Papeles rotos, horas fecundas, un largo proceso de escritura, noches en vela consultando y leyendo, son efectivamente horas de rebeldía a favor del Estado y el presidente, como en contra. Son procesos que lo hemos dejado inclocusas. La rebeldía interna y tirana me ha obligado adentrarme diariamente en el proceso de reflexión y escritura.
Es difícil evaluar e identificar la falacia, donde se anida en las instituciones para dañar a un presidente de la república, y que lo hicieron con Carlos Andrés Pérez, Hugo Chávez Frías, ahora con Nicolás Maduro Moros. Todo, se deja entender por las estadísticas, que son como los bikinis, que se muestran sugestivos, pero, lo que esconden es lo esencial. Es la falacia, de que debemos medir del mismo modo, la política, la defensa, salud y lo fiscal en la vivienda, arte y cultura.
la ignorancia y el racismo, tanto de derecha como de izquierda sodomizada nos llevaron a un paradigma económico básico, y al campo humano, (humanismo), donde observamos un escenario de gobernabilidad fatuo, donde los venezolanos de todas las tendencias políticas exigieron desde tiempos atrás un cambio, una nueva manera de lograr nuestros objetivos, y posteriormente evaluar su desempeño.
necesitamos un verdadero líder, que motive, dirija y concerté a los venezolanos, con eficacia y escuche sus requerimientos. aquí no "queda el beneficio a la duda", sobre la conducción, eficacia y coordinación de la república.
nos encontramos en una contradicción de los principios organizacionales en la estructura del estado, una falta de creatividad, porque una gran parte del país se encuentra bajo el control de un ala militar, desconocedores de temas como el eléctrico, aguas, cuencas, acueductos, alimentos.
La sociedad civil esta profesionalmente capacitada para coadyuvar a que los ciudadanos y sus comunidades se desarrollen para generar satisfacción en el Estado de Bienestar a sus grupos familiares. Las políticas del Estado deben estar conectadas y visualizadas para lograr un autentico desarrollo cultural y de las artes en nuestra sociedad. Lo que nos obliga a visualizar políticas integradas, que nos lleven a un nivel consciente de costos sobre determinadas políticas, así como de los beneficios potenciales de las mismas.
Venezuela aviva su tiempo histórico, Se debe buscar un proyecto alternativo al bolivariano. El pueblo, que es la voluntad popular sufragó masivamente por un cambio político, más allá de un Nicolás Maduro eficaz, los funcionarios institucionales no cumplieron y los impuestos como la electricidad agotaron sus cuotas altas, ante los pésimos salarios y críticos beneficios sociales, un país en desconstrucción social.
Es la crisis de las teorías, hemos trabajado por décadas, y recibimos lo mismo ante los altos costos. Es un verdadero desafío construir un socialismo en un país tan pesimamente gobernado como el nuestro. Ya los países de izquierda en Latinoamérica están cambiando su rumbo e iniciando su recorrido hacía el verdadero proyecto del comandante Chávez. El criminal bloqueo norteamericano ha conspirado muy eficazmente contra nosotros, pero, sería un gravísimo error pensar que todos los problemas de la economía venezolana se explican por la persistencia de esa política imperialista.