"Durante la mayor parte de la historia, el hombre ha tenido que luchar contra la naturaleza para sobrevivir; en este siglo empieza a darse cuenta de que, para sobrevivir, debe protegerla".
Jacques Yves Cousteau
Hace más de ocho meses, ecologistas y luchadores sociales del Estado Lara, agrupados en el movimiento ecologista "Iniciativa Cotoperi"; denunciaron ante la AN, un voraz ecocidio que se viene practicando en el bosque xerofítico del semiárido larense, específicamente en las parroquias Castañeda (Atarigua), Espinoza de los Monteros (Arenales), Antonio Díaz (Curarigua), Trinidad Samuel (Carora), Chiquinquirá (Aregue), Reyes Vargas (Parapara) y Camacaro (Río Tocuyo); todas en el municipio Torres del estado Lara. Igualmente, en la parroquia Siquisique (Siquisique) del municipio Urdaneta; parroquia Bolívar (El Tocuyo) del municipio Morán y parroquia Águedo Felipe Alvarado (Bobare) del municipio Iribarren.
Según los denunciantes se viene promoviendo entre los Pobladores de estas localidades, una brutal deforestación, dónde se talan árboles de vera, curarí y cují con motosierras suministradas a crédito por empresas empaquetadoras de carbón vegetal.
Esta actividad, según los habitantes de la zona, implica que, los pobladores queman los trozos de madera en montículos cubiertos con tierra para producir carbón vegetal que finalmente es ensacado y trasladado a los depósitos de las empresas carboneras.
El 26 de febrero de este año 2024, un grupo de ciudadanos de la zona, introducen una carta dirigida al Diputado Ricardo Molina, quien se desempeña como presidente de la comisión de Eco-socialismo de la AN.
Según denuncian los pobladores, a fines del año pasado el artesano local recibía 200 $ por tonelada de carbón de vera que, al llegar a la Empresa de Comercio Exterior del estado Lara (EMCOEX), adquiría un valor de 1.300 $.
Tal como lo indican en la denuncia contentiva en el oficio entregado al diputado Molina, la deforestación del bosque seco, abarca incluso áreas del Parque Nacional "Cerro Saroche", afectando notablemente a la fauna silvestre, aumentado además, la temperatura del suelo; lo cual se traduce en evaporación de los acuíferos y salinización del suelo. De esta manera se genera un alto riesgo de desertificación de toda esta zona.
Según estos valientes patriotas y honorables ciudadanos, para producir una tonelada de carbón vegetal se requiere talar 5 toneladas de madera y se arrojan a la atmósfera 4 toneladas de dióxido de carbono.
Pese a la gravedad del caso, hasta ahora, los ciudadanos denunciantes, no han recibido respuesta alguna, de parte del diputado presidente de la comisión en cuestión, violando así, lo establecido en la constitución nacional (Articulo 51), en cuanto a la obligatoriedad de emitir respuesta oportuna en torno a los oficios o denuncias recibidas. Por si no lo recuerda, acá se lo apuntamos: "Toda persona tiene el derecho de representar o dirigir peticiones ante cualquier autoridad, funcionario público o funcionaria pública sobre los asuntos que sean de la competencia de éstos o éstas, y de obtener oportuna y adecuada respuesta. Quienes violen este derecho serán sancionados o sancionadas conforme a la ley, pudiendo ser destituidos o destituidas del cargo respectivo."
La invitación entonces, es a los diputados AN, a qué visiten la zona en cuestión, verifiquen la afectación que se denuncia e inicien la investigación correspondiente.
Sr. Diputado Molina, no de pie a que se siga pensando en lo perezoso e inútil que a veces resultan los organismos de Estado.