La incursión de los extranjeros ocurre muy cerca del cerro Delgado Chalbaud, en la jurisdicción del parque nacional Parima Tapirapecó.
De acuerdo con la denuncia de la mencionada organización no gubernamental, la invasión de los garmpeiros brasileños ocurre, supuestamente ,con la anuencia de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
La ONG detectó seis nuevas zonas de explotación ilegal de oro y otros minerales. Tres de ellos están en territorio de Venezuela, y el resto en Brasil.
Una imagen divulgada por SOS Orinoco, muestra un enfoque satelital de un comando de la GNB muy cerca de las zonas de explotación minera.
Informantes de la organización habrían asegurado que los funcionarios militares cobran «vacuna» para permitir la proliferación de las minas ilegales en en la zona.
Más de 360 mil metros cuadrados de tierra ya han sido destruidos, mientras que las organizaciones criminales explotan a los indígenas, hasta «casi esclavizarlos», aseguran los activistas.
Por otro lado, afirman que a cambio de que se les «permita» actuar en esos territorios ancestrales, los mineros ilegales ofrecen servicios de internet y otros insumos.
«Garimpeiros brasileños a cambio ofrecen antena satelital con WiFi, como hicieron en Parima B, medicinas, comida, enseres domésticos», detalló SOS Orinoco.