano, es una esperanza quimérica, es un error del entendimiento que hace tomar las apariencias por realidades.
Eso de querer ser presidente sin haberlo elegido nadie y autoproclamarse, es un absurdo que solo está en la mente de algunas personas enfermas.
Capriles dice que no es líder de nada ni de nadie y que nunca ha ganado ningunas elecciones ni siquiera en un colegio. La oposición no tiene liderazgo continúa diciendo. Que el único líder con que cuenta la oposición es él y lo ha demostrado mediante el voto, cuando fue alcalde, cuando se ha lanzado dos veces a la presidencia, contra Chávez y Maduro.
Él se ha preparado para la presidencia de Venezuela continúa afirmando.
El que ejerce todas las funciones como presidente en Venezuela es Nicolás Maduro, electo democráticamente por el pueblo, hasta el pasaporte que tiene Guaidó lo autoriza Maduro, y eso lo decimos nosotros.
La Unión Europea y el grupo de Lima insisten en la locura de considerarlo presidente y no reconocer a Maduro ¨cada loco con su tema¨, como dice el refrán.
Ahora vemos al Reino Unido, aplicar una serie de sanciones a personalidades venezolanas, inmiscuyéndose en los asuntos internos del país.
Recordemos que el Reino Unido, tras su salida oficial en enero de la Unión Europea, estableció un nuevo mecanismo propio para castigar de forma autónoma la violación de los derechos humanos.
El prófugo terrorista venezolano Leopoldo López arriba a Colombia desde España para formar un comando de paramilitares, narcotraficantes y terroristas que contaría con el apoyo del ¨presidente¨ Duque.
Hemos recibido algunas críticas de revolucionarios y amigos, de que en el análisis que hicimos sobre el proceso electoral fue muy corto y faltaron enumerar muchas cosas más. Tienen razón, lo que pasa es que tratamos de ser lo más breve posible, porque los escritos largos no los lee mucha gente porque les da flojera.
Precisamente estos camaradas y amigos, me pasaron un análisis hecho Por Atilio Borón, sociólogo, politólogo, catedrático y escritor argentino, bastante completo se lo recomiendo.